Secretario general afirmó que el Congreso tendrá que incorporar opiniones de las organizaciones sociales. Desde la DC respondieron que "las transformaciones se hacen en el Parlamento".
Como fundamental consideró el secretario general y diputado electo del PC, Lautaro Carmona, que la «movilización social» apuntale el programa de gobierno de Michelle Bachelet.
Carmona puntualizó que esta movilización de los distintos gremios no se reduce a las "protestas en la calle". Y, asimismo, descartó que sea contradictoria con el respaldo que recibió la Presidenta electa en las urnas, pues aseguró que la gente no sólo sale a la calle a protestar cuando "algo no le gusta".
Carmona destacó que más importante que el eventual ingreso de los comunistas a la administración bacheletista, es que las distintas organizaciones participen activamente en el debate de las grandes transformaciones propuestas por Bachelet.
En ese sentido, afirmó que el programa "en muchos aspectos requiere de la organización y la movilización activa del mundo social".
Carmona destacó que la Nueva mayoría elaboró su programa con participación de la gente. "Cuando uno tiene la tranquilidad que una medida va en beneficio de la sociedad, tiene que abrirla con tranquilidad al mundo social y organizado".
Para el dirigente comunista el nuevo Congreso necesariamente debe abrir sus puertas para recoger la opinión del mundo social sobre los distintos proyectos que se van a discutir en el próximo período, particularmente en los temas constitucional, laboral o tributario.
"Sus opiniones deben ser recogidas por el Congreso y eso vale para todos los temas. Supongo que los candidatos electos tienen una básica sensibilidad para recoger el sentir de la gente. Nadie es dueño de ese poder alcanzado", aseveró.
A juicio de Carmona en los distintos partidos, "hay una sensación que la participación de la gente sólo se concibe para pedir el voto y creo que eso no es así".
El dirigente recordó que la nacionalización del cobre fue una medida que no se hizo a espaldas de los trabajadores. Por ello, se mostró confiando que los partidos de la Nueva Mayoría van a escuchar las opiniones del mundo civil y gremial, los que cree tendrán una activa participación en el debate sobre educación, nueva constitución y cambios laborales, entre otros."Estos temas van a despertar mucho entusiasmo, así como en su tiempo lo fue la nacionalización del cobre", afirmó.
En momentos que la decé fijó para la segunda quincena de enero su encuentro programático con el PC para definir si hay puntos de acuerdo que les permitan enfrentar juntos el gobierno de Bachelet, miembros de la mesa del partido de la falange tomaron distancia de los dichos de Carmona.
Para el vicepresidente y diputado democratacristiano, Gabriel Silber es necesario clarificar que los cambios se deben hacer en el Congreso. "Nosotros estamos en un Estado de derecho y las transformaciones se hacen en el Parlamento".
Silber además destacó que su tienda respalda "fuertemente" el programa de la Presidenta electa, el que aseguró "se hace cargo de las demandas sociales".
En tanto, el también vicepresidente y diputado DC, Fuad Chahín sostuvo que el mundo social se puede expresar, pero indicó que es el gobierno y el Parlamento quienes hacen los cambios.
"La sociedad civil va a expresar sus demandas de manera legítima, pero el motor de la reforma es el gobierno y el Parlamento. Tenemos una mayoría suficiente para impulsar los grandes cambios", indicó.
