La Segunda-UDD: Se intensifica disputa Allamand-Golborne en primaria oficialista... Bachelet arrasa por 60 puntos en la oposición

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Si en septiembre la noticia fue la irrupción del ministro Andrés Allamand (RN) luego de la buena evaluación pública a su rol en la tragedia de Juan Fernández, ahora por primera vez el titular de Defensa ve medido su desempeño en una eventual primaria oficialista. Y el resultado lo consolida como el segundo favorito dentro de la Coalición por el Cambio, a 11 puntos de Laurence Golborne, pero superando por 15 al tercero en disputa, el titular de Economía, Pablo Longueira (UDI).

Esa es una de las novedades que trae la octava encuesta de duplas presidenciales La Segunda-UDD, que cierra el año político confirmando además la primacía absoluta de la ex presidenta Michelle Bachelet (PS) en la oposición.

El estudio también muestra que la buena valoración ciudadana no necesariamente se traduce en apoyo electoral, como queda claro al medir por primera vez el desempeño de la ministradel Sernam, Carolina Schmidt, en una eventual contienda presidencial: no sólo aparece superada por todas las posibles cartas concertacionistas, sino que además su nombre queda relegado al cuarto lugar en una primaria oficialista.

Apoyo femenino, el bastión inexpugnable de Bachelet

Ad portas de volver a Chile para pasar en el país las fiestas de fin de año, es la máxima líder de ONU Mujer, Michelle Bachelet, quien recibe las mejores noticias en la ya tradicional carrera de duplas La Segunda-UDD: luego de aparecer en las dos últimas mediciones (agosto y septiembre) en empate técnico con el ministro Laurence Golborne, ahora pasa a aventajarlo por una diferencia de cuatro puntos, por encima del margen de error (+/-3).

Se trata de una contienda donde el voto femenino se vuelve clave para explicar la ventaja de Bachelet: si bien entre los hombres es Golborne quien se impone por 49% a 41%, entre las mujeres da ampliamente vueltas las cosas: gana por 51% a 36%.

Otros números, en tanto, parecen indicar que este escenario (Bachelet vs. Golborne) es el que se ve hoy más internalizado por la opinión pública: cuando se pregunta por una eventual contienda entre estas dos figuras, es cuando los porcentajes de «no votaría» (10%) y «no sabe/no responde» resultan más bajos.

¿Qué pasa cuando la disputa es entre la ex mandataria y el ministro de Defensa? Si en septiembre Andrés Allamand remontó en dieciocho puntos su distancia de Bachelet en relación a la última vez en que habían sido medidos (julio), ahora las cosas se mantienen sin variaciones: la ex jefa de Estado supera al ministro por 55% a 28%, es decir, 27 puntos, la misma diferencia que hace tres meses.

También aquí el voto femenino se vuelca abrumadoramente en favor de la ex presidenta: mientras que entre los hombres ella se impone por 51% a 32%, entre las mujeres lo hace por 59% a 24%.

En realidad, ni siquiera la ministra del Sernam, Carolina Schmidt, logra amagar la ventaja de Bachelet en el género femenino. Así, mientras que en la votación general la ex presidenta gana por 54 a 22%, entre las mujeres los números son 58% a 20%, y 50% a 25% en los hombres.

En cuanto al ministro de Economía, Pablo Longueira, en comparación con septiembre, reduce levemente, de 26 a 24 puntos (una variación ubicada dentro del margen de error), la distancia que le saca la directora de ONU Mujer. Al desglosar por género, se repite el fenómeno: en los hombres Bachelet se impone por 47% a 34%, mientras que en las mujeres lo hace por 57% a 24%.

Las variaciones de Golborne

Pese a que el ministro de Obras Públicas aparece ahora perdiendo y no en empate con la ex mandataria, su performance frente a dos de las otras cartas opositoras mejora respecto de septiembre. Así, si hace tres meses derrotaba al senador PPD Ricardo Lagos Weber por 12 puntos, ahora aumenta la distancia a 16.

Algo parecido ocurre al enfrentar al ex ministro Andrés Velasco: en septiembre la ventaja de Golborne frente a él llegaba a los 18 puntos; hoy es de 23.

Sólo en la medición con el ex diputado Marco Enríquez-Ominami el fenómeno se revierte, aunque con una variación dentro del margen de error: la distancia entre ambos (con Golborne arriba) se reduce de 27 a 25 puntos.

Allamand, en empate con Lagos Weber, Velasco y ME-O

Tras la irrrupción de septiembre, el titular de Defensa, Andrés Allamand, no muestra ahora grandes variaciones en sus propios números, pero -al margen de la medición con Bachelet- sí varía el desempeño de las figuras opositoras frente a él.

De este modo, mientras que hace tres meses Lagos Weber aparecía arriba de él por 36% a 33%, ahora el empate técnico es mucho más evidente: 32% a 31%. Más evidente, sin embargo, es el cambio respecto de Andrés Velasco: en septiembre el ex hombre fuerte de Hacienda derrotaba claramente a Allamand por 35% a 29%; hoy ambos aparecen en otro empate técnico, pero con con el ministro de Defensa arriba por 30% a 29%.

Igualmente empatados a nivel técnico se mantienen los números entre Allamand y ME-O: si ambos marcaban 33% en septiembre, ahora el primero marca 29% y el segundo 31%.

Longueira versus ME-O

En cuanto al tercer ministro presidenciable del gabinete, el UDI Pablo Longueira, sus números también se mantienen relativamente estables en algunos casos y varían en otros: pierde con Bachelet por 52% a 28% ( 53% a 27% en septiembre), y con Velasco por 31% a 26% (36% a 31%); sin embargo, y pese a que el cambio es leve, ahora la ventaja que le saca Lagos Weber (de 33% a 29%) resulta superior al margen de error. Más significativo parece ser lo que ocurre en la medición con ME-O: si en septiembre el ministro le ganaba al ex diputado por 36% a 31%, ahora es el segundo el que aparece arriba, por 31% a 26%.

