Critica libros sobre gestión presidencial, adquisiciones no respaldadas y campañas comunicacionales.
En su día fueron publicados por la administración de Sebastián Piñera como parte del despliegue para dejar constancia de lo realizado en su gestión y otros hitos. Se trata de la colección de libros lanzados bajo el alero del plan «Chile Avanza con Todos», más otros producidos con ocasión del Bicentenario y de balance de su gobierno. Hoy, al menos once de ellos han sido cuestionados por la Contraloría, como parte de un duro preinforme que objetó diversos procedimientos y gastos del Ministerio Secretaría General de Gobierno y específicamente la Secretaría de Comunicación y Cultura (Secom).
En sus 24 páginas, el documento 40/2014 fechado el 4 de julio -y al cual tuvo acceso este diario- objetó once libros, de los cuales se publicaron 14.303 ejemplares y cuyo "costo total de impresión alcanzó la suma de $ 141.768.000". Ello, debido a que no se cumplió con normas que establecen que "ministerios, intendencias, gobernaciones y órganos y servicios públicos que integran la administración del Estado, no podrán incurrir en otros gastos por concepto de publicidad y difusión que los necesarios para el cumplimiento de sus funciones y en aquellos que tengan por objeto informar a los usuarios sobre la forma de acceder a las prestaciones que otorgan". En este caso, se trata del artículo 3° de la Ley 19.896.
Lo anterior, detalla el preinforme, debido a que los textos "tratan sobre logros alcanzados por la administración del gobierno anterior", "compromisos gubernamentales y su grado de concreción", además de testimonios a propósito de la conmemoración del bicentenario. Por ejemplo, sostiene el organismo, en el caso del libro "Chile Avanza con Todos, Balance del Gobierno del Presidente Sebastián Piñera Echenique, 2010-2014" -parte de la «Colección Memoria Presidencial»-, consta de "415 páginas e incluye 468 fotografías, de las cuales 131 corresponden al ex Mandatario".
Además, dice el texto, se infringieron las leyes de Presupuesto de 2013 y 2014, en el sentido de que los ministerios no podrán "efectuar campañas publicitarias que tengan por objeto único enumerar logros de una autoridad específica o del gobierno en general, con excepción de las cuentas públicas".
El inventario de Contraloría también detectó otros textos "de los cuales no se aportó información respecto de costos, documentación contable ni proveedor". Entre ellos figura "Primera Dama al servicio de los chilenos", editado en enero de 2014 -dos meses antes del fin de dicha administración-, y en el que según el organismo "aparecen 422 fotos, de las cuales 218" son de Cecilia Morel.
El documento también cuestiona que "no se encontraron registros que dieran cuenta de distribución de los textos", a lo que se suma el testimonio de funcionarios de la Secom.
El preinforme de la Unidad de Auditorías Especiales de Contraloría cuestionó también que la Segegob excedió "hasta en un 1.228,3% el gasto previsto originalmente por la entidad para el año 2013", tomando como referencia el plan anual de compras publicado en ChileCompra, hoy MercadoPúblico. Para dicho año se prespuestó un gasto de $288.400.000 pero se gastaron $3.607.527.000.
En los años 2011 y 2012 el gasto también excedió las previsiones iniciales, en un 265,3% y un 242,3% respectivamente. En tal caso, dice el texto "el servicio deberá informar de manera fundada y documentada sobre los motivos de las variaciones producidas en la ejecución de su plan anual de compras".
La auditoría también cuestionó la "carencia de medios de verificación de bienes y servicios adquiridos", por un total de $1.121.250.000. Ello corresponde a seis órdenes de compra relativas a campaña comunicacionales como "Chile Cumple" y la distribución de boletines, de los cuales no se encontraron copias del producto que "den cuenta de la elaboración o prestación" de dichos servicios.
Además, el documento objetó "98 operaciones, por valores superiores a 3 UTM, que no contaban con las respectivas órdenes de compra", cuyo monto es de $46.413.000. Y añade que la repartición "no ha dado cumplimiento a los principios de control, transparencia y publicidad de los actos".
El preinforme dio plazo de diez días hábiles para contestar las observaciones, cuestión que recae en las actuales autoridades de la Secom, que hoy dirige la periodista Paula Walker, y no en Mauricio Lob, quien estuvo a cargo de dicha unidad durante gran parte del gobierno anterior.