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Reconocidas marcas extranjeras ponen en vitrina sus nuevas colecciones para la temporada que viene, en el Santiago Fashion Week que se realiza en el Hotel W.


Los vaivenes de espigadas mujeres desfilan ante la atenta mirada de fashionistas. Los flashes encandilan el paso del enjambre de modelos que este fin de semana se toman el Hotel W. Y es que las grandes capitales del mundo al menos una vez al año se transforman en pasarelas de alta costura. Esta vez, es nuestro turno.

El Santiago Fashion Week se toma la ciudad para presentar las tendencias de la estación venidera.

Este evento, que se presentó por primera vez en Chile en 2006, llega esta vez de la mano de la productora Patagonia Imagen. Reconocidas marcas extrajeras muestran sus nuevas colecciones para la temporada que viene. Anoche fue el turno de Jenny Duarte (Perú); Benito Fernández (Argentina) y Cavalera (Brasil). Esta noche lo harán como representantes de la moda nacional Claudio Mansilla y Karyn Coo.

La importancia de eventos de este tipo es innegable, pues concitan la atención de todos los amantes de la moda y el estilo. Para la diseñadora chilena Karyn Coo, "es muy gratificante poder mostrar tu trabajo en este tipo de plataformas y que se esté implementando en Chile". Advierte que "para uno, como diseñador, es importante ya que es el momento que se tiene para ver tus diseños en pasarelas, fluir al compás de la música y ver la respuesta de la gente y tus clientes, que son los que van a ver tu nuevo trabajo".

No sólo los diseños concitan la atención; también la presencia de maniquíes como Izabel Goulart y Renata Kuerten que junto a más de 25 modelos nacionales, argentinas y brasileñas llenan de glamour y belleza la montada pasarela del Hotel W.

La presentación culmina con una fiesta de clausura, en donde participará el conocido DJ de la República de Moldavia, Sasha López.

Pero ¿qué tan interesados están los chilenos en ropa de alta costura? Cristián Pringles, productor general del evento, sostiene que "Chile es un país atractivo para las marcas de todo tipo, en especial las de lujo, que desde hace unos 6 años comenzaron a instalar sus tiendas en nuestro país. Existe un público con el poder adquisitivo, dispuesto a pagar por calidad y exclusividad".

Cada vez más se toma conciencia de que la ropa no sólo es moda; es una inversión. Y en eso, las redes sociales y la conectividad han colaborado mucho, comenta Pringles.

Y agrega que "de a poco las nuevas generaciones han comenzado a cultivar el estilo en el vestir (...) Santiago Fashion Week tiene esa motivación de ser una ventana de moda, tendencias y arte, porque la moda también es arte".