Hace cerca de un mes, la Presidenta Michelle Bachelet envió algunas invitaciones especiales. El objetivo: Recibir en La Moneda a los ex mandatarios este jueves a las 09.00 de la mañana para un desayuno.

Según explicaron en el gobierno, el objetivo de la convocatoria es analizar el litigio con Bolivia en La Haya. La Paz pidió a la corte que obligue a Chile a negociar una salida al mar con soberanía.

En ese contexto, la cita se producirá al cumplirse exactamente un mes desde que La Paz entregara su memoria -primer dossier con sus argumentos detallados- a la corte internacional. Desde ese momento, Chile tiene tres meses para definir si pide a la corte declararse incompetente, evitando que el juicio avance. Sobre este punto, sin embargo, las posiciones en Santiago están divididas: varios señalan que sería un riesgo importante que La Haya rechazara esta presentación chilena y, agregan, la memoria boliviana fue construida expresamente para evitar que La Moneda pidiera la incompetencia del tribunal.

Este escenario será abordado en la reunión del jueves de Bachelet y los ex presidentes por el canciller Heraldo Muñoz y el agente chileno para la demanda, Felipe Bulnes.

Lo conversado en la cita será así un insumo importante para la reunión que Muñoz y Bulnes sostendrán el lunes siguiente en París, cuando se reúnan con el equipo de abogados internacionales para definir la estrategia de defensa.

Al desayuno ya confirmaron su presencia los ex presidentes Sebastián Piñera, Ricardo Lagos y Eduardo Frei.

Con este encuentro, Bachelet está replicando el modelo aplicado tanto por ella misma en su primer mandato como por Piñera durante el litigio limítrofe con Perú en La Haya: Ambos convocaron a reuniones con sus antecesores y con partidos políticos para socializar el estado del juicio y dar una señal de unidad.

Tensión de política interna y antesala de 21 de mayo

 

La asistencia de Piñera, según su equipo de ex ministros políticos con asiento en la Fundación "Avanza Chile", fue confirmada hace aproximadamente un mes. Esta será la primera vez que el ex Presidente pise La Moneda tras dejarla el 11 de marzo pasado y será el primer encuentro con Bachelet desde la ceremonia de cambio de mando en el Congreso.

Y si bien uno de los objetivos de La Moneda con el encuentro del jueves será dar una señal de unidad -no sólo en el marco de la demanda boliviana sino también en la antesala de la cuenta pública del 21 de mayo que Bachelet realizará la próxima semana-, la cita se producirá justo en medio de fuertes críticas contra la gestión de Piñera, tanto de parte del gobierno como desde la Nueva Mayoría. Ofensiva a la que se han sumado, en los últimos días, personeros de la Alianza como los senadores Andrés Allamand y Manuel José Ossandón, ambos RN.

Desde sus primeros días, la administración Bachelet ha cuestionado con medidas y hechos diversos aspectos de la era Piñera, paralizando sus proyectos de ley en el Congreso -lo que provocó un fuerte rechazo de la oposición-, criticando el nivel de gasto público e incluso el manejo de la política internacional.

En las últimas semanas, además, se activó una enérgica ofensiva contra la gestión en salud del gobierno pasado, que podría derivar en una acusación constitucional -evaluada por la Nueva Mayoría- contra el ex ministro del área, Jaime Mañalich.

En esa línea, parlamentarios oficialistas criticaron las deficiencias del hospital de Maipú y también se denunció que el anuncio de construcción del hospital de Puente Alto -realizado por Piñera en una actividad pública- sólo contaba con autorización para la creación de un consultorio.

Las críticas provocaron que el propio Piñera saliera a defenderse a través de su cuenta de Twitter durante el fin de semana pasado.

De igual forma, los ex ministros políticos de Piñera, además, han cuestionado errores iniciales del gobierno en los nombramientos y aspectos de reformas como la tributaria. Y desde su fundación se suelen coordinar informes y reuniones con parlamentarios para defender la gestión del ex gobernante y fijar posturas ante el Ejecutivo.