"Este año hay que agotar todas las posibilidades para tener una lista unitaria".

Así, el diputado de RN Nicolás Monckeberg evidenció la estrategia que una parte de la disidencia a la mesa de ese partido defiende actualmente, luego de que se asumiera que habrá elecciones dentro de la tienda y que el timonel Carlos Larraín se impondría en ellas.

Si bien la oposición interna al senador por Los Ríos había tomado contactos con la mesa a través de Daniel Platovsky para conformar una mesa de consenso o bien repartirse dos años entre ambos bandos, las tratativas se frustraron luego de que Larraín desechara por completo la opción de hacer una elección y asegurara que las negociaciones eran sólo "comunicaciones". Tras ello, ayer Platovsky dijo que no estaba dispuesto a "hacer el loco", y aseguró que al interior de la disidencia hay divergencias respecto de si seguir con las conversaciones.

Monckeberg, en cambio, representando al ala más pragmática de esa facción, planteó hoy que si bien hacer una elección interna "es una posibilidad que nadie debe tenerle miedo", éste "no es el único camino para renovar las directivas" y que en 2012 "es fundamental priorizar la unidad interna del partido".

En ese sentido, el futuro presidente de la Cámara de Diputados aseguró que "es clave lograr un acuerdo en una mesa que puedan trabajar los distintos liderazgos. Este es un año electoral en que el partido no puede verse expuesto a divisiones y debemos mantener alcaldías claves. Una directiva integrada ayuda mucho más a esos objetivos".

Así, el parlamentario abogó por "agotar todas las posibilidades para tener una lista unitaria que por supuesto respete las mayorías del partido, pero que sea integradora, que todos se sientan representados" .

Ello da cuenta de una idea que ha ido tomando fuerza al interior de la disidencia RN, y es terminar con su trabajo por levantar una lista propia y, en vez, proponer a Larraín que vaya a la reelección, pero incluyendo sólo a uno de los parlamentarios «opositores»: el diputado y actual jefe de bancada Cristián Monckeberg. Ello, emulando en parte el modelo que usó la UDI para la dirigencia que estrenará en abril, y que instaló a José Antonio Kast -opositor de Juan Antonio Coloma en dos elecciones internas- en la secretaría general.

Para ello, el representante de Cerro Navia ha tomado contacto con la mesa: el martes se reunió con el secretario general Mario Desbordes y espera hacer lo mismo esta semana con Carlos Larraín.

En el cambio de estrategia -que algunos consideran un verdadero «Plan B» a sus intenciones originales de competirle al senador por Los Ríos- pesa la necesidad de acelerar el trabajo presidencial, sobre todo con miras a una candidatura del ministro de Defensa, Andrés Allamand.

"Inmediatamente después de la municipal nuestro partido tiene que encender todos los motores para prepararnos a la primaria de la Coalición por el Cambio. Ahí vamos a llevar un candidato que la única posibilidad que tiene es ganando las primarias. Todos debemos estar en eso, por ello la directiva debe ser integradora. En eso comparto con Larraín que debemos jugar que nuestra opción presidencial se imponga en una primaria", dijo Monckeberg.

El tema de la primaria es visto con urgencia por parte del partido, luego de que el ministro de Economía, Pablo Longueira, transparentara su intención de ser candidato por la UDI si es que había un espacio.