La nueva Ley de Derechos y Deberes eleva de dos a cuatro años la prohibición de ingresar a estadios a quienes cometan delitos relacionados con este deporte, incluyendo los banderazos, arengazos o celebraciones.
SANTIAGO.- Con un apoyo transversal se aprobó esta tarde en el Senado el proyecto que modifica la Ley de Violencia en los Estadios, que ahora pasará a llamarse Ley de Derechos y Deberes en Espectáculos de Fútbol Profesional y cuya mayor novedad, es que endurece las sanciones para los organizadores e hinchas que giran en torno a este deporte.
El proyecto presentado por el Ejecutivo apunta a tres elementos esenciales: Ampliación de la aplicación de la ley a hechos o actividades vinculados al fútbol (entrenamientos, desplazamiento de hinchas desde y hacia el estadio, y festejos en lugares públicos); régimen sancionatorio efectivo (multas a los clubes que incumplen la ley y sanciones más fuertes para hinchas que se apartan de la comunidad del fútbol); y estatutos de derechos y deberes de los hinchas.
Esto significa la ampliación de la aplicación de la ley a hechos y circunstancias conexas como banderazos, arengazos, celebraciones, entre otros, los cuales antes estaban exentos de la aplicación de la ley, terminando sin sanción alguna.
La nueva legislación incorpora un completo catálogo de deberes y derechos para los hinchas del fútbol, e implica que efectivamente "los hinchas que cometan faltas o delitos en estos eventos podrían quedar con prohibición de ingreso a espectáculos de fútbol profesional".
En esa línea, se agrega como delito "el secuestro de buses" en estos eventos deportivos. Además "habrá un régimen sancionatorio para los organizadores de los espectáculos de fútbol profesional en caso de que no cumplan lo establecido en la ley o lo que determine la autoridad".
Las multas para estos casos van desde 1 a las mil UTM, cifra que se puede duplicar en caso de reincidencia. Estas sanciones serán proporcionales al riesgo asociado a cada partido.
Respecto de las nuevas penas para delitos e infracciones, se duplican "los períodos de prohibición de ingreso a los estadios; así quienes cometan delitos quedarán de dos a cuatro años sin poder ingresar a todos los estadios con ocasión de espectáculos de fútbol profesional. En el caso de las infracciones, será de uno a dos años. Las infracciones pasan al Juzgado de Policía Local".
También "se regula el derecho de admisión y se establecen especificaciones para su aplicación, incorporándose la solidaridad en su ejercicio, es decir, si un club aplica derecho de admisión, todos los demás clubes lo hacen".
Otro punto destacado es que "los intendentes tienen nuevas facultades" para que "con razones justificadas en alteraciones a la seguridad y el orden público, podrán rechazar la programación de un espectáculo de fútbol profesional, en cuanto al día, horario y lugar en el cual este se desarrolle, además de revocar la autorización comunicando su determinación a carabineros, organizador y árbitro".
Antonio Frey, subsecretario de Prevención del Delito, destacó que "esta es una muy buena noticia para la comunidad del fútbol. Como gobierno hicimos un análisis y evaluación de la problemática respecto de la seguridad en el fútbol, y llegamos a la conclusión de que había que perfeccionar la ley. La aprobación fue por unanimidad y contó con el apoyo de todos los sectores. Con esta ley tendremos mejores herramientas para avanzar en mejores niveles de seguridad, bienestar y convivencia para toda la ciudadanía con ocasión de espectáculos de fútbol profesional".
Por su parte, José Roa, jefe del Plan Estadio Seguro, señaló que "lo que los hinchas esperan es que sus clubes los cuiden. La responsabilidad y disciplina de los organizadores para garantizar la seguridad de un espectáculo es fundamental, y por eso habrá sanciones frente a los incumplimientos. Por el contrario, si los clubes, en su rol de organizadores del espectáculo, dan cumplimiento a la ley y las medidas adicionales que se les puedan exigir, además de estar garantizando mejores condiciones de bienestar, seguridad y convivencia a los asistentes, no sufrirán multas".
Agregó que "ahora la última palabra la tiene la Cámara de Diputados, que deberá ratificar el proyecto aprobado en el Senado".
