El estallido ocurrió un día después de lo ocurrido en la provincia de Paktika, donde 57 personas fallecieron en un ataque perpetrado durante un partido de vóleibol.
WASHINGTON.- Dos soldados estadounidenses murieron este lunes cuando el vehículo en el que iban explotó por una bomba artesanal en la capital de Afganistán, Kabul.
Uno de los militares era un suboficial y el otro un soldado raso, dijeron funcionarios del Pentágono, que se mantuvieron en el anonimato.
La explosión ocurrió un día después de otra, durante un partido de vóleibol, que mató al menos a 57 personas en la provincia de Paktika, en la frontera con Pakistán.
Más de 2.200 estadounidenses murieron en Afganistán desde el inicio de la invasión norteamericana.
La cantidad de víctimas norteamericanas bajó notoriamente en los últimos dos años en ese país, donde las fuerzas locales retomaron la responsabilidad de las operaciones de seguridad. Pero la policía y el ejército afganos sufrieron fuertes bajas, con 4.634 muertes en lo que va de 2014 y 4.350 en 2013.
Según el diario "The New York Times", el Presidente Barack Obama prolongó un año más las misiones de combate de los soldados estadounidense en Afganistán.
Hasta ahora, la posición oficial era que los operativos de la OTAN acabarían a fines de 2014 y que los 9.800 soldados estadounidenses (a los que se suman 3.000 soldados de Alemania, Italia y otros países) presentes en esa fecha sólo servirían de apoyo y para formar a las fuerzas afganas.
