Los cambios de temperatura en un mismo día, como está ocurriendo hoy en nuestro país, obligan a agudizar el ingenio para lucir bien a toda hora. ¿Qué ponerse, de quita y pon, cuando está fresco? Aquí algunas ideas.
Por Leyla Hauva
En esta época en que el termómetro sube y baja sin control a lo largo del día, hay que agudizar el ingenio para verse bien desde la mañana a la noche, haga calor o comience a refrescar.
Además de escoger telas transpirables, que protejan de los rayos UV y de las oscilaciones, hay que pensar en algo más coqueto y con cierto sentido en el look. ¿Cómo abrigarse en verano sin perder la frescura y el estilo?
El lino, amo y señor
"Todos los materiales que son 100% naturales son la mejor opción. Me refiero al papel que ocupan las telas. Estas pueden ser de algodón, lana, sedas, lino y variantes. Esto es porque ayudan a la respiración de la piel, tienen mejor caída y se sienten mucho mejor", afirma Constanza Pérez, dueña de Zamba Canuta.
A la hora de trabajar, el lino se erige como amo y señor de la temporada. "Al ser una tela tan noble, jamás se pega o humedece, y abriga mucho cuando la temperatura cae", comenta Claudia Kauak, de Benetton.
Los blazers diferentes
Constanza Pérez dice que "los blazers en jersey y lino dan un look más desestructurado a las tenidas. Ideal para ir a trabajar en pleno verano y considerando los aires acondicionados".
Carmen Urenda, dueña de My Company Studio, sostiene que "un blazer en jersey queda bien entallado y se ve elegantísimo. También un lindo chalequito de mangas cortas se ve muy fresco. Esta prenda es un "comodín" para todo".
El algodón, siempre en la mira
Pero no sólo un material noble como el lino tiene lo suyo. Existen muchas adeptas al algodón. "Es un material natural; hay que fijarse que hay diferentes tipos de algodones, con distintos grosores. Los mejores son de Egipto, Brasil, y Perú. Idealmente los pima orgánicos, son los que la están rompiendo ahora. Porque es una tendencia que viene para quedarse por siempre, todo lo que es natural, el cuidado del medio ambiente, y de la mano trabajadora", sostiene Pérez.
Carolina Abadie, dueña de La Tienda de Carolina, recomienda como abrigo en temporada estival prendas de ese material, ya que "es muy fácil de llevar, no se arruga tan fácilmente y no abulta". Y es una opción que, dependiendo de la ocasión, puede ser más o menos formal. "El algodón, sin duda, es el rey siempre", enfatiza Carmen Urenda.
Pero el punto de tejido se mantiene como opción un poco más casual. De acuerdo con la opinión de Urenda, "para las tardes en la playa, es ideal un chaleco. Mucho más relajado y a su vez cómodo en el sentido que, si hace calor, se puede guardar fácil dentro de una cartera o bolso".
El crochet, muy femenino
"Hay una tendencia a los chalecos livianos de ruedo irregular lisos o estampados. También vienen mucho los chalecos con mangas cortas y detalles en lentejuelas, lurex o gasa", afirma Pérez.
El crochet de la abuelita se reinventa y reaparece temporada tras temporada. "Yo tengo una alternativa de chaleco corto tipo polera hecho a mano", cuenta Carolina Abadie.
Para Pérez, el crochet "es una bella y femenina tendencia que ahora está tomando mucha fuerza. Ocúpalos en <italic>shorts</italic>, pantalones, boleros, vestidos. Incluso si estás pensando en casarte es una buena opción. Es sexy, femenino y, a la vez, muy suave".
Todo dependerá de la ocasión, pero para una tarde en la playa o en el campo, a juicio de Kauak, "los tejidos de hilo o algodón, polerones o casacas livianas" son una gran alternativa.
Pero no hay que olvidar una opción mucho más liviana y que se acomoda según la ocasión: los echarpes. "Un bonito pañuelo, foulard o bufanda, complementa muy bien cualquier tenida. Le aporta color y, a la hora del frío, siempre es un buen aporte para cubrir sutilmente el cuello, la espalda y los brazos.
