De visita en Constitución, el Mandatario sostuvo que en su decisión hay que separar a las instituciones de los militares (r) presos por delitos "graves".
"No es contra las Fuerzas Armadas. Las personas que están presas en el Penal Cordillera, no están presas por ser miembros de nuestras Fuerzas Armadas, están presas por haber cometido gravísimos delitos contra los derechos humanos de otros chilenos".
Así respondió el Presidente Sebastián Piñera, de visita en Constitución, a la determinación que dio a conocer ayer de cerrar el Penal Cordillera, donde se encuentran recluidos 10 militares (r) condenados por violación a los derechos humanos, consigna radio Bío-Bío.
El Jefe de Estado insistió en que se deben separar las Fuerzas Armadas de la situación de estos uniformados en retiro.
"No confundamos las Fuerzas Armadas que merecen todo mi respeto, con criminales que atentaron contra los derechos humanos que tienen que cumplir las penas que el Poder Judicial y la justicia chilena han determinado".