Categórica fue la respuesta del subsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla, luego de conocerse que el ex jefe de su División de Estudios, Alejandro Peña, no sólo afirmara que "no tuve ninguna intervención directa" en el cuestionado proceso de compra de los equipos de detección de drogas para el Plan Frontera Norte, sino que además Ubilla era quien "supervisaba todos los procesos de adquisiciones".

Ante dichas palabras, que esta mañana sorprendieron en Interior, el subsecretario afirmó a "La Segunda" que si bien "no puedo pronunciarme sobre lo que se declaró a nivel de la investigación, porque es secreto", ya en su carta de renuncia a su cargo, la semana pasada, el propio Peña reconocía su nexo con la licitación.

"Textualmente él dice ' no participé directamente en dichos procesos, como jefe de la División de Estudios. Creo oportuno y prudente, en especial por lealtad, aprecio y respeto, presentarle mi renuncia al cargo de jefe de esta división, por cuanto fueron profesionales de esta división los que llevaron a cabo el proceso '. Ahí está claramente reconocido que es un proceso, y no cualquier proceso, el que se hizo bajo la División de Estudios", sostuvo Ubilla.

"Él reconoce en su renuncia que él tiene relación" con el proyecto, insistió. "Todas las licitaciones que se han hecho en el marco de Frontera Norte las ha hecho el área de Proyectos, que pertenece a la División de Estudios", agregó.

Y ante los dichos de Peña respecto de que Ubilla supervisaba todos estos procesos, la autoridad respondió que, sin perjuicio de que estaba al tanto del trabajo de la unidad, "es imposible que un subsecretario supervise todos los procesos de adquisiciones de todas las unidades", y que "para eso están las jefaturas de división, cada jefatura tiene que responder".

-¿Peña está deslindando sus responsabilidades en usted?

-Me parece que hay un ruido en relación al fundamento de su renuncia.

El subsecretario recordó que Peña llegó el año pasado a hacerse cargo de la División de Estudios tras su creación, luego de que él mismo, reconoce, lo propusiera al Gobierno tras evaluar su rol como fiscal. Y por lo mismo, enfatizó, descansó en él para muchas labores jurídicas relacionadas con temas de narcotráfico y antidelincuencia.

Peña, contó Ubilla, "trajo a dos personas a hacerse cargo de Orden Público y Estudios, que son dos de las tres áreas, junto con Crimen Organizado, de la División". Ambas, entre ellas el hoy cuestionado Felipe Baeza, "habían trabajado con él".

"El Ministerio tiene varias divisiones y servicios a su cargo, y yo siempre he tenido una forma de trabajo: planificación con la estructura superior de cada unidad, planes estratégicos que elaboramos en conjunto con los tres jefes de área y el director de la división", explicó Ubilla, agregando que eso incluía una "supervisión y fiscalización permanente".

Anulan otra licitación tramitada por Peña

Ubilla además adelantó que en las próximas horas ordenará declarar desierta otra licitación: la compra de cámaras termales, por cerca de US$ 8 millones.

Relató que el jueves pasado, antes de que detonara el caso, se reunió con Peña y el equipo que llevaba dicho proyecto. Allí, "le pedí que me describiera el proceso de la licitación, porque ellos estaban sugiriendo ya recomendar adjudicación a algunas empresas", entre las cuales -aclara- no se encontraba Tecnodata, pues había quedado "fuera de bases". Pero, "ante la presentación que se me hace pido antecedentes que no fueron capaces de contestarme".

Ubilla entonces le pidió a Peña y a su equipo que evaluaran "postergar la decisión de adjudicar la licitación", y fijar una nueva reunión esta semana, "donde me respondan todas las preguntas". Dicho encuentro, dado lo ocurrido, no se concretó.