Hasta hoy no ha tenido éxito. Sin embargo, Andrés Zaldívar insiste en sus llamados para que Ignacio Walker -a quien apoyará de haber elecciones internas- y Aldo Cornejo lleguen a un acuerdo para una mesa unitaria en la Democracia Cristiana.

Para el senador es mucho lo que está en juego, como para desgastarse en una competencia interna que deje una "fractura" y perjudique la candidatura de Claudio Orrego en las primarias, donde la DC no sólo busca clavar la bandera de sus ideas, sino fortalecerse para hacer la mejor negociación de la plantilla parlamentaria y la participación en el próximo mandato presidencial.

-Pero todo indica que habrá competencia entre al menos dos listas el 17 de marzo.

-Más aún después de las declaraciones que le he escuchado a Jorge Pizarro, de que es fundamental un cambio en la conducción del partido, al parecer esa voluntad (de acuerdo) no existe. Pero yo voy a seguir insistiendo hasta el último minuto. Y si no es posible, tendrá que haber competencia.

-Aldo Cornejo criticó de Walker "una disposición de construir un consenso en torno a su persona".

-No sé cuáles habrán sido las conversaciones entre ellos. Insisto en la necesidad de una mesa integrada, donde todos aporten fuerza y el partido mantenga la línea política que ha tenido.

-¿A qué se refiere exactamente?

-El partido está en lo correcto de reafirmar su propia identidad, el discurso de contenido humanista y cristiano, que es lo valórico nuestro, ha sido una fortaleza en la conducción durante todo este tiempo y la gente lo ha entendido y por eso le ha dado su respaldo.

He sido partidario de que la DC tenga su propio liderazgo, por eso fui partidario de las primarias internas entre Ximena Rincón y Claudio Orrego. Decidido eso, esta nueva directiva también tiene que ser una que claramente apoye la candidatura de Orrego a las primarias de la Concertación y fortalecer nuestra línea programática, porque tiene que participar en la conformación del programa de gobierno, negociar las candidaturas parlamentarias, donde el partido tiene que hacer valer su peso específico y sacar el máximo de representación, y luego conformar el gobierno.

-Entonces, ¿qué línea política representa para usted Cornejo?

-Habría que preguntárselo a él. Si Jorge Pizarro dice que tiene que haber un cambio, quisiera saber cuál es ese cambio. Será materia del debate que habrá que hacer cuando se dé la elección.

-Pizarro dijo que le extraña la actitud de Walker quien "había dicho, en todos los tonos que no seguiría".

-Eso es un detalle, no es un elemento para descalificar a Walker. El partido ha tenido una conducción exitosa.

-Desde el sector de Cornejo atribuyen a Walker el no poder llegar a ese consenso.

-No se puede decir que uno está dispuesto llegar a un acuerdo y el otro no. Ambos me encontraron razón en la necesidad de buscar una integración en la mesa que tenga la potencia necesaria como afrontar este tiempo.

-...pero si los dos quieren ser presidente...

-Los dos creen legítimamente que pueden ser los conductores de este tiempo. Pero hay un solo puesto. Ignacio es quien ha presidido y no veo por qué nadie podría entender por qué se le va a dejar de reconocer la posibilidad de que él esté en la presidencia. Y perfectamente puede presidir un momento Ignacio y el otro periodo Aldo Cornejo.

-La alternancia fue rechazada por el diputado.

-Es un error. Aquí lo fundamental es primero la unidad del partido. Puede ser que uno gane por 55% a 45%, y ese no es el partido que necesitamos para la conducción del próximo tiempo.

-¿Por qué el diputado querría cederle la presidencia a Walker en un año decisivo para los cupos parlamentarios y las definiciones de un eventual próximo gobierno de la Concertación?

