Un fuerte ceacheí se escuchó el sábado en la oficina habilitada para el canciller Alfredo Moreno en el Centro de Convenciones para la Asamblea General de la OEA, cuando Chile anotó el primer gol en el partido en que enfrentó a Bolivia. A pocos metros se encontraba el salón asignado al canciller paceño David Choquehuanca. El episodio contrastó con la incómoda escena que 24 horas después debió protagonizar un representante de la misión chilena ante la OEA, al ser presentado y subir al estrado del gimnasio de la Universidad del Valle, en Cochabamba, donde ayer se concretó una estudiada puesta en escena con el discurso inaugural de Evo Morales para la Asamblea General.

"Las guerras y las invasiones no otorgan derechos", dijo el Mandatario, y agregó que "jamás renunciaremos al retorno al mar con soberanía".

Minutos antes del acto, en las calles aledañas al lugar, se veía cómo llegaban decenas de pintorescas micros de los años 80 repletas de adherentes a Morales, con banderas bolivianas. Incluso se pudo ver a un grupo de chilenos con banderas de nuestro país.

Si bien en los dichos el discurso de Morales hacia Chile fue más cauto de lo que se esperaba, el canciller Moreno no asistió a la cita. El ambiente acalorado del acto, que concluyó con los asistentes entonando la Marcha Naval, que pide recuperar el mar, terminó por darle la razón.

En la delegación chilena comentaron que el mal uso de banderas de nuestro país y las pifias complicaron el ambiente, y que la ofensiva de Morales contra Estados Unidos, las peticiones de grandes reformas en órganos de la región, y un conjunto de otras demandas, hicieron que la mención del Mandatario paceño a Chile fuera más breve de lo previsto -sólo se extendió por dos minutos y medio- y en tono menos duro que lo habitual . Sin embargo, dicen no estar confiados y con las alarmas encendidas de cara a lo que pueda hacer Bolivia mañana , cuando a partir de las 14.30 horas entre en debate el tema marítimo.

La Paz tenía plazo hasta esta mañana para ingresar un proyecto de resolución por su demanda de acceso al Océano Pacífico, pero han jugado al misterio. Aunque Choquehuanca ha reconocido dificultades para obtener un documento mejor al que la OEA emitió en 1979 en Bolivia, donde sostuvo que el tema marítimo es un asunto hemisférico, ahora dicen fuentes diplomáticas, el contexto es totalmente distinto.

Bolivia acusaría a Chile de romper el diálogo y estancar economía

Se espera que mañana Bolivia pueda acusar a Chile de romper el diálogo y generar un estancamiento en la economía de ese país , junto con un emplazamiento a cumplir la resolución de 1979 , lo que podría traducirse en duras palabras de Choquehuanca, que serán respondidas enérgicamente por Moreno, quien ha sostenido una maratón de reuniones bilaterales, entre ellas con Argentina, Brasil, República Dominicana y Caricom, en las que habría estado sobre la mesa la postura chilena en este tema. Para hoy se esperaba que el canciller se reúna con su par peruano, Rafael Roncagliolo.

En los cálculos de la Cancillería chilena, el peor escenario es que Bolivia presente un proyecto de resolución sobre el tema marítimo, y lo óptimo es que en el debate sobre el asunto hable la menor cantidad de países.