Para el martes tenía programada la primera de sus reuniones con el subsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla, condición de la asesoría para la que fue "recontratado" tras su renuncia a la dirección de la Onemi. A la polémica por su refichaje se sumó el lunes la investigación que la Contraloría lleva a cabo en el organismo que dirigía, luego que lo solicitara el senador Alejandro Navarro. En ese contexto, y tras varios días de silencio, Vicente Núñez Pinochet (UDI) sale a enfrentar los cuestionamientos

-¿Sabía de la investigación de la Contraloría?

-Por supuesto. En agosto, el senador Navarro hizo estas denuncias y las presentó a la Contraloría, y ésta dio curso a la investigación propia de cualquier denuncia que hace cualquier parlamentario. Nosotros respondimos a la Contraloría punto por punto, desmintiendo cada uno de los temas, que no tenían ninguna base.

-Navarro dice que Ud. renunció para no tener que enfrentar esta investigación. ¿Es así?

-Son cosas que no tienen ningún asidero. Mi renuncia a la Onemi responde únicamente a razones personales. Se conversó hace unos seis meses.

-¿Habría sido más prudente esperar a que terminara la investigación para dejar el cargo?

-No voy a hacer interpretaciones donde no hay ninguna base.

-Entre las irregularidades que investiga la Contraloría figuran viáticos a su nombre por $1.828.216 en 2010 y $900.136 en 2011. ¿Cómo se justifican?

-Lo que el Presidente Piñera comprometió al nombrarme en el cargo era reconstruir la Onemi, implementar los mejores estándares internacionales para modernizar esta institución que quedó tan complicada el 27-F. Eso nos llevó a establecer convenios internacionales de cooperación técnica, como uno con EE.UU. a través de la Agencia Federal de Emergencias, y el apoyo de la Estrategia Internacional de Reducción de Desastres de la ONU, más la experiencia de Japón, donde se firmó una alianza estratégica. Mandatado por el Gobierno, me tocó participar como panelista en conferencias de la ONU en Ginebra y en un ejercicio nacional de emergencias en EE.UU. Los montos están absolutamente regidos por la escala de la administración pública.

-¿Los montos son correctos o falsos?

-No, todos los funcionarios del Estado nos regimos por tablas de viáticos que van relacionados con la estadía y los lugares, no son una atribución de los funcionarios definirlos.

-Los viajes a EE.UU., México y Suiza que se investigan, ¿corresponden a lo mismo?

-El de EE.UU. fue al ejercicio que te conté. En Ginebra es una reunión mundial de la ONU, cada dos años. Y en México fue la reunión regional, con agendas de trabajo con Argentina y Perú. Eso es todo. No me quiero hacer cargo uno a uno, porque Benjamín Chacana (director subrogante de Onemi) respondió todo, y no hay nada más.

-También se menciona la compra de equipos de radio, que habrían costado US$4 millones y que, según Navarro, no funcionaron.

-Eso no tiene ninguna base, son dos temas distintos. Uno tiene que ver con los sistemas de comunicaciones de la Onemi, que invirtió unos $126 millones para fortalecer su propia red de telecomunicaciones y su troncal de High Frecuency. De los supuestos $2 mil millones, unos US$4 millones, no es un sistema de comunicaciones radiales, sino que de alerta temprana a la población, que es el proyecto que la Subtel y la Onemi están impulsando. La Subtel lo licitó el año pasado.

-¿Y a qué corresponde esta denuncia de grúas provenientes de Japón, que no habrían sido utilizadas?

-Las grúas están. Son para tres municipios, Talca, Talcahuano y un tercero que no recuerdo de memoria, a los que se les entregaron en comodato, y están allá, en los lugares.

-También se señala una donación por un millón de dólares de Samsung, a través de la embajada de Corea del Sur.

-Es un sistema de telecomunicaciones que se donó para dotarlo para la región del Biobío, y está en etapa de desarrollo.

