El senador por Santiago Poniente entregó por primera vez su respaldo a una mesa de "consenso" liderada por el diputado por Las Condes.
"Si me preguntan en el partido, voy a votar en contra", dice el senador electo de RN por Santiago Poniente y antiguo crítico del Presidente Sebastián Piñera, Manuel José Ossandón, rechazando de plano la idea planteada por el vicepresidente de la tienda, Francisco Chahuán, quien propuso hacer un homenaje al Mandatario durante el próximo consejo programático de la tienda, agendado para el 5 y 6 de abril.
En esta entrevista, el ex alcalde de Puente Alto -quien llegó esta semana a Santiago, tras casi 20 días de vacaciones en Bolivia-, se define con miras a la renovación de la directiva del partido, que reemplazará a la encabezada por el senador Carlos Larraín.
-¿Cómo debería ser la nueva mesa RN?
-Tiene que ser una persona con experiencia y Cristián Monckeberg es un buen nombre. Y debieran estar representados los alcaldes, parlamentarios y las distintas partes del partido. Pero ojalá que no exista competencia. A mí me gustaría que existiera una lista con el máximo acuerdo posible. Una mesa de consenso.
-¿Usted se ha reunido con Monckeberg? ¿Cómo fue la decisión de apoyarlo?
-Sí, he conversado con él y con todo el mundo.
-Hay quienes plantean que una mesa de "consenso", presidida por Monckeberg pero con personeros de la actual directiva también, tendría poco poder y alta influencia del sector de Carlos Larraín.
-Pero si Larraín nunca ha estado. Si el sector «larrainista» hiciera una elección, gana lejos, pero esa no es la idea. En este minuto hay que pasar cambio y buscar la unión del partido. Todas las últimas renuncias fueron manejadas desde La Moneda: la renuncia de la Karla Rubilar, de Pedro Browne, Lily Pérez... Después va a renunciar la Cecilia Pérez, Rodrigo Hinzpeter. Este es un tema armado y al final, Piñera va a ser nombrado candidato por estos grupos chicos y la UDI, porque en RN es difícil que gane.
-¿Cree que hay espacio para que Monckeberg pueda ejercer un liderazgo real dentro de RN?
-Hoy día el partido necesita unidad. Carlos Larraín y todos vamos a estar por la unidad. Así es que Cristian Monckeberg puede estar perfectamente bien parado.
-¿Debería haber representación de Larraín en una eventual directiva de Monckeberg?
-Por supuesto, tiene que ser con todos. Y si representan a la mayoría del partido, por supuesto.
-También se habla de las alternativas de Francisco Chahuán y Catalina Parot para liderar la directiva.
-Todos tiene derecho, pero en el fondo que, el que más concita consenso es Cristian Monckeberg. Si alguno de ellos es capaz y lo logra, tendremos que apoyarlo, pero en este minuto creo que Cristián Monckeberg es la persona indicada.
-¿Cómo ve a Andrés Allamand? ¿Con la misma postura?
-Allamand está en lo mismo. Allamand y todos queremos salvar y recuperar RN y vamos a hacer todos los esfuerzos por eso.
-¿Qué la parece la idea de realizar un homenaje al Presidente Piñera en abril?
-No cabe duda de que el país está mucho mejor que antes, aunque la derecha está destruida. Pero en el fondo, más que un homenaje a Piñera, hay que hacerle un homenaje a los miles de personas que trabajaron en el Gobierno. Alguna vez hay que homenajear a los soldados y no siempre a los generales. Además, habría que hacer un desagravio a todos los que trabajaron para que el Gobierno llegara a La Moneda y que después fueron dejados fuera, porque eran políticos. Y la verdad es que el Presidente llegó a La Moneda por los políticos, no por los técnicos.
-¿Por qué se opone a homenajes de este tipo en RN?
-Quiero aclararle que en la mesa de Renovación Nacional no se ha visto este tema. Esto es una figura comunicacional que están armando. No hay ningún acuerdo en RN para un homenaje. Además, por lo menos el ánimo que yo vi en todos los presidentes regionales RN a lo largo de Chile, no había ningún animo para hacerle un homenaje a nadie. Pero es innegable el esfuerzo y el trabajo que tenido el Presidente Piñera, por lo tanto, si quieren hacer un homenaje, que lo hagan, es respetable. Pero si me preguntan en RN, voy a votar en contra.
-¿Por qué?
-Si hubiera que hacer un homenaje o un monumento a estos cuatro años, sería uno a la frase de ministros, subsecretarios y altas autoridades de este país, que cuando uno iba a hablarles te decían: «Yo soy técnico, no soy político». Esa era la frase típica. Ese es el homenaje que hay que hacer, porque resulta que hoy día tenemos un país mucho mejor, pero una derecha absolutamente destruida. Políticamente, Piñera no merece ningún homenaje. A lo mejor administrativamente y en gestión. Estuvimos cuatro años y le entregamos todo en bandeja a la Concertación. Perdimos las municipales, las parlamentarias y las presidenciales. Ojalá que el senador Francisco Chahuán, que habla tanto de homenajes, también haga un mea culpa y un proceso de reflexión, porque esa reflexión no se escucha en ningún lado. Gobernamos cuatro años y listo, nos volaron la cabeza y no pasó nada. ¿De qué nos sirvió? Al final del día vamos a tener un Parlamento en que nos pueden arrasar en todas las leyes importantes. El balance es bastante malo, ¿o no?
-¿Qué le parecen los cuestionamientos a varios subsecretarios e intendentes designados por la futura Presidenta Bachelet?
-Las señales que ha dado el gobierno de Bachelet no son esperanzadoras. Hay un desorden bastante grande. Lo que empieza mal, difícilmente puede terminar bien. Esta casa la están construyendo chueca: muchas promesas, el director de obra se fue de vacaciones y se están viendo las diferencias y los problemas serios entre los partidos y la Presidenta.
Se criticó mucho al Presidente Piñera por sus conflictos de intereses y aquí hay un montón de delitos que no se revisaron, hay temas que son una vergüenza. Entonces, los que criticaban a Piñera, hoy se quedan callados y eso me parece mal.
-¿Estos problemas son más graves que los que tuvo Piñera en su instalación? Hubo casos polémicos como el del gobernador del Biobío, José Miguel Stegmeier, quien tenía vínculos con Colonia Dignidad. También se reclamó por la demora en reemplazar a algunos funcionarios que venían de la Concertación.
-El gobierno de Piñera partió mal cuando desechó a los políticos y toda la derecha pagó la cuenta. Creo que ese fue un error político y siempre ese fue su problema. Pero el caso de la ex Presidenta Bachelet es más grave. Ella pertenece a un grupo que gobernó 20 años, mientras que el Presidente Piñera venía llegando y buscaba a gente. Además, con Piñera no se vio el desorden que se ve ahora, con futuras autoridades de vacaciones.
