Georgy Schubert enfatizó además que debe hacerse una investigación objetiva, imparcial y pronta respecto a los hechos de tortura registrados al interior de la cárcel de Rancagua en agosto del año pasado.
SANTIAGO.- A tres días de dejar su cargo, este miércoles el Defensor Nacional Georgy Schubert se refirió al episodio de torturas por parte de gendarmes contra internos registrado al interior de la cárcel de Rancagua, enfatizando que debe hacerse "una investigación objetiva, imparcial y pronta".
Ello, en relación al periodo de tiempo en que la causa ha permanecido desformalizada, aún cuando la Fiscalía abrió en agosto de 2013 una indagatoria, días después de ocurrido los hechos.
"Por supuesto que debe hacerse siempre respetando la presunción de inocencia, pero cuando se denuncian presuntos delitos de torturas, tratos crueles e inhumanos, es una obligación de Chile que se realicen estas investigaciones y se esclarezca todo con prontitud para que se existan sanciones en caso de que se determinen responsabilidades", agregó.
Asimismo, enfatizó que en caso de que los funcionarios que ya fueron identificados y que actualmente están suspendidos, necesiten defensores públicos, podrán contar con ellos.
"Nosotros siempre garantizamos defensa a todas las personas", dijo, aseverando que "si los gendarmes requieren defensa pública, van a tener los mejores defensores con independencia y autonomía para ejercer su trabajo, porque es una cosa de principio, independiente de cualquier situación".
Los apremios ocurridos el 3 de agosto de 2013 fueron precisamente denunciados por la Defensoría, que al recibir los videos que registran el intento de fuga de dos internos descubrieron los malos tratos que recibió un grupo de reos en el patio del recinto carcelario.
El Ministerio Público tomó conocimiento de la golpiza días después del incidente y desde entonces mantiene abierta una causa por presuntos actos de apremios ilegítimos.
