Realizado por alumnos de la Carrera de Periodismo de la Universidad de Desarrollo.
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información @Empresa El Mercurio S.A.P., editor del diario La Segunda.
Por Joaquín Guzmán y Valentina Vidaurre
absolutamente nada, ni un peso a ninguno de esos hogares ni esas cosas y cada vez que no lo dejo, me siento mejor que antes. Siento que son un robo total, una mentira. Yo no doy ni un puto peso, y en general los humanistas no dejamos, porque nosotros criticamos un sistema”.
En lo político, en los ’90 su vida partió como embajador de Patricio Aylwin en Nueva Zelanda, un país que el humanista define como “un modelo a seguir”. Aunque dice que la experiencia le pareció “suficiente. El mundo diplomático no es lo mío”. Mientras Hirsch estaba como embajador, su amiga Laura Rodriguez, presidenta del PH y única representante de éste en el Congreso, murió de cáncer. Este hecho hizo que Tomás decidiera dejar su cargo y volver a Chile. Quería entrar a la política con todas sus fuerzas. 1999 y 2005 fueron años clave: fue dos veces candidato presidencial; su mejor desempeño fue el segundo (5,4%)... aunque fue menor a lo proyectado en campaña.
Durante el Gobierno de Michelle Bachelet fue un duro crítico, especialmente con respecto a lo que fue la revolución pingüina y la inauguración del Transantiago. De hecho, los humanistas impulsaron la campaña “yo no pago”, en la cual se reivindicaba el derecho de los pasajeros a no cancelar por un servicio de pésima calidad. Y también lanzaron una campaña de “desobediencia civil yonopago.cl”
En cuanto a las responsabilidades, Hirsch apuntó tanto a la ex Mandataria como a su antecesor, Ricardo Lagos. ”Se hizo publicidad engañando a la ciudadanía de Santiago al ofrecer un servicio que no estaba en condiciones de ofrecerse. Debe declarar quién ordenó este plan, esto es, el ex Presidente Ricardo Lagos... El es verdadero responsable de todo este escándalo y ni siquiera ha dado la cara”.
Pero su mirada cambia cuando habla de la madre de la ex Presidenta, Angela Jeria, quien hizo de nexo para que Hirsch pudiera exponerle sobre la Marcha Mundial de la no Violencia. Todo se fraguó en un encuentro con Jeria en un
almuerzo en la embajada de Venezuela, según
relató Hirsch en un blog, un año antes de que Bachelet terminara su mandato. “Fue inmediato su interés y eso derivó en un segundo encuentro en su departamento en el cual le solicitamos nos ayudara a hacer posible encontrarnos con Bachelet para exponerle sobre la Marcha. Doña Ángela Jeria, mujer comprometida y de palabra, hizo las gestiones del caso y en pocas semanas la Presidenta nos recibió. (…) Inmediatamente se convirtió en la primera gobernante en adherir a la Marcha Mundial”.
SU OPCION DE LLEGAR AL
CONGRESO Y SU FUTURO
Durante las presidenciales pasadas, Marco Enriquez Ominami (ME-O) le ofreció ir de candidato a diputado en su lista, pero no aceptó, decisión a la que muchos se opusieron dentro de su partido. “Debería de haber aceptado, pero Tomás dijo: yo dije que no iba a ser candidato y voy a mantener mi palabra, dice Rodrigo Erazo.
Hirsch agrega que no se presentó porque “yo no nací con vocación de candidato para toda la vida, nací con vocación de estar donde pueda hacer cosas... evidentemente haber ido en la lista de MEO era llenar un cupo”. Y asegura que no se presentará mientras no tenga la opción segura de ganar una candidatura: “voy a ser candidato cuando pueda ser diputado o senador o algo”.
Dice que hasta marzo, cuando salga a la venta su libro sobre Silo, estará “completamente dedicado” a este tema. Y que si llega a tener el éxito que tuvo con “El Fin de la Prehistoria” (que lo tuvo en 2007 seis meses viajando por distintos países), partiría una gira mundial para su promoción.
Y aunque no sabe cómo será su regreso a la esfera política, admite que “el que nace chicharra muere cantando, o sea, ahora estoy muy entretenido, pero no me cabe duda que voy a volver a estar metido en la política más local, no tengo ninguna duda”, confesó.
