Fortalecido por los resultados de las municipales y principal articulador político de la esperada candidatura de Michelle Bachelet, el diputado Osvaldo Andrade enfoca ahora sus esfuerzos en garantizar la primaria presidencial de la oposición mientras se encamina a un nuevo período a la cabeza del Partido Socialista.

En ese marco, busca atraer el respaldo del PC a Bachelet y notifica a sus socios que el PS no pagará tributo a los partidos aliados por la candidatura de la ex Mandataria. De paso, cuestiona a los desafiantes de Bachelet por "victimizarse" en lugar de hacer una campaña de ideas.

-La municipal cambió el estado de ánimo de la oposición.

-Sin lugar a dudas, produjo un cambio positivo en la subjetividad de la oposición. Antes teníamos una legítima controversia sobre la estrategia más adecuada para este período y la ciudadanía se pronunció, entre otras cosas, por la línea política que los socialistas veníamos promoviendo. Las municipales demostraron que todos somos necesarios y que el núcleo de sustentación de la unidad de la oposición es el entendimiento entre el centro y la izquierda.

-Algunos advierten que los resultados de la municipal están llevándolos a cierto triunfalismo.

-Estas elecciones tuvieron la virtud de que todos ganamos, pero nadie podía sentirse exultante y hablar de un triunfo particular, no habiendo espacio por tanto para chovinismos de uno u otro partido. Estos resultados no se pueden extrapolar a la presidencial porque tendremos un contendiente de derecha fuerte que va a emanar de primarias.

-Claudio Orrego dijo que la oposición está siendo presa del "síndrome del balcón", repartiéndose un gobierno que aún no gana.

-Los precandidatos que han anunciado su disposición a concursar en la primaria deben dedicarse a eso y terminar las descalificaciones. Todos podemos decir cosas: yo podría empezar por preguntar por qué no hubo primarias en Peñalolén. Los candidatos tienen que hacer la pega, que es seducir al electorado para que participe en la primaria. Además de actuar con lealtad y "fair play", tienen que aportar ideas de futuro, pero hasta aquí se han dedicado sólo a victimizarse.

-Es fuertemente crítico de la conducta de los precandidatos...

-Lo único que hacen es poner problemas que no existen. Aquí hay garantías plenas de que va a haber primarias y van a poder competir todos los que quieran participar, sobre la base de dos compromisos básicos: una cierta plataforma programática común y, evidentemente, respetar los resultados. Así que basta de quejarse. Estoy aburrido de que en política algunos generen liderazgo o adhesiones haciéndose las víctimas de otros; esa es una mala manera de hacer política. Están las condiciones, va a haber el instrumental y existe el compromiso político de los presidentes de partidos, así que dedíquense a hacer campaña.

-La enorme diferencia que las encuestas otorgan a Bachelet frente a las otras candidaturas contribuyen a mantener las dudas.

-Las aprensiones que puedan tener los candidatos DC son las que menos comparto porque quiero recordar que nosotros teníamos un compromiso escrito con la Democracia Cristiana de tener una candidatura común para la primaria, y yo entendí que la DC no podía sostener ese acuerdo y no hice cuestión de aquello. Eso demuestra nuestra convicción de que hay que hacer primarias y me parece muy bien que la DC participe.

-¿No teme que la campaña de primarias lleve a que todos enfoquen sus ataques a Bachelet, y ello termine debilitando su liderazgo?

-Sería un tremendo error y espero que no ocurra, porque significaría que tendrían que desdecirse los que hicieron campaña municipal con la foto de Bachelet.

"La tesis del costo se terminó"

-¿Se requiere un programa para la primaria?

-Debiéramos hacer un esfuerzo de construir una base programática común y que cada candidato manifieste sus matices y visiones. Creo que la persona que ha hecho hasta el momento las dos intervenciones más contundentes en materia programática es precisamente quien no ha estado haciendo aspavientos. Cuando Bachelet vino a Chile a la OIT, habló del piso de protección social y los derechos sociales garantizados, ambas definiciones conceptuales básicas de cualquier programa. Hasta ahora, es la única propuesta de verdad que he escuchado.

-Pero Bachelet aún no explicita su voluntad de ser candidata....

-Todo a su tiempo, nadie apura. Las primarias van a ser el 30 de junio y las candidaturas deben inscribirse en abril. El candidato que esté preocupado tiene más tiempo para campaña.

-¿Aspira a que el PC apoye la candidatura de Bachelet?

-Yo no veo razón alguna para que el PC no respalde a Bachelet.

-El PC ha condicionado un eventual respaldo a un acuerdo programático.

-Todos tenemos aspiraciones programáticas, pero, como éste es un proceso en construcción, nadie puede poner condiciones a priori. Para eso vamos a hacer primarias, para preguntarle a la ciudadanía. Yo creo que esas aspiraciones del PC las puede encarnar perfectamente Bachelet en estas primarias, sin ningún problema. Cuando alguien habla de derechos sociales garantizados, está poniendo en crisis el paradigma de la sociedad de mercado. Si el PC no se siente interpretado por ello, no sé qué está pensando.

-¿El PC también debería participar en primarias parlamentarias de la oposición?

-Para configurar nuestro elenco parlamentario, tenemos que combinar diversidad con eficacia electoral, o sea, lograr duplas competitivas para lograr mayoría, y emplear las primarias como principio ordenador cuando no logremos acuerdo. Todos los partidos tenemos aspiraciones de mejorar nuestra representación parlamentaria, pero naturalmente hay un límite y por tanto hay que asumir esto en una conversación de realidad. Esto debemos conversarlo entre todos, porque el costo hay que hacerlo entre todos. Antiguamente se señalaba que el partido que llevaba la candidatura presidencial asumía un costo mayor porque tenía el "premio mayor", pero hoy tenemos un dato nuevo: la candidatura no va a ser materia de una negociación ni un acuerdo, sino que la va a elegir la ciudadanía. En consecuencia, ahora estamos todos en iguales condiciones y ningún partido tendrá un gravamen por llevar el candidato. La tesis del costo se terminó.