EL abogado defensor de los tres militares bolivianos que ingresaron armados a territorio chileno, Roberto Celedón, advirtió que sus representados "no van a reconocer delito", y aseguró que desconocían que habían ingresado a suelo nacional, "porque no son guardias fronterizos".

El profesional asumió la defensa de los uniformados altiplánicos junto a su colega Matías Coll, luego que el cónsul general en Santiago los ubicara para esa labor. "Tenemos el patrocinio, a sugerencia de un abogado boliviano que reside en Chile y dio nuestros nombres. Luego de eso, el cónsul general trató de ubicarnos, conversamos y le señalamos la disposición de colaborar, porque tenemos la convicción de que esto es algo desproporcionado", enfatizó Celedón.

Asimismo, indicó que "estamos frente a un consulado con recursos bastante modestos, por lo que nosotros manifestamos nuestra disposición de atender el caso de manera ad honorem . Aunque no entraré en ese detalle porque es algo muy privado".

Al consultarle si piensa en la posibilidad de una salida alternativa para sus clientes, respondió que "lo más adecuado es la orden de no perseverar en el procedimiento, ya que no existe ningún antecedente real de que se haya cometido delito, porque no tenían conciencia de que estaban en territorio chileno".

Más aún, argumentó que "tal como la ley de control de armas exceptúa a las FFAA chilenas y les da derecho a portarlas, lo mismo pasa con otros ejércitos del mundo...y ellos estaban en su país. Si se pasaron fue por error, en un sector que no está claramente demarcado, hay una línea imaginaria".

Frente a la posibilidad de que reconozcan su delito para poder aspirar a la salida alternativa y con ello a la expulsión del país, Celedón aseguró que "no van a reconocer que cometieron delito...eso no es una salida alternativa. Los que buscan que lo reconozcan son aquellos que quieren que salgan condenados -con un procedimiento abreviado- por una situación que no es delito. Y eso no es una salida alternativa. Para eso se requiere la voluntad, el dolo, de cometer un delito y aquí no hubo voluntad de traspasar la frontera".

Incluso, enfatizó que "los tres soldados estaban en una misión que era perseguir delincuentes, contrabandistas y aquí lo que se dio es que la policía chilena ha protegido a delincuentes y ha detenido a quienes combatían la delincuencia, lo que es una vergüenza".

Explicó que sus defendidos se quedaron cuidando un vehículo que habían dejado abandonado los contrabandistas que escaparon de la patrulla, mientras el sargento a cargo, con otros soldados, iban a dejar al puesto de control boliviano otros móviles incautados.

"El sargento les dejó un arma para que se protegieran por si volvían los contrabandistas, no para defenderse de la autoridad policial chilena. Cuando llegó Carabineros, sorpresivamente, y armados hasta los dientes, los soldados mantuvieron completa tranquilidad, no usaron su arma y pidieron que se comunicaran con su puesto de control", dijo.

¿Diferencias en gobierno chileno?

Según aseguró Celedón, cuando ocurrió el hecho y estando ad portas del inicio de la cumbre de la Celac, "la Cancillería chilena, el mismo día 25 de enero, le comunicó al consulado general de Bolivia, mediante un documento, que esperaba que este «lamentable incidente» se resolviera por la vía diplomática".

Sin embargo, agregó el abogado defensor, "Carabineros, con la aprobación de la Intendencia y, probablemente, del ministro ubicado en La Moneda, en concordancia con la fiscalía, deciden lo contrario de lo que pretendía el Ministerio de RR.EE. chileno. Y, con ello, imputan irracionalmente estos cargos a tres muchachos jóvenes de 18, 19 y 20 años, no sólo haber traspasado la frontera, sino que haberlo hecho armados".

"Los han tratado bien, con respeto"

En medio de toda su argumentación, Celedón reconoce que los militares bolivianos han tenido una buena estadía en la cárcel de Alto Hospicio, en Iquique, y explicó que "los han tratado bien, con respeto, y están aislados de la población penal. En eso debemos ser claros también y decir que no tenemos queja en este plano".

Donde sí tiene un cuestionamiento es por una declaración que, dijo, los hizo firmar Carabineros, "trasgrediendo la Convención de Viena sobre relaciones consulares". Explicó que en ese documento "los tres soldados renunciaban a contactarse con el cónsul de Bolivia en Iquique y aparece como que firmaron esto en Colchane, y ellos nunca estuvieron en esa localidad".

Celedón fue uno de los fundadores de la Izquierda Cristiana y actualmente tiene un estudio de abogados, "Celedón, Bulnes y Asociados".