La Mandataria advirtió que ahora vienen proyectos sobre los profesores y la desmunicipalización.
Foto Ramón Monroy, La Segunda
"Dimos un paso enorme para que Chile por fin tenga un sistema de educación más moderno, de calidad y sin discriminación".
Estas fueron algunas de las palabras que la Presidenta Michelle Bachelet usó esta mañana en La Moneda, para referirse a la aprobación de la primera parte de la reforma educacional despachada ayer en el Congreso que pone fin al lucro, la selección de alumnos y el copago.
Sin embargo, la Mandataria advirtió que este proceso continuará con otros proyectos.
"Vamos a tener los vinculados a los profesores, los de desmunicipalización y los de gratuidad en la universidad", dijo.
En esa línea, agregó que "obviamente sabemos que para avanzar en calidad necesitamos profesores reconocidos socialmente con buenos salarios, condiciones laborales dignas y carrera docente que permita una formación integral a la altura de la carrera que tienen los maestros en la sociedad".
Pero Bachelet no sólo se refirió a los docentes.
"Necesitamos que los colegios vuelvan al Estado, que podamos efectivamente trabajar en una nueva institucionalidad y, por supuesto, necesitamos que nadie quede fuera de la universidad", recalcó.
Y agregó: "Creo que hay dos cosas que la gente dice que les quiere dejar a sus hijos: una educación de calidad y una vivienda propia. Son los grandes anhelos, pero sin duda una educación que permita desarrollar los talentos y hacer realidad sus sueños".
Antes de terminar su intervención, la Mandataria hizo un llamado a las familias a que tengan calma y confianza. "No se van a cerrar los colegios; al contrario, todos los cambios se van a implementar gradualmente, justamente para apoyar a los colegios particulares subvencionados y que sigan haciendo así su trabajo educativo", afirmó.