"Me han hecho mucho 'bullying', pero sólo me puse un lente de contacto", parte aclarando Joaquín Lavín sobre su comentado -y caricaturizado en redes sociales- "nuevo look" que estrenó el domingo en televisión, sin sus clásicos anteojos.

"Muchas veces quise operarme; cuando era ministro de Educación me tocó caer en una manifestación contraria y alguien me hizo volar los anteojos de un manotazo, quedé medio ciego", cuenta, explicando que, como tiene miopía y presbicia, le preguntó a su oculista una forma para dejar de usar las gafas. "Hay una, pero hay que ver si el cerebro se acostumbra bien: me puse un lente de contacto sólo en el ojo derecho, y con él veo muy bien de lejos (ríe), y con el izquierdo veo bien de cerca".

-Ve de lejos mejor con el ojo derecho. ¿Por eso se puso a marcarle puntos a su sector?

-La visión es amplia, eso se mantiene.

-La UDI no respaldó su propuesta de que "sus candidatos renuncien al apoyo económico empresarial".

-Trato de plantear caminos o alternativas. La izquierda siempre quiere dejar encadenada a la UDI al pasado, con el tema Pinochet, y como la defensora de los empresarios. Trata de imponer injustamente que "empresario" es sinónimo de "abuso". Y cuando rindes un minuto de silencio en homenaje a Pinochet, estás cayendo en ese juego. Yo planteo un camino; si se podrá hacer o no y con qué velocidad, la UDI tendrá que verlo.

-¿Es suficiente esa medida para desmarcarse del empresariado? ¿O la UDI debe tomar otras medidas para sacarse ese "estigma"?

-No se trata de sacarse un estigma. Se trata de que la UDI no es la defensora de las empresas, sino que la defensora de una economía social de mercado, que favorece a los ciudadanos, y se basa en la competencia. Esos son nuestros principios, y los tenemos que defender.

-Su planteamiento se suma a otros históricos de la UDI. ¿En qué debe mejorar la directiva de Ernesto Silva su gestión?

-A Ernesto Silva le ha tocado difícil. Pero él, Cristián Monckeberg, Felipe Kast, la nueva generación es la que tiene una oportunidad impensada.

Nadie habría pensado que Michelle Bachelet iba a tener una caída tan fuerte en su apoyo. Para eso, ellos tienen que adecuar los partidos para este escenario, y provocar la unidad en torno a un proyecto común. No son cosas tan fáciles de hacer, pero en la UDI Silva tiene las cualidades.

Desmarcarse de Pinochet

-Eliminar las loas a la dictadura en la declaración de principios de la UDI, ¿es impracticable por la división que genera o porque la crisis de Penta no deja margen?

-Hoy, hablarle de Pinochet a uno de mis hijos es como cuando mi abuelo me hablaba de Gabriel González Videla o Carlos Ibáñez. Hoy hay que abrir las puertas de la UDI a los jóvenes que no tuvieron nada que ver con ese pasado, y los principios no están atados a ninguna fecha. No es desconocer la historia ni lo que pasó ni lo que hicimos ni de lo que fuimos parte.

-¿Y el parlamentario, dirigente o militante que tiene su foto de Pinochet, que toma esto como una traición?

-Algunos lo toman equivocadamente, como que esto fuera renegar del pasado. No es renegar del pasado, sino adecuar la UDI a su nueva etapa.

A muchos militantes de la UDI les molesta el doble estándar de la izquierda: se molestan por el homenaje a Pinochet, pero tienen en la Cámara a personas que dieron permiso al atentado a Pinochet. Tenemos que entender que el negocio de la izquierda es mantener a la UDI encadenada al pasado; no caigamos en ese juego.

"Délano es 100% correcto"

-¿Cuánto daño ha provocado a la UDI la crisis del caso Penta? ¿Es peor que el caso Spiniak?

-No, el caso Spiniak fue mucho más grave, tenía otra dimensión.

-¿Cuánto ha dañado a la UDI?

-Son cosas muy prematuras como para decirlas ahora.

-Como ex jefe de campaña presidencial de Evelyn Matthei, ¿está seguro de que Penta no les dio dinero de forma irregular?

-Absolutamente.

-¿Revisaron la contabilidad de la campaña cuando estalló el caso?

-Exactamente. Se hizo una revisión. Estoy totalmente tranquilo.

-El ex gerente de Penta, Hugo Bravo, dijo que el aporte a la campaña de Matthei fue legal. ¿Cuánto les donó Penta por esa vía?

