Senadores fueron en bloque a La Moneda. Idea de adelantar el trámite para la próxima semana había provocado molestia.
Cuando la reforma tributaria estaba en su período de discusión más álgido -con sectores del oficialismo amenazando con rechazar la primera gran iniciativa del gobierno-, los seis senadores de la Democracia Cristiana y el independiente Pedro Araya se reunieron en la casa del timonel DC Ignacio Walker, con el ministro de Hacienda Alberto Arenas.
Allí, le hicieron ver al jefe de las finanzas públicas que estaban de acuerdo con el objetivo de la reforma, pero no con los mecanismos que La Moneda estaba planteando en ese momento.
Una escena similar se vivió esta mañana, pero en La Moneda. Temprano llegaron hasta Palacio todos los miembros de la bancada DC más Araya, para representarle al gobierno que era inconcebible adelantar para el próximo jueves 27 la votación del proyecto que pone fin al lucro, el copago y la selección.
Así lo había planteado ayer el presidente de la comisión de Educación del Senado, el PS Fulvio Rossi, quien argumentó que ello respondía a una solicitud expresa del ministro del Interior, Rodrigo Peñailillo, y de la propia Presidenta Michelle Bachelet.
La cita en Palacio duró dos horas, y aunque estaba solicitada por la DC desde antes, debió adelantarse dada la molestia que generó ayer el anuncio de Rossi. Fue presidida por el ministro Peñailillo y su par de Educación, Nicolás Eyzaguirre. No estuvo presente la ministra de la Segpres, la DC Ximena Rincón.
Según se supo, los senadores le expresaron al jefe de gabinete, primero que todo, su molestia con las declaraciones de Rossi, quien incluso dijo que la votación en comisión mostraría quienes son los realmente "leales" con el gobierno.
Pero, en el tema de fondo, le transmitieron al gobierno que quieren lograr un diálogo lo más amplio posible, que incluya no sólo a la Iglesia sino que a todos los actores del mundo educacional.
Los decé salieron satisfechos de la cita, pues aseguran que en ella dieron una demostración de "fuerza política".
Y es que, finalmente, el plazo para votar en la comisión de Educación se extendió hasta diciembre. Incluso, como la primera semana de ese mes es distrital, han evaluado seguir realizando audiencias durante esos días, para avanzar en el tema.
Ese mes también debiera votarse en general en la sala del Senado.
El plazo máximo para presentar indicaciones será el 31 de diciembre, y el 20 de enero se votará en particular.
La reforma debiera quedar despachada antes del 31 de enero, fecha que originalmente estaba estipulada y que a la DC le interesa pues quieren dejar reglas claras y estables para los sostenedores.
En la reunión en La Moneda, dicen en la DC, se les aseguró que el gobierno iba a llamar al senador Rossi.
El jefe de los senadores DC, Jorge Pizarro, indicó a la salida del encuentro que "los plazos están clarísimos, muy claros. El plazo de despacho del Congreso del proyecto de educación es el 31 de enero".
Pizarro aseguró que "la Presidenta no ha hecho ninguna petición de fecha. Lo que la Presidenta ha hecho es un compromiso de escuchar a todos los sectores y nosotros vamos a respaldar eso".
El independiente Pedro Araya, en tanto, sostuvo que "le dijimos al ministro que compartimos los principios de la reforma, pero no podemos presionar una fecha a condición de sacar una mala reforma. Y es inconducente que algunos senadores nos estén amenazando o acusando de falta de lealtad con el gobierno por no querer aprobarlo en una fecha".
En tanto, una reunión "clave" realizaban -al cierre de esta edición- el ministro Eyzaguirre y la subsecretaria Valentina Quiroga con la directiva del Colegio de Profesores.
La crisis interna del magisterio (reflejada en un paro espontáneo de los docentes en rechazo a la actuación de su presidente, Jaime Gajardo, quien respalda un acuerdo con el gobierno por la agenda corta) mantiene en una situación incómoda a las autoridades del Mineduc, debido a que no hay certeza de la real representatividad de la mesa.
"Ignacio Walker está siendo profundamente desleal con el gobierno", afirmó el senador PS, Fulvio Rossi. El parlamentario había informado ayer que el ministro Peñailillo le había solicitado, en nombre de la Presidenta Bachelet, acelerar el sufragio del proyecto de ley que pone fin al lucro, para el jueves 27. Esta mañana, tras el cambio luego de la cita DC-Peñailillo, Rossi -quien al cierre de esta edición no había vuelto a hablar con La Moneda- dijo que "a mí no me ha quitado el piso nadie, porque si la DC plantea una cosa al ministro del Interior y él cambia de opinión, no es problema mío sino del gobierno". Agregó que "el gobierno me pidió poner el proyecto el 27 y yo soy leal. Con la DC hay una quinta columna en la Nueva Mayoría. Están contra el proyecto".