A juicio de Navarro “la UDI no merece un salvavidas en medio de la tormenta Penta, ni menos una aceptación de que ‘esto es normal y todos están involucrados’”.
El senador Alejandro Navarro señaló que “la UDI ha elaborado una inteligente y ordenada estrategia para eludir y contener el escándalo de financiamiento ilegal a sus parlamentarios”.
Agregó que la estrategia de la UDI “se basa en tres ejes: intenta poner como centro de atención la ‘filtración de la Fiscalía, diciendo que es un delito; denuncian el gasto de campaña de la Presidenta Bachelet y quieren hacerse parte de la necesidad histórica de un nuevo ciclo del financiamiento a la política’, al cual históricamente se han negado”.
Para el presidente del MAS “sería un grave error político del Gobierno y de la Nueva Mayoría aceptar pasivamente que la UDI salga jugando de esta severa crisis política, donde ha quedado cuestionada su estrecha relación con los empresarios -en lo que calificó como- la peor crisis política desde la detención en Londres de Pinochet”.
“En esa ocasión tuvieron que definirse y hoy deberán hacerlo con Délano y compañía, es decir, deberán asumir su verdadera identidad, no podrán renegar de sus acciones, ni de sus socios”, indicó el congresista.
A juicio de Navarro “la UDI no merece un salvavidas en medio de la tormenta Penta, ni menos una aceptación de que ‘esto es normal y todos están involucrados’”.
Por otra parte, Navarro llamó al presidente de la UDI, Ernesto Silva “quien financió el 92% de su campaña a diputado con aportes reservados, a comenzar su discurso aclarando de qué sector empresarial proviene dicho financiamiento”.
En este contexto Navarro calificó como “una cortina de humo, la solicitud de una comisión investigadora a todos las campañas, lo que da cuenta de los manotazos de ahogado que está dando la UDI”.
El congresista fue claro en señalar que “la Nueva Mayoría tiene votos suficientes para una reforma profunda a la ley de financiamiento electoral, por lo que sería incomprensible un ‘acuerdo’ en esta materia”.
En esa línea indicó que “el acuerdo encabezado por Longueira el año 2003, ya sabemos el daño que le ha provocado a la política”.
Para finalizar el legislador señaló que “una salida a esta crisis es la creación de un Consejo Nacional Electoral (CNE), independiente del resto de los poderes del estado, responsable de la transparencia de los procesos electorales y de la fiscalización del financiamiento de las campañas. Esto es urgente para cultivar en los ciudadanos y ciudadanas, el afecto por la democracia como sistema de convivencia en nuestra sociedad”.
