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Alta gastronomía en el centro

En el centro cívico de nuestra capital no siempre es fácil encontrar algo más que un “buen lugar” para almorzar, especialmente si se busca un restaurante a las horas de oficina y que quede cerca de los puntos neurálgicos. Pero el Ambrosía (Merced 838-A, teléfono 6972023), tal y como lo hemos mencionado en otras oportunidades, está situado detrás de la Casa Colorada, es dueño de una terraza amplia y climatizada, queda cerca de la Plaza de Armas y de sus estacionamientos subterráneos, y permite la suficiente privacidad para un almuerzo de negocios, por ejemplo.

Recibe clientes desde las 10 de la mañana, a la hora del desayuno, y ofrece tanto comida a la carta como menús ejecutivos ($ 12.000) donde es posible combinar los platos de la carta, eligiendo diferentes opciones. Esta minuta incluye entrada, fondo y postre; café o té, y bebida, jugo o una copa de vino. Entre las alternativas, por mencionar algunas, se podría comer papas bravas o crema de zapallo Butternut; suprema rellena con queso camembert y acompañado de quínoa o salmón sobre risotto de hongos, y de postre rollitos de plátano o cheesecake.

Su cocina ha recibido nuevas ideas producto de un viaje que efectuó recientemente la chef Carolina Bazán, quien estuvo en Inglaterra, Tailandia y Vietnam, países cuyas culturas comienzan a influir en los menús diarios que brinda el establecimiento, lo que seguramente será aun más notorio en sus recetas de primavera. En cuanto a su carta actual, hay buenas ideas como el camembert apanado, el cangrejo en tostadas, el mix de mariscos servido en paila de greda caliente, las machas a la parmesana, y el tártaro de filete envuelto en jamón de waygú; en sopas, la de cebollas o la de la casa, una delicada crema de calabacín con garbanzos. Entre los principales, capellini en salsa de camarón, salmón ahumado y rúcula; calamares rellenos a la gallega, en su receta original, con arroz al azafrán; salmón y salsa de eneldo sobre risotto al limón; confit de pato con salsa de frambuesas y puré de zapallo camote, y garrón de cordero acompañado de charquicán. Para el final, merengues con castañas, rollitos de plátano con helado de naranja y jengibre, cake soufflé con corazón de chocolate derretido, crème brûlée, tarte Tatin, tiramisú o cheesecake. Hay vino por copas.

El lugar es apto, además, para realizar eventos de empresas, matrimonios o cócteles, y los clientes pueden contar con la banquetería del restaurante y disponer de las instalaciones del Museo Casa Colorada  -patrimonio cultural-  como sus frescos salones y un amplio patio colonial.

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Muestra de enoturismo en agosto

TurisVino, empresa chilena que acaba de crear un portal web que ofrece ventas y reservas de tours on line, efectuará, con el auspicio de Turismo Chile, el primer “workshop de enoturismo del país”, en consideración a que esta área especializada para viajeros interesados en el mundo del vino sigue aumentando en importancia, contribuyendo notoriamente a potenciar la imagen de nuestro país en el extranjero.

Esta demostración se realizará el martes 18 de agosto, entre las 9:30 y las 13:30 horas, en el nuevo hotel W Santiago (frente a la plaza Perú, de Isidora Goyenechea, Las Condes) y va a estar dirigido principalmente a la industria del turismo local y prensa especializada. En él se pretende enseñar lo que el enoturismo tiene para ofrecer en infraestructura, diversidad de programas, actividades temáticas, calidad de servicio, gastronomía y cultura. Habrá diversos stands de más de 20 viñas que mostrarán sus ofertas en este segmento, además de una amplia información sobre tres rutas de vino -de los valles del Maipo, Casablanca y Colchagua- que comprueban la importancia y las ventajas de esta nueva alternativa que combina el paseo campestre con el conocimiento de nuestros vinos. 

Mayores informaciones se pueden conseguir escribiendo al mail info@turisvino.com o llamando al teléfono 9460667, de Santiago.

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M. Soledad y Jaime Martínez (Yin y Yang)

Ostramanía en el Park Lane

Felizmente, con el regreso al hotel Park Plaza de William Vanderput, han vuelto a su acogedor restaurante “Park Lane” (Av. Lyon 207, teléfono 3724000, Providencia) las “manías” gastronómicas que lo caracterizaron hace ya tiempo. En esas presentaciones (la actual durará aún dos semanas) el chef Waldo Guerra añade a su carta habitual una lista de platos centrada en un producto especial, en este caso las ostras chilotas de borde negro.

Tuvimos ocasión de probar varias de las correspondientes recetas, comenzando por cierto por saborearlas al natural o con vinagreta de chalota. Otras entradas (todas entre $ 4.800 y $ 6.800) las presentan en crema, gratinadas a la parmesana, en carpaccio sobre coulis de perejil, y en tartaleta con quenelles de alcachofa. Como platos principales ($ 8.400 a $ 9.100), hay brochetas de ostras fritas y risotto, ragoût de ostras sobre blinis de verduras, mero con ostras en cremosa de azafrán, y escalopines de vacuno con salsa de ostras ahumadas. La “ostramanía” será el primero de este tipo de acontecimientos culinarios, y esperamos que la idea se repita.

Cabe advertir además que el “Park Lane” no sólo ofrece variados mesones de entradas y postres a la hora de almuerzo, pues también los tiene en la noche, pero los días martes y viernes su especialidad es, respectivamente, la comida italiana y los pescados y mariscos. 

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El “bourbon” aumenta su consumo

Dentro de la ola actual de preferencia por los destilados de diverso origen, el lunes de esta semana fue presentado en Santiago el “whiskey” Jim Beam. Este bourbon -como llaman en Estados Unidos a su versión del célebre whisky escocés-, que elaboran con una pasta fermentada de maíz, centeno y malta, y doble destilación, comenzó a venderse en 1795, aunque la familia Bean lo producía ya desde 1788. Actualmente abarca cerca de la cuarta parte del mercado en esa especialidad, con un rápido crecimiento, que sólo en Alemania alcanza a cuatro millones de litros, y representa una producción total de un millón de barriles.

Para Chile, la firma distribuidora IDS proyecta la cantidad de ocho mil cajas en su primer año. El alto consumo actual, ya no sólo de pisco, sino sobre todo de ron y vodka, en este segmento de las bebidas de alta gradación alcohólica augura una fuerte competencia, pero la presencia del Jim Beam aporta una nueva faceta respaldada por su éxito tanto en Norteamérica como en Europa.

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