Este jueves el parlamentario RN José Manuel Edwards encarará al ministro del Interior. Sus "antecesores" le recetan ser muy directo.
"Yo diría no crisparse, porque el que se crispa pierde", recomienda el diputado UDI Patricio Melero, quien interpeló a René Cortázar por el Transantiago (2009). "Y mantener siempre la interpelación en la dignidad que tiene, pero también en la severidad que supone", agrega. También advierte que "la interpelación es para que el ministro dé explicaciones sobre su actuar como autoridad y la de su gobierno" y "no permitir que sea un análisis sobre el actuar de gobiernos pasados". Por eso pide evitar que Peñailillo "se ampare, echando mano al expediente del gobierno anterior".
"Una interpelación ciudadana" le pide a Edwards el diputado Joaquín Godoy (Amplitud), quien -en medio del Mundial- interpeló este año a la ministra de Vivienda, Paulina Saball. "Nuestro compromiso de poner los votos para la interpelación (a Peñailillo) era eso", advierte, explicando que quieren que "las preguntas que lleve sean dudas que emanen de la ciudadanía, que tenga desde ya una utilidad, porque contesta las dudas de la gente en la IX Región". Asegura que así se hizo ante Saball, y que "si se logra que Peñailillo conteste las dudas de la gente, ya es un avance".
Para Nicolás Monckeberg (RN) -quien interpeló al ex ministro portavoz Francisco Vidal (2008)-, la receta es que Edwards "haga preguntas directas y precisas para evitar que el ministro Rodrigo Peñailillo responda vaguedades" y también "que lo presione a asumir compromisos públicos, con plazos definidos, sobre las soluciones para la Araucanía". Y de paso pide que la interpelación comience a operar "como un mecanismo más ordinario y regular de la oposición", pero que se deje de lado "tanto histrionismo y lograr que sea un diálogo mucho más directo".
La ex diputada UDI abrió la ronda de interpelaciones en el primer gobierno de Bachelet, ante Martín Zilic (2006), un mes antes de que éste dejara el Ministerio de Educación. Al parlamentario RN le recomienda elegir "preguntas cortas, tratando de que el ministro pueda aclarar las confusiones y contradicciones que existen en este tema". Y recalca que "no hay que perder de vista que lo importante es el objetivo: que el ministro aclare, que dé cuenta, obtener compromisos de su parte, y que el interpelador sólo es un medio para obtener eso de la autoridad".
El diputado Víctor Torres (DC), quien interrogó al ex ministro de Salud, Jaime Mañalich, afirmó que espera que su colega RN "tenga una plantilla de preguntas que esté a la altura de lo que significa un mecanismo de fiscalización, que no entre a una guerra de guerrillas".
Y que "no transforme esto en un intento de debilitar la figura del ministro del Interior".
El ex diputado Juan Carlos Latorre, quien (también en el gobierno de Sebastián PIñera) interpeló a la entonces ministra de Vivienda, Magdalena Matte, manifestó que "lo importante es centrar la interpelación en aspectos de política que dicen relación con la fiscalización que legítimamente la Cámara puede hacer a un ministerio y que no se personalice, ni en el ministro ni en el diputado interrogador". Y advirtió: "No creo estar en condiciones de darle consejos al diputado Edwards, él es extraordinariamente categórico en la defensa de sus convicciones y no siempre lo he visto con un criterio constructivo. Lamento expresar esta opinión, pero otros colegas de su misma bancada podrían hacerlo mucho mejor".