-En política todos los años son decisivos. Pero indiscutiblemente hay una cosa clara: si a un partido le ha ido bien, lo lógico es que no cambie quien está en la cabeza. El gran error en la selección chilena fue haber sacado a Bielsa; no es que quiera comparar a Walker con Bielsa, pero es malo hacer un cambio cuando hemos tenido un buen resultado en la municipal, en el diseño para participar en las primarias de la Concertación. Sí creo que se puede reforzar el equipo.

-¿Teme a la forma en que Cornejo pueda negociar la presencia de la DC en un nuevo gobierno de Bachelet?

-No, porque Aldo es una persona leal con su partido, no va a hacer ninguna transacción que no corresponda.

-¿Cree que una directiva encabezada por Aldo Cornejo se la va a jugar por Claudio Orrego en la primaria?

-Espero que así sea. El que no lo haga estará infringiendo la definición del partido, aquí nadie puede dejar de apoyar a Claudio Orrego, que es nuestra alternativa, tenemos que jugarnos lealmente dentro de la primaria de la Concertación y dar todo el esfuerzo para que tengamos el mejor resultado. Aunque sea casi imposible (ganarle a Bachelet), no por ello vamos a dejar los brazos.

Aldo está convencido de la obligación de que hay que apoyar la campaña de Orrego. Pero hay algunos dirigentes que lo acompañan que han tenido una posición más escéptica con la campaña de Orrego y existe la visión de que eran partidarios de hacer un reconocimiento anticipado a Bachelet. Le dije "es una de las cosas que seguramente van a hacer aparecer como distinción entre tú e Ignacio".

-Y, ¿qué se juega la DC en la primaria presidencial de la oposición?

-Se juega todo el potencial que pueda tener para hacer la mejor negociación tanto del punto de vista programático, como del punto de vista parlamentario, como del punto de vista de su participación en el Gobierno.

-¿Orrego es el gran damnificado si Walker y Cornejo no llegan a un acuerdo?

- Efectivamente, puede ser dañada la candidatura de Claudio Orrego, porque vamos a estar preocupados de aquí al 17 de marzo en la contienda interna y dejar de lado su campaña. Y cuando llegue el momento del resultado (de una elección de mesa) depende de quien gane se va a decir "ganaron los que eran pro primarias y perdieron los que eran contrarios" o al revés, y eso perjudica la campaña de Claudio. Y el resultado de una contienda puede ser estrecho y el partido quedar con una fractura.

Es distinta una elección en la cual una directiva salga apoyada por la inmensa mayoría, que represente al partido en su conjunto, con experiencia y renovación.

-Algunos dicen que ante la posibilidad de que Bachelet sea nuevamente Presidenta, es mejor que el timonel DC y el presidente del Senado sean pro Bachelet, aludiendo a Cornejo y Pizarro.

-En la DC nadie tiene privilegios por sobre otros, si es más bacheletistas que otros. Medir a los DC por quién es más bacheletista que el otro es un gran error y creo que ni para Aldo ni para Jorge es positivo que puedan ser más bacheletistas, porque se da entonces el cuadro de esta división interna del partido de que algunos quieren evitar la primaria y no creo que sea eso.

 Adolfo está conciente del problema que afronta

-¿Cómo ha evolucionado la salud de su hermano Adolfo?

-Adolfo está todavía en la clínica, pero ya no en la UTI. Está en un proceso de recuperación y se está viendo qué va a pasar en el próximo tiempo, los tratamientos que se tienen que hacer. Pero él tiene un cáncer complicado. Lo vi bien del punto de vista físico, las conversaciones que tuvimos fueron perfectamente coherentes.

-¿Y su ánimo?

-El ánimo es positivo. Por supuesto está muy afectado, es una persona de mucha energía, de mucha vida, que fue un buen deportista en su tiempo. Se siente limitado, más aún con un tiempo largo en la clínica.

Está conciente del tema que tiene que afrontar, con mucha voluntad, y haciendo confianza en el tratamiento que los médicos puedan darle.