A inicios de la semana pasada, el jefe de programa del comando de Michelle Bachelet, Alberto Arenas, telefoneó y se reunió con algunos de los jefes de las comisiones que están trabajando el programa de gobierno, para consultarles sobre los plazos que se requieren en la implementación de los proyectos más importantes de un eventual nuevo gobierno de la ex Mandataria.

El economista solicitó detalles de los proyectos que se podrían concretar en los primeros 100 días de gobierno. Sin embargo, también exigió que le dieran un listado de las iniciativas que se podrán en marcha durante los primeros dos años y las que requieren más tiempo y que tienen que ver con reformas estructurales que necesariamente requieren de una discusión más larga en el Congreso.

Fuentes del comando aseguran que, en cada una de las conversaciones, Arenas se cuidó de no dar luces sobre su idea de dar un golpe comunicacional anunciando las 50 medidas para los primeros 100 días del gobierno de Bachelet. Por el contrario, sólo pidió información.

Con los datos en la mano, el ex director de Presupuestos informó a fines de la semana pasada a los coordinadores de las comisiones que el informe con las primeras propuestas se daría a conocer hoy. La decisión ya había sido visada por el "pétit" comité que integran Rodrigo Peñailillo (Secretario Ejecutivo), Robinsón Pérez (encargado comunicacional) y el vocero Álvaro Elizalde.

Presión para aumentar gastos de libre disposición

Desde un comienzo Arenas se propuso guardar en extrema reserva el debate que se estaba realizando sobre el programa, pero más cuidadoso se mostró cuando se inició el proceso de entrega de las conclusiones. A pesar de que habló con cada uno de sus integrantes de las comisiones para que no informaran nada a la prensa, no pudo evitar que se filtraran los contenidos y peor aún las diferencias que había entre los representantes de los partidos, como ocurrió con un trascendido sobre el tema constitucional y la postura crítica del DC Alejandro Micco.

Por ello, resolvió que debía hacer una puesta en escena con los contenidos de la campaña, que contemplara las propuestas que hace tres semanas viene anunciando la propia Bachelet en sus salidas a terreno, pero que no están vinculadas a las materias más complejas como nueva Constitución o reforma laboral.

Con esta medida, Arenas también se propuso bajar la "ansiedad" de los partidos, especialmente de la DC, que estaba exigiendo por los diariosy también en forma privada que los mantuvieran informados de los contenidos del programa.

Trascendió que en la ronda de conversaciones que Arenas sostuvo con sus interlocutores, les dijo "¿cómo voy a lanzar algo más compilado, si no sé cuál será el presupuesto que voy a tener en 2014?".

De esta forma, el economista hizo ver a distintos dirigentes de la oposición que el programa final dependerá del resultado de la presión que ejerzan los parlamentarios de la Nueva Mayoría al Gobierno para que aumente a 700 millones de dólares los gastos de libre disposición .

El comando bacheletista se está coordinando con el presidente del Senado, Jorge Pizarro, para enfrentar la discusión presupuestaria en el Congreso y para ello autorizó a las comisiones la entrega de una minuta a parlamentarios, la que contendrá los proyectos más emblemáticos de Bachelet y la cantidad de recursos que se requieren para implementarlos.

"Se nos dijo que el bloque opositor no debe aprobar el presupuesto hasta que no se suba el monto de libre disposición que quiere Arenas", señalan.

Un dirigente de partido de la Nueva Mayoría afirmó que "Arenas nos informó que tiene que hacer calzar los números con las propuestas, y eso implica que el presupuesto determinará el énfasis de los hitos del documento final de programa de la ex Presidenta".

Así, en el conglomerado señalan que el texto definitivo se conocerá sólo a inicios de noviembre .