Política
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Carolina, Josefa y Maya: La «troika» que arrebató los emblemas de la Alianza

Junto al debut del voto voluntario y la inédita abstención que se produjo en las elecciones municipales, estas tres mujeres serán probablemente la noticia más recordada de los comicios 2012. Protagonistas de las más complejas batallas de la oposición versus el oficialismo, sus historias se cruzan en algunos capítulos.

por:  Por Giselle Crouchett
miércoles, 31 de octubre de 2012
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Corrían los años '70, y el exilio de sus familias era la realidad. México había acogido a Carolina Tohá , hija del ministro de Allende José Tohá, quien el 11 de septiembre de 1973 salió de su casa rumbo a La Moneda y no regresó más. Tampoco lo hizo el abuelo de Maya Fernández Allende , Presidente de la Unidad Popular.

Maya, quien se radicó en Cuba tras el Golpe Militar, pasaba sus vacaciones en México, donde estaba su tía Isabel, hoy senadora. Allí conoció a Carolina, siendo ambas unas niñas.

Los destinos de ambas se volvieron a cruzar el domingo, cuando la oposición se quedó con comunas clave del oficialismo: Santiago, donde Tohá (PPD) le arrebató el cargo a la UDI, en una batalla que probablemente será ahora más recordada como la polémica del balcón; y Ñuñoa, donde Fernández (PS) dio una de las grandes sorpresas de la jornada al desbancar al RN Pedro Sabat después de cuatro periodos, aunque esta mañana se comentaba que el resultado podría ser resuelto por la justicia electoral, pues Renovación anunciaba que apelaría a los resultados (ver pág. 62).

La tercera integrante de esta «troika» es la independiente Josefa Errázuriz , quien sorprendió al desbancar en Providencia al coronel (r), el UDI Cristián Labbé, tras 16 años de gestión.

Con discurso ciudadano y compromiso con el voto programático, las tres se constituyeron en el sello de la municipal 2012, por su decisión de ir por bastiones que requerían ingentes esfuerzos y no "sandías caladas", todo lo cual las hizo también recibir el llamado telefónico de la ex Presidenta Michelle Bachelet. Y aunque ellas remarcan que no se propusieron una acción concertada, la sintonía simplemente se dio.

«Lechuga escarola»

La más política de las tres es sin duda Carolina Tohá Morales (47 años). La única que fue ministra de Estado y presidenta de un partido, el PPD.

Precisamente en Santiago nació y vivió sus primeros años en el sector del Parque Forestal. De muy pequeña solía acompañar a su padre a la oficina, cuando era director del diario Noticias de Última Hora, en calle Tenderini. Mientras entonces eran frecuentes sus visitas al Mercado Central en compañía de su madre Moy, después de la elección volvió a recorrer uno de los lugares donde sintió mayor apoyo: las ferias. "Una lechuga escarola para usted...porque es-carola", se acostumbró a recibir de regalo de uno de los locatarios que le deseaban suerte en los comicios.

La noche de su triunfo, lloró de emoción y todos pensaron que besaba una medalla. En realidad, era una piedra negra que le talló su padre en su detención en Isla Dawson, el último regalo de navidad que recibió de él en diciembre de 1973. Poco después, el 6 de febrero de 1974, lo vio por vez final antes de morir en el Hospital Militar. Su deceso, rotulado de suicidio, aún se investiga.

En abril de ese año, junto a su madre y hermano, Carolina partió al exilio a México, donde permaneció cinco años. Regresó a Chile en 1979, para cursar el final de octavo básico y la enseñanza media en el colegio Francisco de Miranda. Integró al movimiento estudiantil por la recuperación de la democracia, fue rostro frecuente en las protestas de 1983 y presidenta del centro de alumnos de su colegio, y sufrió las primeras detenciones, por su participación en movilizaciones.

En 1984, en la escuela de Derecho de la Universidad de Chile, ayudó en la refundación de la Federación de Estudiantes y peleó por la autonomía para las casas de estudios. En 1988 formó parte del equipo fundador del PPD y se dedicó a la campaña juvenil por el triunfo del "No". En esa calidad, participó como panelista en el programa televisivo en que Ricardo Lagos dirigió su dedo a Pinochet. Tras el triunfo de la oposición se fue a Italia a estudiar Ciencias Políticas y regresó a Chile en 1994, especializada en asuntos de pobreza y políticas sociales.

