La simbólica imagen del presidente del PC, Guillermo Teillier, llegando a La Moneda a participar de una reunión de comité político -tras más de 40 años en que el comunismo no estuvo en el gobierno- llamó la atención de varios hace un par de semanas. Pero otro militante de ese partido frecuenta mucho más Palacio: desde el lunes, el secretario general de la colectividad, Juan Andrés Lagos, llega diariamente a su oficina en el Ministerio del Interior, donde -a pasos del salón de reuniones en que hay un cuadro de Salvador Allende- llegó como asesor del jefe de gabinete, Rodrigo Peñailillo.

A días de asumir su nuevo rol en La Moneda, Lagos explica sus alcances y afirma que mantiene intacto su rol en el PC. Tal como el otro asesor del ministro, el secretario nacional DC Víctor Maldonado. La presencia de ambos en Interior, dice Lagos, "compromete" a sus partidos "con el programa".

Y ante el debate de la semana -tras los dichos del presidente del PPD, Jaime Quintana, sobre una "retroexcavadora" para desarmar el "sistema neoliberal"- pide que los partidos oficialistas estén "a la altura" para respaldar a la Presidenta Bachelet. Y aunque admite que se ha conversado la inquietud de que surja un «Altamirano» -aludiendo al polémico rol que se atribuye al ex secretario general del PS en el gobierno de Allende, de impulsar las posturas más duras, chocando con el Mandatario- descarta que se repita ese escenario.

-¿Está por la retroexcavadora o pasar la aplanadora?

-Tengo la impresión de que no estamos en los tiempos de los dimes y diretes, estamos en los tiempos de la realización y valoro mucho la semántica, pero estamos en los tiempos de la acción.

- Pero no me respondió...

-Es que en este momento no me acomoda la semántica para poder analizar, porque es mucho más importante que la derecha se pronuncie respecto de proyectos como la reforma tributaria.

-¿Qué no le gusta de la Alianza?

-Siento que la derecha se victimiza de muy mala manera porque, si recurrimos a la historia, quienes han pasado no sólo la aplanadora en Chile no han sido las fuerzas políticas que conformamos la Nueva Mayoría. Porque nosotros no hemos asesinado, no torturamos y tampoco respaldamos golpes, entonces victimizarse no suena bien, no le hace bien al necesario debate republicano.

-¿Los dichos de Quintana no tienen un fundamento ideológico que sirva de sustento a los cambios?

-No tengo duda de que el senador Quintana y el PPD están por las transformaciones, pero eso es distinto a empezar a jugar con una semántica de pasar la aplanadora o retroexcavadora, porque no dan el ancho para comprender la profundidad del momento político que estamos viviendo. Por eso me desligo de esa forma de analizar las cosas.

- ¿Enturbian el debate?

-¡Ojo! Porque este asunto de la aplanadora lo instaló la derecha.

- ¿Pero, por qué el planteamiento de Quintana no tuvo apoyo de la coalición ni del gobierno?

-Recojo lo que ha dicho la Presidenta, lo que dijo la presidenta del Senado, lo dicho por el presidente de la Cámara de Diputados en el sentido de que aquí lo más democrático es el debate.

- Llama la atención queel PC aparezca más cauto que el PPD, cuando su partido es el mayor crítico al modelo criticado por Quintana.

-Desde que tomamos la decisión de involucrarnos en la Nueva Mayoría y respaldar la candidatura de Bachelet, tenemos la convicción de que con estas reformas se empieza a desmantelar el sistema neoliberal en el ámbito político y económico. Y estas cosas hay que hacerlas, generar los procesos y, a los que no están de acuerdo -incluso a la derecha- sumarlos al debate.

- ¿Por ello el presidente de su partido, Guillermo Teillier, dijo que no se necesita una retroexcavadora?

-Es que creemos en el debate democrático, porque uno escucha y recoge las posiciones diversas. Por ejemplo, la reforma tributaria tiene como objetivo general crear la base económica para la transformación del sistema de educación en la perspectiva de considerar la educación como un factor que empuja la igualdad, no como un concepto puramente económico, sino que también cultural y sociopolítico. A mí me gustaría debatir eso con la derecha, porque -partiendo por el ex Presidente Piñera- creen que la educación es un bien de consumo y entonces más que retroexcavadora o aplanadora, mejor discutamos contenidos y temas de fondo.

- Si tuviera que hacer un ranking de responsabilidad con «ser parte del gobierno», ¿la DC y el PC lo encabezarían?

-Del punto de vista de la gobernabilidad para las transformaciones, el PC históricamente ha demostrado tener madurez en ese aspecto. No digo que nunca se haya equivocado, pero ha demostrado madurez política en momentos en que se requiere apoyar y generar gobernabilidad y ha estado a la altura.

- ¿Ha faltado madurez política en algunos de sus aliados? Porque, por ejemplo, buena parte del «fuego amigo» ha venido del PS...

-Esa frase (el «fuego amigo») de la Presidenta es buena y la comparto, porque uno esperaría que en las circunstancias en que estamos, los actores y sujetos políticos de la Nueva Mayoría nos comportemos. Y sin querer herir a nadie, porque nunca me ha gustado hacer referencias peyorativas de otras fuerzas políticas, más aún cuando son nuestros aliados. Requerimos hacer un esfuerzo colectivo y estar a la altura del momento que se está viviendo.

