El macizo sigue activo, tras la erupción del pasado 3 de marzo, lo que mantiene la alerta en nivel naranja, según el Sernageomin, mientras que Onemi tiene alerta amarilla para las comunas cercanas al lugar.
SANTIAGO.- El volcán Villarrica volvió a mostrar esta noche de lunes inestabilidad e incandescencia esporádica, luego de más de dos meses de actividad, incluyendo una erupción ocurrida el 3 de marzo pasado.
Esta tarde, el Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernagoemin) y su Red Nacional de Vigilancia Volcánica, a través de su Observatorio Volcanológico de los Andes del Sur (Ovdas), informó que las señales sísmicas permanecen estables en niveles energéticos moderados.
Asimismo, señaló que continúa el registro de sismicidad LP repetitiva y durante la pasada jornada las señales acústicas aumentaron su ocurrencia, pero permanecen en niveles energéticos bajos.
Esta noche se observó incandescencia esporádica y de baja altura, mientras que durante la jornada, se ha observado desgasificación permanente con un carácter difuso y con baja potencia de salida. El sistema permanece en una fase inestable.
Por esta razón, el organismo mantiene su nivel de alerta técnica volcánica en Nivel Naranja, mientras que Onemi sostuvo la Alerta Amarilla para las comunas de Villarrica, Pucón y Curarrehue en la Región de La Araucanía y la comuna de Panguipulli en la Región de Los Ríos, vigente desde el momento de esa erupción.
Además, señala que ante una posible ocurrencia de erupción menor, se considera el área de peligro aquella contenida en un radio de cinco kilómetros alrededor del cráter activo, que incluye tanto el caso de proyecciones balísticas de material piroclástico, flujos de lava y lahares (aluviones volcánicos), aunque estos últimos pueden continuar su recorrido más abajo de los cinco kilómetros, a lo largo de los cauces que nacen del volcán.
Por lo tanto, se deben considerar franjas de 200 metros a cada lado de los cauces en los cuadrantes suroeste a noreste, que podrían albergar lahares.
