Si bien esperará la resolución de la UDI sobre la primaria, el abanderado RN ya delineó sus primeros pasos.
Si bien el candidato presidencial de RN, Andrés Allamand , siguió con su agenda programada anteriormente, se espera que antes del jueves resuelva la estrategia a seguir en el nuevo escenario en que Pablo Longueira es ahora el abanderado UDI. Pero ello está condicionado a la resolución del gremialismo de participar o no en la primaria.
Mientras, se dijo, el comando de Allamand va a intensificar el trabajo de propuestas del grupo PROA y del consejero económico de la campaña, Juan Andrés Fontaine. También, trascendió, insistirán en contrastar lo que propone el candidato RN con lo de Michelle Bachelet . Sobre todo, porque ahora serán dos los abanderados resueltos a defender al gobierno de Piñera.
Incluso, se dice que el propio candidato RN está empeñado en impulsar con fuerza la consigna: "La dupla Allamand-Longueira es muy potente para enfrentar a la Concertación más el PC". Ese será el eje de su manera de trabajar en esta etapa, se señaló.
La estrategia quedó reflejada en sus declaraciones de hoy a Radio Zero, donde manifestó que "creo que la Concertación debiera estar más preocupada, porque tiene al frente dos candidatos que van a hacer la pega, a recorrer el país, a argumentar bien, que van a marcar las diferencias políticas y a defender la obra del Gobierno".
Larraín: "Quizá Andrés no fue lo más diplomático"
Luego de que Allamand emplazara a Golborne a dar explicaciones por el caso Cencosud, en RN hubo distintas opiniones: algunos pensaban que "fue muy duro"; otros estimaban que "fue acertado" y otros sostenían que no se podía quedar en silencio, pero que "no era bueno llevar la delantera en el tema". En este último grupo estaba Carlos Larraín, quien en un principio -estando en el sur- trató de comunicarse con el abanderado para que no hablara.
Larraín no pudo ubicar a Allamand y trascendió que no le gustaron algunas declaraciones de su candidato. Pero de todas maneras salió a defenderlo públicamente, al igual que el secretario general Mario Desbordes y el vicepresidente Manuel José Ossandón.
En el entorno de Allamand dicen que el ex ministro de Defensa "tomó nota" y comentó que le llamó la atención el silencio de varios en su partido, justo en momentos en que arreciaban las críticas de la UDI culpándolo de la situación.
De hecho, hubo algunos en su partido que querían cuestionarlo públicamente, pero se detuvieron tras la señal que dio Carlos Larraín en una entrevista a La Segunda, donde lo defendió abiertamente. Esta mañana, si bien el timonel reconoció que " quizás las palabras de Andrés no fueron lo más diplomáticas y convenientes ", insistió en que el problema se debió al caso Cencosud.
Más aún, Larraín reafirmó que " quisiera que los hipercríticos de Andrés tomen nota de lo central: su coraje, su hombría, la voluntad de enfrentar una campaña difícil y exponerse a escrutinios como los que acabamos de ver a Laurence Golborne".
A su vez, Desbordes dijo que culpar a Allamand por la caída de Golborne "es una estrategia completamente errada, a menos que sea algo intencionalmente planificado para dañar a Andrés Allamand".