-¿Cree que la Contraloría va a acoger sus descargos y desestimar estas denuncias?

-Por supuesto.

La "teoría del empate"

Núñez subraya que "hay consenso de que al 27-F la Onemi tenía serias carencias", pero es reticente a siquiera repetir las críticas de Ubilla, que dijo que habían recibido un organismo "desarticulado" y "casi destruido". "Durante dos años era bastante habitual que se me consultara mi opinión de lo acontecido, y nunca, nunca emití un juicio", dice. Sí sostiene que "el 27-F no sólo la Onemi, sino que el sistema nacional de emergencias no estaba preparado para enfrentar una catástrofe como esa".

-¿No le molesta despedirse y que aparezcan denuncias que incluso apuntan a que se hacían escuchas telefónicas en la Onemi, que se duplicaban funciones? ¿Eso tampoco es efectivo?

-Totalmente. En el servicio público uno no sólo está expuesto a reconocimientos, sino que a las críticas. Quisiera que fueran críticas constructivas y con fundamentos, y no en base a supuestos que no aportan nada.

-¿Y cómo toma esas críticas?

-Hoy estamos cerca de conmemorar el aniversario del 27-F, a eso suma el dictamen de la fiscal Huerta, y eso genera que tanto el Gobierno como la oposición están tratando de defender o contraargumentar los niveles de responsabilidad. Me parecería tremendamente equivocado buscar una teoría del empate a través de la renuncia del director de la Onemi. En dos años hemos hecho probablemente mucho más de lo que se hizo en muchos años.

Al menos me resulta curioso que 48 horas después del fallo de la fiscal se refloten acusaciones que no tienen ningún fundamento, y que fueron ya respondidas hace varios meses a la Contraloría.

-El decreto que lo recontrata para la asesoría lleva adjunto un programa de trabajo, con reuniones semanales con Ubilla. ¿Usted se lo presentó?

-Cuando presenté mi renuncia, el subsecretario Ubilla me pidió, por lo delicado del servicio, que lo acompañara un mes para revisar un proceso de transición hacia el subsecretario, para que él pueda conocer, desde mi visión, una carta de navegación de prioridades.

-Su plan de trabajo es bastante intenso. ¿Alcanzará a cumplirlo hasta el 29 de febrero?

-Por supuesto. He estado trabajando en eso. El subsecretario me definió objetivos, plazos, productos de entrega, reuniones y metas, y cumpliré todos los puntos, uno a uno.

-En la Concertación dijeron que su refichaje "huele a pituto"...

-Es una visión equivocada, tremendamente errada.

-¿No lo volverán a recontratar después del 29 de febrero, o para prestar servicios al Gobierno desde otro puesto?

-Tengo una vocación de servicio público, y gran cariño y admiración por este gobierno. Pero mi decisión es, finalizada esta etapa, evaluar diferentes alternativas profesionales en el mundo privado. Ojalá continuar vinculado a materias que tengan que ver con servicio público, pero no en el gobierno.

-¿Ha sentido el apoyo de la UDI?

-Desde que ingresé al gobierno hasta hoy, ¡siempre! he sentido un apoyo incondicional de mi partido. Y siempre se los he agradecido. Me siento profundamente identificado con los principios y valores de la UDI, y tengo una cercanía y amistad muy altas con sus líderes. En un partido político, los ataques dirigidos a personas y que carecen de veracidad, y que son vistos por otros como un intento de dañar de forma gratuita y tremendamente injusta, obviamente ponen a prueba esas lealtades profundas que existen en la UDI. Y que he sentido desde el primer día, y en estos últimos días.

-En la UDI lo mencionan como eventual candidato a diputado por Pudahuel. ¿Le gusta la idea?

-Aceptar una candidatura parlamentaria en alguno de los distritos de la Región Metropolitana que se han mencionado, es una decisión que en su minuto habrá que evaluar.