En 1997 no logró la diputación por Santiago. En esa época conoció a Nolberto Salinas, el padre de sus dos hijos, Emilio y Matilde. Luego, estuvo a cargo de la campaña juvenil de Lagos en las primarias de la Concertación, quien como Presidente la nombró subsecretaria general de Gobierno, cargo del cual se fue en 2001 para competir ahora con éxito como diputada por Santiago.

También integró el comité ejecutivo que dirigía la campaña de Michelle Bachelet, fue reelecta diputada en 2005, y ese mismo año se casó con el hoy senador Fulvio Rossi (PS), matrimonio que terminó en 2010.

En diciembre de 2008 anunció que no iría a la reelección y expresó su sueño de ser alcaldesa de Santiago. Y dejó la diputación anticipadamente en marzo de 2009, al ser nombrada ministra portavoz por Bachelet.

Nuevamente tuvo un rol protagónico en la segunda vuelta de la campaña presidencial de Eduardo Frei en 2009, y tras la derrota de la oposición, llamó a una profunda renovación de la Concertación y a una autocrítica. Hoy, radiante, agradecida de su familia y pareja de Jaime Madariaga, no abandona el tono categórico al señalar que no basta con tener a una candidata como Bachelet: "Lo primero es tener presente que lo que ocurrió en la municipal no fue sólo de la Concertación, sino que fue un pacto de oposición más amplio. Y no es lo mismo que fue derrotado hace tres años (cuando perdieron la presidencial); aquí hubo una opción por hacer cambios muy significativos, de elegir las candidaturas en primarias, buscar la unidad, tener énfasis en los programas, es muy importante mirar estos cambios con atención y no hacer una lectura triunfalista".

Símbolo vecinal

Tohá conocía desde antes de la campaña a Josefa Errázuriz, casi mujer símbolo del trabajo que se puede realizar en una comuna a nivel vecinal. A través de los esfuerzos por impulsar la participación ciudadana que ésta hacía en Providencia, habían contactado a Carolina e impulsaron iniciativas en conjunto cuando presidió el PPD, como el respaldo al voto programático.

María Josefa Errázuriz Guilisasti (60 años) nació en Providencia y estudió Sociología en la Universidad de Chile. En 1974 comenzó a trabajar en el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo por 33 años y llegó a ser gerente de operaciones.

En paralelo, comenzó a crear importantes lazos vecinales en Providencia: miembro activo de la junta de vecinos número 7 desde 1988; 3 años presidenta del Comité de Áreas Verdes de Providencia (2002-2005); asesora de la Unión Comunal de juntas de vecinos (2006-2008) y titular del comité de calidad de vida de Providencia (2004-2006).

Su primer salto a concejal fue en 2008, como independiente fuera de pacto, fue infructuoso. Pero sí muchos, como el diputado Jorge Burgos (DC), comenzaron a asimilar en la oposición que con una carta químicamente concertacionista no podrían arrebatar la alcaldía a Labbé. Finalmente, en una inédita primaria abierta de la oposición donde compitieron Javier Insulza por la Concertación y Cristóbal Bellolio (independiente del colectivo Red Liberal), Errázuriz se impuso.

La contienda tuvo bastante del componente anti Labbé y miles se trasladaron a votar a Providencia. Ahí, tuvo un rol especial el ex dirigente universitario Giorgio Jackson, con Revolución Democrática. Sorpresivamente, a dos semanas de los comicios murió su segundo marido de Errázuriz, Lorenzo Brugnoli. La solidaridad se expresó de inmediato a través de visitas y las redes sociales. Pero sus cercanos enfatizan que nunca pensó en abandonar la contienda.

Sobre el pasado político de la «Pepa» ha corrido bastante mito urbano. Aunque en su círculo no dudan en calificarla como "independiente de centro izquierda", remarcan que nunca militó; así lo exigía su trabajo en el PNUD. Pero en el organismo internacional sí hizo lazos de amistad con políticos como José Antonio Viera-Gallo (PS), y en su campaña trabajaron Burgos (DC), el ex ministro PS Ricardo Solari y Oscar Guillermo Garretón. En su núcleo duro están su jefe de campaña Juan Eduardo Donoso, Nicolás Valenzuela, coordinador de campaña, y Harry Abrahams, administrador de las finanzas.

Muchos intentan saber si apoyará resueltamente a Bachelet. Unos responden que no se sabe, aunque lo consideran probable. Lo único cierto es que en 1993 votó por Manfred Max-Neef. Asimismo, sus cercanos enfatizan que "nosotros peleamos contra la Concertación en unas primarias y ellos después se plegaron como simples ciudadanos".

