Después de Navidad, el candidato presidencial del PRO, Marco Enríquez-Ominami, tomó un avión rumbo al sur para reanudar sus actividades de campaña que en esta etapa está focalizada en el tema programático y que se verá reforzado por el lanzamiento el próximo 3 de enero de su programa "Nuevo Chile".

El ex diputado cuestiona en duros términos a los presidentes de los partidos de la Concertación y al PC, asegurando que se negaron de manera sistemática a debatir un programa de gobierno y a hacer primarias parlamentarias. Y advierte que ya es tarde para lograr un acuerdo, y que "nos veremos en primera vuelta". En marzo, de hecho, anunciará el elenco de candidatos que lo acompañará en la elección parlamentaria.

ME-O también critica el silencio de la ex Presidenta Michelle Bachelet, y opina que "hay algo infantilizante en hacer la ley del hielo a los procesos, cuando lo que hay que hacer es enfrentarlos".

-¿Quéexpectativas tiene ante la próxima encuesta CEP?

-Soy muy prudente, porque la CEP en esta misma fecha (antes de la presidencial de 2009) nos daba cero por ciento. Ahora, como toda encuesta la leo, la estudio, pero es un termómetro. Más me interesa la dinámica. Además nosotros no nos hemos desplegado del todo, y por lo pronto el próximo 3 de enero empieza un despliegue territorial masivo. Una cosa fue anunciar la candidatura como lo hice y ahora, terminada la municipal, partí con la campaña presidencial. Estoy sereno, pero estoy claro que la CEP no va a mostrar grandes cambios.

-¿Por qué ?

-Porque la campaña presidencial todavía no parte, porque hay muchos precandidatos y todavía falta que se decida cuáles van a ser los candidatos. En lo personal ya decidí mi camino, que es uno programático y participativo, y eso las encuestas no lo pueden valorar ni medir hoy día.

-¿ Cree que la candidatura independiente de Andrés Velasco, que ha tenido un intenso despliegue publicitario, lo terminará perjudicando?

-Creo que Velasco, Parisi, Orrego, Rincón y Tomás Jocelyn-Holt son la evidencia de que tenía razón el 2009: el duopolio está cansado y se requieren nuevas respuestas. Veremos si llegan a la elección...

-¿ Tiene dudas de que alguno no llegue a la primaria?

-Ellos mismos han dicho que están dispuestos a negociar, otros no quieren primarias, otros han dicho que no tiene sentido competir con Bachelet porque son lo mismo... Entonces, falta mucho. Yo ya fui candidato presidencial, he juntado dos veces las firmas que requiere la ley para ser candidato, alguna pequeña experiencia tengo y puedo decir que esto es muy largo y no estoy claro que estos siete precandidatos sean candidatos presidenciales.

-¿ Y a su juicio cuándo debe partir la carrera presidencial? Porque Bachelet dijo "hablemos en marzo".

-Imagino que los periodistas deben considerar que el punto de partida es cuando Bachelet deje de hacer la ley del hielo a Andrade y a Escalona, pero para nosotros ése no es el criterio, porque la campaña por ley parte el 17 de agosto, y al menos yo partí con el programa, que es poner por delante un proyecto de país.

-¿ Entonces para usted no es marzo el plazo fatal?

-Nos habría encantado primarias para todos, un programa en una relación de respeto, pero no quisieron, y creo que la frase de Bachelet de que no se mueve una hoja hasta marzo deja muy mal a los presidentes de los partidos de la Concertación, porque les da dos posibilidades: o hay una seria ineptitud para conducir procesos, porque su jefa les acaba de decir que todo lo que están haciendo está equivocado, o hay una mala fe infinita, porque quiere decir que ellos sabían que su jefa iba a decir eso y le estaban tomando el pelo a los siete precandidatos. Ellos tendrían que aclarar si hay mala fe o ineptitud, porque no hay una tercera alternativa.

"Su propia jefa los acaba de desautorizar"

-¿ El llamado de Bachelet empaña el trabajo de la comisión de primarias de la oposición?

-Quedan muy mal. Hasta dos semanas atrás estaban todos ansiosos proponiendo primarias y les acaban de decir que hasta marzo nadie use su energía para cambiar Chile. A mí me parece que el problema no es Bachelet, son sus presidentes de partido, y mi pelea no es con ella, es con sus voceros que actúan de mala fe o con gran ineptitud.

