Tania González y Héctor Letelier deberán cumplir 8 años de prisión tras ser declarados culpables de ejercicio ilegal de la profesión y obtención fraudulenta de remuneraciones del fisco.
SANTIAGO.- La Corte de Apelaciones de Santiago rechazó el recurso de nulidad presentado por uno de los dos falsos médicos que se desempeñaron en la Universidad del Mar como docentes -y ejercieron como tal en diversos centros de salud- que en diciembre pasado fueron condenados a penas de cárcel por los delitos de ejercicio ilegal de la profesión y obtención fraudulenta de remuneraciones del fisco que les imputó la Fiscalía Occidente.
En fallo unánime, la Tercera Sala del tribunal de alzada -integrada por los ministros Alejandro Madrid, Soledad Melo y el abogado integrante José Luis López- desestimó los argumentos presentados por la defensa de Héctor Letelier Pantoja y ratificó la sentencia del Quinto Tribunal Oral en lo Penal que lo condenó -junto a su ex pareja Tania González- a 8 años de cárcel.
El pasado 24 de diciembre, ambos fueron declarados culpables de los delitos de ejercicio ilegal de la profesión y obtención fraudulenta de remuneraciones del fisco.
La sentencia estableció una condena de cinco años y un día por el primero de los de los ilícitos más una multa de 11 UTM, mientras que por el segundo hecho recibieron una pena de tres años y un día de presidio y una multa de 6 UTM.
Veredicto
De acuerdo a la convicción a la que llegó el tribunal, la mujer ejerció actos propios de enfermera y médico cirujano al desempeñarse como Jefa de Carrera de Enfermería y docente en la misma área, y como Directora del Área Salud en la sede de Maipú de la Universidad del Mar.
Para ello, según las pruebas exhibidas por el fiscal Tufit Bufadel, presentó copias fotostáticas del título de Enfermera y profesora de Estado, otorgado supuestamente por la Universidad de Chile. Incluso, para reafirmar su supuesta condición de médico, Tania González usaba un delantal blanco que la identificaba como profesional de dicha casa de estudio.
La acusada, además, habría otorgado 68 licencias médicas falsas, las que fueron emitidas mediante talonarios adquiridos sin tener la calidad ni competencia médica para ello.
Asimismo, prestó servicios para el Hospital de Curacaví y en el Servicio de Salud Metropolitano Central, obteniendo fraudulentamente del Fisco el pago de remuneraciones cercano a los $4 millones.
En la instancia, los jueces también acogieron la demanda civil presentada por el Consejo de Defensa del Estado (CDE) por fraude al fisco.
