Presidentes abordaron puntos de discrepancia por aplicación del fallo en cita en Cuba. En Santiago mencionan febrero como posible fecha para "2+2", en que ministros de RR.EE. y Defensa verán aplicación de la sentencia.
Humala y Piñera ayer en la cumbre de Celac, en La Habana.
El viaje estuvo marcado por el encuentro que sostuvo Piñera con su par Ollanta Humala, en que se abordó cómo implementar el fallo de La Haya conocido el lunes, que entregó territorio marítimo a Perú estableciendo una nueva frontera, con una línea inclinada hacia el suroeste que nace en la milla 80 del paralelo.
Tras la cita, ambos mandatarios anunciaron que se adelantará la reunión del "2+2", mecanismo que reúne a los ministros de RR.EE. y Defensa, para que ahí se trabaje un proceso de implementación "a la brevedad y de forma gradual". Esto último fue bien evaluado en Santiago, pues en Lima se hablaba de una implementación "inmediata".
Sobre la fecha del "2+2", en Santiago se mencionaron dos alternativas. Una de ellas en noviembre y otra el 7 de febrero próximo, coincidente con el Combate de Abtao de 1866, en que la flota aliada chileno-peruana -integrada por Arturo Prat y Miguel Grau- combatió contra la escuadra española, en las cercanías de Chiloé.
Esa primera semana de febrero, Piñera y su canciller -así como Humala con su ministra de RR.EE.- viajarán a una cumbre de la Alianza del Pacífico, en Cartagena de Indias.
Más allá de dicha cita, en el gobierno chileno explicaron que el diálogo entre Piñera y Humala -al que se sumó, en su parte final, Bachelet y su canciller Heraldo Muñoz- incluyó algunas de las principales discrepancias de cara a la implementación y la cita del "2+2".
Así, según personeros chilenos, Humala se abrió a adecuar su ordenamiento interno con la sentencia. Esto, en medio de un complejo clima en Lima, desde donde han rechazado requerimientos de Santiago en este sentido.
En los días previos, desde Chile se ha pedido que Lima modifique o precise su concepto de "dominio marítimo", que establece soberanía exclusiva hasta las 200 millas, impidiendo la libre navegación y aeronavegación más allá de la milla 12, como ordena el derecho internacional del mar.
Si Lima mantuviera su actual normativa, se complicaría el libre tránsito de naves chilenas en los 22 mil kilómetros cuadrados que eran chilenos y que la corte entregó a Perú. Aunque dicha norma está en la Constitución, en Lima hablan de precisar su contenido a través de una ley, salvaguardando la Carta Magna.
Además, Piñera abordó con Humala el ingreso de buques peruanos a la nueva zona delimitada por la corte. Esto, luego de que el martes en la madrugada una patrullera y un buque de investigación limeño se trasladaron hasta el llamado "triángulo externo", área que hasta antes del fallo era considerada por Chile como aguas internacionales.
Dicha acción incomodó en Santiago. Este miércoles dijeron fuentes chilenas, Humala se comprometió a que ninguna nave de su país ingresaría a las aguas que hasta antes de la sentencia eran consideradas bajo jurisdicción chilena y que ahora fueron concedidas a Lima.
