Raúl Bustos: escapó del maremoto en Talcahuano y le tocó el derrumbe

El comerciante

Edad: 40 años | Estado civil: casado | Hijos: 2

Raúl ha vivido en carne propia las 2 grandes tragedias que sacudieron a nuestro país este año: en febrero sufrió el impacto del terremoto y maremoto en su ciudad natal, Talcahuano… y luego esto, quedar atrapado por casi dos meses, bajo tierra.

En el sur Bustos trabajaba en un artillero por las mañanas y como comerciante particular por las tardes. Como el maremoto destruyó su lugar de trabajo, decidió emigrar en busca de nuevos horizontes. Por eso partió lejos, muy lejos. Donde nada malo le pudiera ocurrir.

Rosa Ibáñez, su madre, afirma que ese fatal 5 de agosto “a Raúl no le tocaba trabajar, pero como se habían averiado unas cañerías de la mina y él es mecánico, entonces lo llamaron para que colaborara igual”.

A su mujer, Carolina Narváez, la veía una vez al mes, cuando viajaba más de 20 horas en bus para sus días libres. En su cartas, Raúl no escatima en cariño: “Cosita: Ya sabías que las palabras que me mandaste me hicieron llorar. Bueno, no sé cómo decirte que siempre has estado conmigo, además de mi Dios que me dio las fuerzas para vencer la ansiedad del hambre que pasamos. Pero bueno, eso es lo de menos, mi Dios nos dejó vivos de milagro y con un propósito”.

En otra de los manuscritos Raúl cuenta que “aquí casi se desmayaron (por la falta de alimentos, los primeros días). Yo rezaba y pedía por todos, que si pasaba algo lo tomaran bien, porque en un momento ya pensaba que no rompían las herramientas el cerro. Pero a la que reventó le puse de nombre “Paz”: la ganadora, la que nunca pierde. Y rompió. Amor, no sabes la alegría que teníamos. Te amo, amor, y a mis hijos, y a toda la familia. Eso sí, falta mucho para que nos saquen”.

Según los planes de la familia de Raúl, “lo ideal es que pudiera volver a Talcahuano y rehacer su vida acá, cerca de nosotros… él nos ha dicho eso, pero falta que encuentre algo concreto. Ojalá el ministro Golborne nos ayude con eso”.

"Mi Dios nos dejó vivos de milagro y con un propósito".