Al preguntársele en una entrevista en CNN qué nota le pondría al Gobierno de Bachelet, Errázuriz respondió: "Tuvimos bastantes deudas. El tema de la participación. Yo creo que ahí anduvimos en un cuatro".

De concejal a estrella

Pese a llevar el apellido Allende, Maya Fernández (41 años) saltó a la fama la noche del domingo y, aunque admira a su abuelo, ha señalado que "la gente no vota por parentescos".

Bióloga y médico veterinaria de la Universidad de Chile, su madre fue Beatriz, la segunda de las hijas del ex mandatario, mejor conocida como «Tati», la más apegada y comprometida políticamente con Allende, con quien estuvo el 11 de septiembre hasta ser obligada a dejar La Moneda.

Así como a Tohá le marcó de cerca la muerte de su padre, a Maya le ocurrió con su madre -casada con el diplomático cubano Luis Fernández Oña- quien se suicidó en 1997 en la isla, cuando la niña tenía 6 años.

Maya vivió en Cuba hasta los 21 años. "Dejé muchos amigos, recuerdos de la playa, de la alegría, me da nostalgia... No fue una vida ligada a la política", recuerda hoy. Es madre de dos hijos: Fernando, estudiante del Liceo Manuel de Salas, y de Beatriz, nacida hace poco más de un año.

Al regresar a Chile, como estudiante en el campus Juan Gómez Millas, se enamoró de Ñuñoa.

Hoy es parte del comité central del PS y concejal hace cuatro años por Ñuñoa, pero en su entorno reconocen que sólo ella y sus más cercanos pensaban que podría ganar a Sabat. "En el PS no lo creían", comentan. De las tres, fue la única que no tuvo necesidad de ir a primarias: no hubo otra candidatura.

Su núcleo más cercano está conformado por Andrés Santander, su jefe de campaña, y Alan Espinoza, ambos del comité central, este último vicepresidente electoral de la Juventud Socialista, así como Tomas Monsalve.

En su sector destacan que se dio una candidatura muy transversal y unitaria. Resaltan el apoyo desde el PS de Jaime Gazmuri, Carlos Montes y Ricardo Solari, y en la DC de la senadora Soledad Alvear y de Burgos. Y por supuesto el respaldo de su tía Isabel, con quien vivió cuando regresó de Cuba. La senadora considera a los hijos de Maya como sus nietos, es madrina del primer hijo de Maya y ha dicho que la última hija de ésta le "devolvió la vida", tras el dolor que le significó la muerte de su hijo Gonzalo Meza.

Trabajo conjunto

En los comandos de las tres enfatizan que nunca se concertaron para trabajar juntas en la campaña, pero que hubo una mirada de fondo compartida. Tohá fue una de las que solidarizó con Errázuriz cuando Labbé la calificó de "dueña de casa".

Hoy, existen conversaciones que esperan concretar en un trabajo común. "Siendo hasta ahora los alcaldes todos de derecha, nunca hicieron proyectos en conjunto. Queremos que haya colaboración entre las comunas", remarca Tohá, aludiendo a temas tan prácticos como la vialidad y las ciclovías.

Más allá de saber que la presidencial y parlamentaria está a la vuelta de la esquina y que los municipios serán una plataforma innegable para el oficialismo y la oposición, algunos más cautos en la Concertación remarcan que el foco principal es lograr buenos gobiernos comunales. Por ejemplo, en el caso de Josefa Errázuriz enfatizan: "Ella tiene que hacer una buena administración, porque derrotamos a Labbé por su odiosidad, pero él hacía una buena gestión", reconocen.

Consultada sobre una plataforma para Bachelet, Maya dice que "tenemos un programa de trabajo local, ése es nuestro objetivo, la comuna".

"Soy partidaria de que la oposición primero se ponga de acuerdo. Que existan primarias y un programa participativo. Desde ese programa participativo el aporte de estas comunas puede ser muy potente a un programa de gobierno", acota Fernández.

 

"Es muy importante mirar estos cambios con atención y no hacer una lectura triunfalista (de la elección municipal). No podemos reeditar lo de antes".

"Tuvimos bastantes deudas (en el Gobierno de Bachelet). El tema de la participación, yo creo que ahí estuvimos en un cuatro".

"Soy partidaria de que la oposición primero se ponga de acuerdo. Que existan primarias y un programa participativo".

 
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