Pese a la intensa molestia que provocó en el comando de Pablo Longueira y en la UDI que ayer la ministra Cecilia Pérez afirmara en público que votará por Andrés Allamand, el Presidente Sebastián Piñera resolvió que no autorizará a los ministros gremialistas o cercanos al partido que salgan a "neutralizar" el impacto del episodio, apoyando de la misma forma a su abanderado.

Además, el Mandatario tampoco saldrá en público -como lo ha hecho en varias otras ocasiones- a reiterar la obligación que pesa sobre su gabinete de mantenerse al margen de la refriega oficialista de cara a las primarias del 30 de junio. Así, trascendió, lo resolvió ayer luego de la intensa polémica detonada por la vocera, y se lo notificó a la UDI por intermedio del ministro del Interior, Andrés Chadwick .

El episodio de ayer, al que se sumó el subsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla -uno de los principales aliados de la candidatura de Allamand en Palacio- provocó indignación en la tienda de Suecia 286, al punto que el generalísimo de Longueira, Joaquín Lavín , llamó a que los ministros que tomen la opción de Pérez deben salir del gabinete.

Además, durante la jornada el gremialismo intensificó la presión sobre La Moneda, demandando claramente que se les permitiera a ministros como Evelyn Matthei y Rodrigo Pérez-Mackenna (Vivienda) respaldar en público al presidenciable UDI y a así "netear" la sorpresiva salida de Pérez, quien no avisó previamente ni a Piñera ni a otro ministros. También se pedía que lo hiciera el propio Chadwick. De lo contrario, se exigía que se diera formalmente por terminada la prescindencia.-

El conflicto tensionó a Palacio, donde algunos personeros hicieron notar que la vocera incluso vulneró los códigos del gabinete y se mostraron convencidos que su actuar en ningún caso era casual. Mientras, Lavín se comunicó dos veces con Pérez, en una de las cuales la puso al teléfono con Longueira.

El llamado de atención a Pérez

El asunto fue tema obligado en el Comité Político de ayer en la tarde en Palacio entre Piñera y sus ministros. El gobernante abordó el asunto directamente y le llamó la atención a la vocera : mientras algunos sostienen que sólo le dijo que fue "inoportuna" pero que reprobaba la reacción de la UDI, otros dicen que la reprendió. Ambos volvieron a reunirse más tarde, en un encuentro que se prolongó hasta las 20 horas.

Terminado el encuentro, Chadwick se comunicó con el timonel Patricio Melero y con el senador Juan Antonio Coloma , entre otros, para informarles de la decisión. En la UDI dicen estar molestos por la forma en que el Presidente abordó el tema, y estiman que no hubo un trato equitativo, ya que la intervención de Pérez se produjo sólo horas antes del debate televisado de anoche.

La razón de fondo del Presidente, se afirma en Palacio y en la UDI, es que desea evitar a toda costa que el conflicto escale en el corazón del Ejecutivo a las puertas de las primarias, con ministros tomando partido por ambos bandos. Ello, se cree, relegaría a Piñera a un segundo plano justo cuando está remontando en las encuestas .

Sin embargo, el episodio de ayer, según reconocen en La Moneda y recalcan en la UDI, terminó generando justamente lo contrario: instalando la imagen pública de que los ministros pueden abanderizarse libremente y que el Presidente no está llamando al orden. Y hay coincidencia que lo ocurrido marcó un antes y un después y amenaza con instalar definitivamente el temido síndrome del "pato cojo" en Palacio .

Pero lo sucedido además amenaza con que parezca que, al no intervenir en el conflicto, finalmente La Moneda aparece tomando partido por Allamand, aunque sea por omisión.

En la UDI, además, impactó especialmente el contexto en que se dio lo ocurrido ayer, y muy especialmente al imagen de Pérez siendo respaldada por Ubilla en el Patio de Los Naranjos. Luego que el comando de Allamand "sacara"del gabinete a Luciano Cruz-Coke, la semana pasada, la consiguiente salida de Lavín dejó a la UDI sin ministros en La Moneda capaces de defender desde allí los intereses de Longueira .

Ayer, Chadwick sólo manifestó que Pérez ya había "aclarado el tema", lo que golpeó aún más a la UDI.

En RN y en el círculo de Allamand, e incluso entre amigos de la vocera, en tanto, reconocen que venían presionando hace casi un mes a Pérez para que concretara su intervención de ayer. Como argumento (o pretexto) dicen algunos, esgrimían la molestia contra Larroulet por el manejo de las primarias y la franja, y las duras y recientes críticas de Matthei a Allamand. A ello se sumaron los avisos pagados de Longueira junto a Piñera, que -dicen- precipitaron la decisión de Pérez. Versión que es desmentida tajantemente en el círculo de la portavoz de Palacio.