(Izq.) J. Miguel Izquierdo. (Der.) Carlos Ominami.
El cientista político y ex asesor del "Segundo Piso" de Sebastián Piñera -hoy director de Main Comunicación- dice que "el entorno completo" de las recientes encuestas, incluyendo la de La Segunda-UDD, muestran que "Michelle Bachelet está soportando la popularidad de su gestión sin la ayuda de ministros fuertes". Y que si bien sus notas no son buenas -obtuvo un 4,57 en sondeo de La Segunda -UDD- el ministro Rodrigo Peñailillo (Interior) "es percibido como el más empoderado".
-¿Es un riesgo para él el manejo de seguridad ciudadana? En ese ámbito saca un 3,63.
-La seguridad ciudadana no ha sido un tema del gobierno ni ha generado expectativas porque saben que su imagen, su relato, no gira en torno a la represión. Y no van a ceder en esa posición hasta que empiecen a sufrir costos políticos. Es un riesgo porque se ve una actitud reactiva frente a grandes delitos.
-¿Qué indica que Ximena Rincón y Álvaro Elizalde no sean percibidos como que se quedarán hasta el final?
-Es común ver cambios de gabinete y llegan momentos en que la gente demanda un cambio para enfrentar un segundo tiempo.
-Ud. estuvo en La Moneda. ¿Es común que a los equipos políticos les cueste afiatarse?
-Cuesta más cuando el líder tiende a trabajar y tomar decisiones individualmente o en círculos muy cerrados o cuando hay actores externos que inciden más que los mismos asesores. Y el comité político está demostrando que fue lo que Bachelet logró armar, no lo que había diseñado.
-¿Cuál sería la vida útil de este equipo? El primero de Bachelet duró cuatro meses; el de Piñera un año y cuatro meses.
-La Presidenta se ha visto obligada a jugar parte de su capital político para levantar la aprobación en políticas públicas, tomando un riesgo que no estaba diseñado. Y eso hace pensar que hay algunos ministros que no están cumpliendo la función. Creo que el ministro Elizalde va a sufrir en algún momento, porque la opinión pública no entendió lo que el gobierno quería hacer en la reforma tributaria ni en la educacional. Cuando la DC empiece a manifestar su distancia con más fuerza, y eso se va a notar con la llegada del ciclo electoral y el avance de la discusión por el binominal, será más probable un ajuste en el equipo.
-Que Elizalde apenas apruebe, ¿demuestra que el problema es comunicacional?
-Las comunicaciones son reflejo de decisiones políticas y el vocero siempre sufre menoscabo. Los ministros que buscan alta aprobación no detienen el conflicto para que no llegue a la Presidenta, por lo tanto el vocero es el espadachín que debe centrarse en el conflicto político y solucionarlo en lo mediático.
El ex senador PS destaca mejor posicionamiento del titular de Interior y dice que "la magra gestión del gobierno en su conjunto es también responsabilidad del equipo político como núcleo conductor del gabinete".
-¿Qué elementos destacaría de la encuesta La Segunda-UDD sobre el equipo político?
-El estudio confirma la significativa brecha que existe entre la aprobación a la Presidenta y la de su equipo de gobierno. En esto el gabinete político no es una excepción: aparece como más bien débil, en contraste con los de administraciones pasadas, y de ahí la calificación promedio baja para los tres ministros. De ellos, claramente el mejor posicionado es el ministro del Interior porque ha concentrado la agenda, es una autoridad que comunica bien, ha tenido protagonismo en iniciativas importantes como el cambio del sistema electoral y además resistió muy bien la interpelación.
Además, no se ve la imagen de un equipo sino de individualidades con distintas cercanías con la Presidenta.
-¿La evaluación discreta se debe a un equipo "en rodaje" o hay otros factores estructurales?
-Aquí se ensayó una fórmula de un gabinete con ministros poco conocidos y eso ha incidido en una baja apreciación del equipo político, aunque haya un mayor grado de conocimiento de sus miembros. La gente juzga que la magra gestión del gobierno en su conjunto es también responsabilidad del equipo político como núcleo conductor del gabinete.
-El rol de Peñailillo como jefe político es evaluado sólo con un 4,28.
-Cuando la evaluación global es deficiente el conjunto de las áreas son evaluadas igual, pero destaco que Peñailillo tiene mejor evaluación y se ha ido armando un espacio en la conducción política.
-¿Su cercanía con la Presidenta lo blindan para su permanencia?
-Da la sensación que es un ministro altamente estable por su cercanía a la Presidenta, de modo que él es un puntal absolutamente indispensable.
Yo apostaría que va a acompañar a la Presidente durante toda su gestión.
-No es la percepción que predomina en el caso de Rincón y Elizalde.
-Es una apreciación que va de la mano con una evaluación aún deficitaria del equipo político.
-En el equipo político hay al menos dos presidenciables.
-Durante la República para ser Presidente había que ser buen senador; hoy está bastante establecido que para ello hay que ser un buen ministro.
