Realizado por alumnos de la Carrera de Periodismo de la Universidad de Desarrollo.
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información @Empresa El Mercurio S.A.P., editor del diario La Segunda.
Por Joaquín Guzmán y Valentina Vidaurre
Fueron súper cercanos, fue una conversación de piel, súper humana”, contó.
¿HEREDERA POLÍTICA?
Dentro del PH también participa su esposa, Juanita Vergara, y su hija Daniela. Al hablar de esta última, el ex presidenciable se entusiasma: asegura que su hija tiene mucho futuro político “más del que ella ve... ¡Sería buenísima!. Todo el partido la ve así; sería la diputada, como en su momento fue Laura Rodríguez; todos ven a la Daniela, pero falta que ella se vea”. Y acota que “tú la ves así tranquilita, pero agárrate Catalina cuando está apasionada… Es más apasionada que yo”, afirma el humanista.
La relación entre Tomás y Daniela es muy cómplice. Ella confiesa que “yo soy regalona de mi papá ¡así terrible! Soy de abrazarlo, de hacerle cariño, de estar con él, salir a pasear o irme a comer con él a la casa”. Y él la apoya 100% en la decisión de haberse ido a vivir con su novio: “Me encantó que arme su ámbito, su vida... Nuestro vínculo, nuestro regaloneo no depende de retenerla acá en la casa, me encanta que haga sus cosas, su mundo, su vida”. Y es claro que su padre “suspira” de pensar que ella pudiera tener algún día un puesto en el Congreso.
En cambio su hijo Benjamín –que dio la PSU en 2010 y se acaba de matricular con 758 en Ingeniería Comercial en la U. de Chile, lo que dejó “chocho” a su papá, que hasta una carta mandó a “La Segunda” para contarlo- no está vinculado al PH, simplemente no le interesa, “prefiere el fútbol y salir con los amigos”, contaron Tomás y Daniela.
SUS DISTINTOS RECORRIDOS
Amante de la buena mesa, Tomy -como le llaman sus compañeros del partido-, goza siendo anfitrión, teniendo una clara tendencia a los mariscos. “Hace unos camarones como picantes, con unos ajíes que se compró no sé dónde, le quedan buenísimos”. Y se junta una o dos veces por semana con sus mejores amigos: Darío Ergas y Rafael Edwards, para profundas conversaciones... sin alcohol ni cigarro.
Dicen que Hirsch tiene espíritu aventurero, que le entretiene sobremanera recorrer una ciudad y en la madrugada llegar a otra, teniendo sólo el pasaje de vuelta. Y a veces sorprende a su mujer, Juanita –con quien lleva 28 años casado-: “Cada tanto sale con: nos vamos de viaje con la mamá, un viaje sorpresa para ella porque estamos de aniversario”, relata su hija. Al igual que su estable matrimonio es su vida laboral: desde la época universitaria este ingeniero civil no titulado ha tenido como sustento una empresa fotográfica, en la que es socio con sus dos hermanos. Dice que es “un empresario con pocas ambiciones, sin pretensiones económicas. Vivo bien, es una buena empresa y a lo mejor podría dar mucho más, pero no me interesa, y afortunadamente con mis hermanos compartimos ese criterio”.