Juan Illanes, ex militar, intentó liderar a los mineros... no le resultó

El Militar

Edad: 52 años | Estado civil: casado | Hijo: 1

Como ex militar, Juan Illanes Palma peleó el liderazgo al interior de la mina durante los primeros días de encierro. Le insistió al grupo que, más que conocimiento de minería, lo que se necesitaría con urgencia era disciplina y organización… algo que él, mejor que nadie, podría brindar. Pero ante el rechazo casi unánime de los demás, Illanes cedió y validó finalmente a Urzúa como cabeza.

Y fue también en su calidad de ex uniformado que, en uno de los primeros videos, se dirigió directamente al Presidente Piñera para contarle que ésta era la segunda vez que sacaba la cara por Chile y que se sentía muy orgulloso por ello. A lo que se refería el hombre era a que en 1978, permaneció varios días atrincherado en la cordillera durante la cuasi guerra con Argentina. “Y un mensaje cortito para Sebastián Piñera: tiene aquí un personaje no muy grande, pero que participó en un evento muy importante a nivel internacional en el año 1978”, le dijo.

Una de sus cartas más conmovedoras fue la que le escribió a Mario Kreutzberger, en la que le decía –cual miembro de un fan club— que lo admiraba y agradecía la visita que hizo a sus familiares en el campamento Esperanza. Don Francisco respondió el gesto desde Estados Unidos.

Carmen Baeza, su mujer, cuenta que ya cansado del sacrificio de trabajar en este rubro, tenía decidido comprarse un taxi y regresar a su Chillán natal.

El 9 de septiembre Juan, uno de los veteranos del grupo, celebró su cumpleaños bajo tierra. Ese día hizo “revista” a los 11 hombres que, como él, hicieron su servicio militar.
“El siempre cuenta que tenía que hacer hoyos en la pampa, del frío que pasaba en las trincheras y que conversaba y hasta tomaba mate con los argentinos que estaban al otro lado de la frontera, a la espera de que se desatara el conflicto”, recuerda Carmen.

Ella conoció a su marido cuando se lo presentó su hermano, Manuel Baeza, quien también estuvo en las trincheras el 78. “No recuerdo tiros, pero sí estábamos con fusil en mano esperando cualquier orden. Juan tenía voz de mando y nos entretenía harto porque siempre ha sido bueno para conversar y echar la talla”, contó Manuel Baeza a un medio regional.

El ex conscripto agrega que los dos años en la frontera también fueron duros para Illanes porque nevaba mucho en la zona y hasta “el pan llegaba verde”, recuerda.

Aun así, Baeza relata que su compañero era “bueno para alegrar las largas jornadas, incluso junto a los argentinos”, describiendo una situación semejante a la relatada en la película “Mi mejor enemigo”, donde se da a conocer la amistad trabada entre los militares.

Aunque Illanes llegó a cabo primero, no quiso volver al Ejército después de 1978 y hasta le recomendó a su hijo que priorizase la universidad. “Sin embargo, siempre se ha sentido orgulloso de su paso por el Ejército”, agrega su esposa.

En la Dirección de Movilización Nacional consta que 12 de los 33 mineros atrapados pasaron por instrucción militar, situación que excede el promedio nacional actual, en que menos de un 10% de la población que puede hacerlo, realiza el servicio.
“Su paso por las instituciones militares creo que les ayuda a mantener la calma y obedecer al líder innato que aparece. Esto les puede haber ayudado”, comenta el director de Movilización, general Gunther Siebert.

Otra de las pasiones de Illanes es la cocina… de hecho es uno de los pocos que se ha atrevido a reclamar, formalmente, por lo desabridos que le resultan algunos de los platos que les mandan desde la superficie. Obvio, el menú está diseñado para mantenerlos fuertes y en buen estado físico, no para deleitarlos.

Estaba convencido de que su paso por el Ejército sería más valioso en términos de organización que cualquier conocimiento minero.

Le encanta la cocina y es uno de los pocos que se ha atrevido a reclamar, formalmente, por lo desabridos de algunos platos que les mandan desde la superficie.