Ella está en su derecho (de definir su candidatura en marzo), pero insisto que los que quedan muy mal o faltan a la verdad son los presidentes de los partidos, porque le han faltado el respeto a los precandidatos. Por eso mismo pedí claridad y evidentemente no la querían dar porque afecta su patrimonio, mientras que para mí esto no se trata de patrimonio, y lo demostré en 2009 cuando muchos creían que era imposible y me acusaron de querer negociar y no hubo nada. Lo que había era convicción, un programa, y llegué a la primera vuelta. Hoy se repite el escenario: tratan de buscar de cualquier manera desactivar un debate, un programa y una competencia, y su propia jefa los acaba de desautorizar. Que el país juzgue si quiere que esos presidentes de partido sean los futuros ministros de Estado o quiere una nueva respuesta y nuevas soluciones.

-Probablemente usted deberá enfrentarse a Bachelet en primera vuelta. ¿Le acomoda su silencio?

-No creo que hacer la ley del hielo a la democracia ayude; creo que hay algo infantilizante en hacer la ley del hielo a los procesos, cuando lo que hay que hacer es enfrentarlos y plantear ideas. La ley de acreditaciones que se hizo en el gobierno anterior con la ayuda de la Alianza afecta a miles de alumnos, y a esos 10 mil estudiantes (de la Universidad del Mar) no sé si les sirve que uno les diga que esperen hasta marzo, yo por lo menos sigo convencido de que hay que trabajar. También es curioso decir que se quiere una mayoría para derrotar a la derecha y al mismo tiempo se dice que nadie haga nada hasta marzo.

"El presidente del PS no ha querido juntarse nunca"

-¿Esta situación confirma las aprensiones que tenía sobre la invitación que le hizo la Concertación a participar en la primaria presidencial, parlamentaria y en la elaboración del programa ?

-Ellos no me invitaron a ninguna primaria parlamentaria ni al programa, es todo falso. Invitaron solamente a una primaria de cartón, trucha. Yo los he invitado a una primaria parlamentaria a la que no se quieren sumar; ya pasó el tiempo de ese debate y nos veremos en la primera vuelta. Pero que quede claro ante el país y las bases de la Concertación que son los presidentes de los partidos quienes no quisieron primarias parlamentarias ni acuerdo programático.

La frase de Bachelet confirma que no estaban en condiciones de construir una mayoría, porque lo que quieren es una candidata sin programa, quieren ganar una elección a toda costa sin explicar para qué quieren gobernar.

-¿ Podría precisar quién le dijo que no? Porque los presidentes de la Concertación aseguran que lo han invitado insistentemente a participar en el proceso...

-La directiva del PC nos expresó antes de las municipales que ellos no creían en la primarias. Hubo una reunión formal en que le expresamos a los comunistas la necesidad de primarias parlamentarias y para las municipales, y respondieron que no creían en ese proceso y uno puede ver que no hubo una sola primaria en los municipios comunistas. La DC ya respondió que no quiere hacer primarias y cuando se habla de un programa, Enrique Correa, asesor de Bachelet, dijo en una entrevista que el programa era ella.

- ¿Nunca se concretó un encuentro de usted con el presidente del PS, Osvaldo Andrade ?

-Lo he invitado cuatro veces para discutir el programa y no ha querido juntarse nunca. Yo quiero un acuerdo programático, pero ya no se pudo. No nos parecen aceptables los acuerdos por omisión que promueve el PC para las parlamentarias, y tampoco es aceptable que la Concertación nos proponga esperar hasta marzo.

-¿ Le gustaría tener un debate con los precandidatos de oposición?

-Siempre vamos a estar disponibles para debatir. Los precandidatos DC tienen la interna y nosotros no vamos a participar en ese debate, ni lo haremos de los que tenga la Concertación. Cuando ellos sean proclamados candidatos esperamos con ansias poder contrastar puntos.

Dos de los candidatos representan la continuidad, en este caso Golborne y Allamand, de un gobierno que se farreó su oportunidad y la Concertación tiene cinco precandidatos que tuvieron 20 años para hacer los cambios que proponen ahora.