La primogénita de Augusto Pinochet no se presentará nuevamente como concejal por Vitacura y hace un repaso del gobierno de Piñera.
Foto ALIOSHA MARQUEZ
"No es que esté cansada de la labor, lo que pasa es que he conocido más a los políticos en esto, y cada día me desilusionan más".
Así, Lucía Pinochet -la hija mayor del fallecido ex comandante en jefe del Ejército- explica por qué decidió no ir a la reelección como concejal por Vitacura, donde llegó en 2008 en una postulación que para muchos fue emblemática y que significó la demostración de la vigencia de su apellido. Sacó el 15,85%.
"Decidí ser concejala por una cosa de amor propio, porque todos decían que como era Pinochet nadie quería nada con nosotros y al final saqué la segunda mayoría", confiesa.
Sin embargo, eso no fue suficiente para presentarse nuevamente.
"Cuando entré no lo hice por ambiciones políticas, lo que yo estoy haciendo es un servicio público, y me molesta que los intereses del país se manejen por los intereses de los partidos. Prevalece el interés del partido por sobre el interés nacional. Eso es lo que no me gusta, me asqueó, me cansó", confiesa tajante.
Su familia no ha estado lejos del ojo público estas últimas semanas, luego de que versiones de prensa establecieran que el alcalde de Providencia, Cristián Labbé, era el supuesto padre de uno de los hijos de su hermana Jacqueline. "No fue tema... fue una forma más de atacar a Labbé".
Lucía Pinochet no esconde su desilusión con la derecha -"no tienen principios, no defienden sus ideas", dice, sobre sus dirigentes-, y aunque destaca la gestión del Gobierno de Sebastián Piñera, asegura que "no tiene autoridad".
-Yo voté por él y llamé a mucha gente a votar por él, de los cuales muchos en este rato me quieren ahorcar. Siendo objetiva, creo que se ha hecho bastante, pero es un gobierno que no tiene autoridad y se ve sobrepasado por la gente. Es un gobierno que quiere quedar bien con todos, y en la vida uno no puede quedar bien con todos. Este es un país que necesita autoridad. A la gente no le gusta que los chiquillos anden en la calle sin estudiar, revolviéndola. Y ahora resulta que no es un movimiento por la educación, es un movimiento político... si fueran hijos míos, yo no les aceptaría. En ese sentido soy bien de derecha, creo en la autoridad, en el respeto a los mayores, a los profesores, en el orden, en la libertad.
-¿Comparte las críticas que gente como Jovino Novoa o LyD han hecho al Gobierno, en el sentido de que no está gobernando con los principios de la derecha?
-Piñera gobierna con los principios democratacristianos, comparto esas críticas que le hacen. Creo que Sebastián Piñera es un democratacristiano y no es un pecado eso, pero él lo niega. Y a pesar de que en su gobierno hay gente de derecha, él es bastante dominante, se hace lo que él dice, por lo demás eso de querer congraciarse tanto con la gente de la izquierda es típico de democratacristiano.
-Hace un tiempo hubo una polémica por el cambio en los libros escolares de la palabra "dictadura" a "régimen militar". ¿Cómo la vio?
-Ahí se ve la actitud de la derecha porque en realidad no fue dictadura, fue un régimen militar, si bien es cierto que se tomó el poder, después se entregó, ¡qué dictadura en el mundo entrega el poder! . Mi papá hizo un gobierno militar fuerte, no una dictadura. Los de derecha no defendieron ese cambio, porque no tienen principios, no defienden sus ideas. Este gobierno y las políticas de derecha en general, quieren deshacerse de la figura de mi padre, muchos trabajaron cerca de él, pero quieren deshacerse.
¿Un segundo gobierno de la Alianza? "Con Golborne, sí"
-Ya llega el 2012 y el próximo año hay elección presidencial. Hay varios ministros que se ven como candidatos.
-Golborne me encanta, me encantaría que fuera candidato presidencial y votaría feliz por él. Lo encuentro un hombre de empuje, que ha salido adelante, no tiene pasiones para ningún lado. Yo creo que si es el candidato, tiene muchas posibilidades; si ponen a otro, no hay posibilidades. Pienso que el perfil de Golborne es parecido al de Michelle Bachelet, un hombre tranquilo, sin pasiones, Bachelet yo no sé si las tenía pero al menos las disimulaba.
-¿Haría campaña por él?
-Dado que han desprestigiado tanto a la familia, le haría un flaco favor. Una campaña privada por supuesto que haría, como lo hice con Piñera.
-Pero Golborne nunca se ha identificado con su familia ni con Pinochet. Además votó por el No y ha dicho que participó en los cacerolazos en contra de su padre.
-Eso ya no me interesa, Piñera también votó por el No y yo igual le dije a mucha gente que votara por él.
-La UDI también tiene puesto los ojos en Longueira. ¿Qué piensa de eso? El era bien cercano a su familia.
-Pablo Longueira era el regalón de mi papá, a muchos mi papá les financió su primera campaña electoral.
Él era bien cercano y dejó de serlo cuando mi papá dejó la comandancia en jefe, hace tiempo que ya no es cercano a nosotros.
-¿Votaría por él?
-No, no votaría por él.
-¿Y por qué no?
-Creo que produciría muchas divisiones.
-¿Ud. cree que la Alianza tiene posibilidades de ganar la próxima elección presidencial?
-Con Golborne, sí.
-¿Y cómo debería definirse el candidato, por encuestas o primarias?
-Creo que las primarias son más democráticas que la designación de los partidos.
-Si Allamand fuera candidato, ¿votaría por él?
-Lo decidiría en el momento.
"No es el fin de la familia en la política"
-Ahora que usted decide no ir a la reelección, ¿es el fin de la familia Pinochet en la política?
-No... Rodrigo (García), mi hijo, quiso ser diputado pero no le abrieron las puertas en ningún partido. No puedo saber qué van a hacer los otros.
-Así como una de sus motivaciones fue reivindicar su apellido, ¿cree que es necesario que otros de la familia hagan lo mismo en los años venideros?
- No, no es necesario porque ya está demostrado. Conmigo ya se probó que hay una gran mayoría de personas que reconocen el gobierno militar y lo reconocen que fue un buen gobierno.