- ¿En el PC existe temor de que desde el PS o el PPD emerja el «Altamirano» de Bachelet?

-He conversado con algunos ministros y amigos este tema y de las comparaciones históricas. Aunque el momento es distinto, también hay ciertas claves, porque lo de los ciclos es una cuestión recurrente en Chile, somos una sociedad menos entrópica de lo que se cree. Mi impresión es que lo que está ocurriendo es el inicio de un proceso en el cual va a pesar mucho más la sociedad civil y no tanto los partidos, y eso es muy distinto a lo que había antes.

- ¿Ese apoyo a Bachelet y la poca injerencia de los partidos hace que cobre fuerza el «fantasma de Altamirano»?

-Lo veo difícil, por el liderazgo y fortaleza que la Presidenta tiene en la sociedad civil.

- Pero Allende también los tenía y sus aliados lo presionaron. ¿Teme que le ocurra lo mismo a la Presidenta?

-No creo, porque es otra la madurez de los partidos y hay un liderazgo que no es solo carismático, sino que también de contenido.

"El ministro del Interior juega un papel determinante en el proceso"

- ¿Cómo complementará su cargo de secretario general del PC con ser asesor del ministro del Interior, Rodrigo Peñailillo?

-La secretaría general es un cargo que tiene que ver con la realización del partido y en este momento estamos en un trabajo de fortalecer todas las direcciones políticas del partido a nivel nacional y territorial. Para nosotros es clave un PC muy fortalecido para esta etapa porque no solo tenemos parlamentarios, tenemos una ministra, subsecretario, gobernadores, seremis; tareas nuevas porque no participábamos en un gobierno hace tiempo.

- ¿La idea es asistir a las autoridades?

-Es para respaldar las transformaciones en todos los planos. Y está quedando más claro que aquí no hay una oposición entre estar en la calle o estar en La Moneda, más bien hay un complemento necesario y no tengo duda de que el gran obstáculo a vencer es una derecha que se resiste a las transformaciones.

-¿Cuál será su función como asesor de Peñailillo?

-Es un equipo que tiene trabajo de asesoría, que va a ir visualizando procesos y lo que se busca es darle un estatus distinto a la interacción entre el Gobierno y los partidos políticos. Y más que una señal, es un hecho concreto del valor que le da el Gobierno a la comunicación con los partidos. Ahora, no todos los que están en ese equipo son secretarios generales o nacionales, como es el caso de Víctor Maldonado (DC), pero sí tienen funciones de dirección en sus partidos y eso permite la interacción fluida.

- ¿Entonces, la presencia de este equipo con responsabilidades políticas en sus partidos compromete a las colectividades?

-Nos compromete con el programa y el ministro del Interior juega un papel determinante en ese proceso. Ahora, existe el comité político y la reunión de la Presidenta con los partidos en esta semana, es una interacción que se va a dar, porque ella ha dado señales claras de tener una interacción en ese terreno. Este gobierno está dando señales muy fuertes de que la interacción con los partidos se va a dar intensamente.

"No descarto que la DC y el PC hagan un seminario conjunto"

- Usted formó parte de las conversaciones que el PC sostuvo con dirigentes DC para buscar un acercamiento en el tema de DD.HH. ¿Resintió que se congelara el diálogo tras el impasse por el tema Venezuela ?

-Ese diálogo democrático entre comunistas y democratacristianos no se ha detenido y no lo ha hecho porque esa interacción está en los frentes sociales, en los territorios, en los distintos niveles. Ahora lo que ocurrió es que una situación coyuntural referida a un país, generó una tensión que significó suspender un encuentro que estaba programado entre las dos direcciones de partido. Y las razones de la suspensión son válidas y bien de fondo, porque nosotros respecto de Venezuela compartimos lo señalado por la Presidenta Bachelet en el sentido de que hay un intento golpista y nosotros no vamos a respaldar intento de golpe de ninguna naturaleza, pero creo que las condiciones de diálogo se van a ir dando.

- ¿El PC espera un gesto de la DC para reanudar las conversaciones?

-No, porque estamos bastante entusiasmados con la interacción que se da con los partidos de la Nueva Mayoría, incluida la DC respecto al programa; es un buen espacio. Las cosas no hay que apresurarlas y creo que va a haber otros momentos en los cuales las direcciones van a reunirse para ver otros temas porque somos parte de una misma coalición.

- ¿Quétan avanzadas estaban esas conversaciones para acordar un documento común?

-Las ideas tienen su tiempo y ese documento recién está siendo conocido por muchos comunistas y democratacristianos, y está generando una reflexión y en algunos niveles un intercambio. No descarto que en algunas semanas se hagan seminarios conjuntos entorno a las ideas que se proponen en el documento, que tiene una idea de democracia participativa que en el caso de los comunistas nos interpreta mucho y ese es el diálogo que queremos tener con el mundo DC, cristiano, incluso con gente como (el senador RN Manuel José) Ossandón o los de Evópoli.