-Ni yo lo sé, porque fue aporte reservado.

-Carlos Alberto "Choclo" Délano es uno de sus mejores amigos. ¿Lo ha visto?

-Soy amigo de hace muchos años, es una persona muy importante. Él fue el inventor de "Viva el Cambio" para la campaña de 1999. Él y Ernesto Silva Bafalluy me convencieron de ser candidato a alcalde la primera vez. Ha sido una persona muy influyente en mi vida política. Más allá de lo que ocurra, esa amistad va a permanecer para siempre.

-Otro de los grandes amigos de Délano, el ex Presidente Piñera, dijo que si se prueban irregularidades o ilícitos, él tendrá que responder ante la justicia. ¿Pone las manos al fuego por él?

-Creo que es una persona ciento por ciento correcta. Ahora, obviamente, puede haber errores, y eso tendrá que verlo la justicia, pero es una persona ciento por ciento correcta.

Presidenciables "a la altura"

-Piñera entregó un claro mensaje: aún no define si será candidato presidencial, no ha renunciado a eso. ¿Debe ir a una primaria?

-Son cosas personales. Pero es obvio que el próximo candidato presidencial de la centroderecha va a surgir de una primaria. Hasta Michelle Bachelet se sometió a primarias. ¿Por qué Piñera no se va a someter a primarias? ¡Obviamente que sí!

-¿Y la UDI?

-Hoy, la UDI no tiene candidatos presidenciales a la altura de RN, donde ya se han declarado como tales Ossandón, Allamand y Espina. La UDI no está en esa situación, pero nada indica que eso no puede ocurrir al 2017. Por otro lado está Sebastián Piñera...

-¿Se imagina a la UDI apoyando o proclamando otra vez a Piñera para que compita con el candidato de RN?

-No es un escenario irreal. Si los partidos no tienen candidato propio, perfectamente pueden apoyar a un independiente.

-¿Comparte la queja del sector de que les falta relato y contenido, de que no basta con «Yo me rebelo»?

-Obvio, la Alianza tiene que apostar su éxito no al fracaso del Gobierno, sino que a la fortaleza de sus propias ideas. Ahora hay que ponerle contenido a ese proyecto y ser gobierno para la clase media.

-Su sector ha intensificado las críticas al Gobierno. ¿Volvería a declararse "bacheletista-aliancista"?

-En mi programa de radio, muchos auditores me llaman y me dicen "oiga, pero usted, cómo dijo que era bacheletista-aliancista". Esa frase tuvo significado en un momento. Primero, le sigo teniendo muy buena a la Presidenta Bachelet, por sus características personales. Y segundo, lo que significa eso del espíritu de los acuerdos. Y eso se mantiene.

-O sea que volvería a declararse "bacheletista-aliancista".

-Son frases que responden a un momento determinado. A ese momento y no a éste. Hoy día soy aliancista.

-¿Químicamente puro, ciento por ciento?

-Ciento por ciento.

El "foco" de la centroderecha

-Respecto al "relato" pendiente de la derecha, ¿cuál debe ser?

-El relato del 2017 tiene que ver con un gobierno para la clase media. Un Chile en donde las políticas sociales tienen que ser adecuadas para este nuevo enfoque. Hoy ya no es el Chile que combate la pobreza, la forma en que tradicionalmente lo hemos hecho durante todos estos años. Es un Chile mayoritariamente de clase media, que requiere soluciones distintas. En el fondo, el Chile de clase media requiere una manera de enfrentar los problemas distintos. Requiere el dinamismo y el empuje de Sebastián Piñera con la vocación social de Pablo Longueira y la que demostró Michelle Bachelet en su primer gobierno. Es una mezcla, por ahí va a ir la cosa del 2017.

-¿Cómo?

-La clase media, lo que necesita es muchas oportunidades. Por eso mismo, el dinamismo y el empuje de un gobierno como el de Sebastián Piñera que dio muchas oportunidades, mucho empleo, muchas becas, con una protección social en ciertos momentos de la vida. Esa es la adecuación que hay que hacer en las políticas sociales. Creo que se dará a conocer la encuesta Casen en los próximos días. Probablemente, va a haber una nueva reducción de la pobreza, y eso va a evidenciar que en el Chile de 1990, en donde el 10% era, por así decirlo, ABC1, había un 40% de pobreza. Hoy tienes el mismo porcentaje de ABC1, vas a tener una pobreza alrededor del 13%, y por tanto, vas a tener un 77% de clase media. Ese es el proyecto al que la centroderecha tiene que darle el foco.