En un fenómeno que llama la atención al observar la encuesta, en la mayoría de los escenarios de duplas aumenta el número de quienes señalan que «no votarían». Pero el porcentaje de quienes optan por esta respuesta es particularmente alto en todas las mediciones en que participa la ministra Schmidt, alcanzado su punto más alto cuando se la enfrenta con ME-O y con Velasco: 43%.

36% participaría en primaria oficialista; 46% en la de la oposición

Por primera vez, junto a las duplas, la encuesta La Segunda-UDD simuló elecciones primarias en cada uno de los bloques políticos. Al comparar, la contienda opositora suscita mayor interés por participar: el 46% de los encuestados señala que votaría en ellas, mientras que el 36% lo haría en la medición del oficialismo.

Pero no sólo son distintas las cifras de eventual participación, sino también los escenarios, con niveles de competencia muy diferentes.

Bachelet: 70% en primaria opositora; ME-O marca 12%

En el caso de la primaria opositora, bien puede afirmarse que la ex presidenta Bachelet arrasa sobre cualquier eventual otra carta, marcando un abrumador 70% de las preferencias. Luego de ella, 58 puntos más abajo, viene el ex diputado Marco Enríquez Ominami, con 12%. Sólo a continuación se ubica el único de los rostros medidos que ha explicitado con claridad su intención de competir en una primaria: Andrés Velasco, con un 8%... aunque él mismo ha señalado que, si Bachelet entra a la contienda, él se bajará.

Finalmente, en el cuarto lugar, se ubica el senador PPD Ricardo Lagos Weber, con 4%.

Revelador es que de todos quienes dicen que votarían en la contienda opositora, sólo un 6% señala no saber a quién apoyaría.

16% de indecisos en primaria oficialista

Un panorama distinto es el que se observa en la eventual primaria oficialista. De partida, el porcentaje de indecisos alcanza acá al 16%. Pero, además, y si bien también hay en este sector un ganador, éste se encuentra lejos de alcanzar mayoría absoluta y las distancias con sus contendores resultan incomparablemente más estrechas.

Yendo a las cifras, el ministro Laurence Golborne aparece en un claro primer lugar, con un 38% de la intención de voto. Luego viene, a once puntos de distancia, su colega de Defensa, Andrés Allamand, con un 27%, confirmando así que ellos son las dos principales cartas de la Coalición por el Cambio con miras a 2013.

Al entrar más detalladamente en los números de ambos, observando por ejemplo el desglose por géneros, parecen confirmarse los análisis respecto del distinto tipo de liderazgo que ambos representarían. Así, mientras las cifras de adhesión de Allamand son parejas (27% en hombres y 28% en mujeres), en Golborne es mayor el voto femenino (39%) que el masculino (36%).

Tercero en la eventual primaria oficialista, el ministro de Economía, Pablo Longueira, marca una intención de voto de 12%. Al revés de su colega del MOP, Longueira logra más adhesión entre los hombres (14%) que en las mujeres (11%).

En cuanto a la ministra Schmidt, pese a su buena evaluación y a que el posnatal de seis meses es señalado como una de las mejores noticias del año (pág.30), no logra traducir eso a intención electoral: marca 7%, con niveles de apoyo similares en hombres y mujeres.

En consonancia con la popularidad que durante 2011 le dieron distintas encuestas, Laurence Golborne fue considerado el ministro más poderoso e influyente del gabinete del Presidente Sebastián Piñera.

El ex titular de Minería y actual de Obras Públicas, encabezó la lista con 22%, seguido con bastante distancia por el titular de Defensa, Andrés Allamand, quien recibió el 10% de las menciones. En tercer lugar, se empinó el ministro portavoz, Andrés Chadwick, con 8%.

Los siguen Rodrigo Hinzpeter (7%), titular de Interior; Pablo Longueira (6%), ministro de Economía; Felipe Larraín, de Hacienda, y Joaquín Lavín, de Desarrollo Social, con 5%, y los ministros de Educación y Sernam, Felipe Bulnes y Carolina Schmidt, respectivamente, con 1%.

En esta consulta, 35% de los encuestados no supo o no contestó, como tampoco sobre el más influyente de la oposición, lista que encabezó por lejos la ex Presidenta Michelle Bachelet, con 36%. En segundo lugar, figuró con 9% el ex candidato presidencial Marco Enríquez-Ominami; el timonel PS Osvaldo Andrade (7%); el ex titular de Hacienda Andrés Velasco (4%); empatados con 3% el ex Presidente Ricardo Lagos Escobar y la titular del PPD, Carolina Tohá; y con 1%, los senadores Alejandro Navarro (MAS), Eduardo Frei (DC) e Ignacio Walker, presidente DC.

Después de un año de haber iniciado las mediciones entre los posibles candidatos presidenciales, podemos hacer dos alcances importantes. El primero: hasta el momento, las variaciones no parecen de consideración. Si bien Bachelet sigue a la cabeza y Golborne no se despega, el resto de los posibles candidatos aún se encuentran a bastante distancia de ambos.

En segundo lugar, la exposición mediática ha jugado un rol clave a la hora de los posicionamientos. Sin embargo, mayor efecto aún tienen los procesos mediáticos de alto contenido emocional, sobre todo cuando el desempeño de los actores sigue las expectativas de los involucrados y el público en general. Nos referimos al caso mineros y a la horrible tragedia de Juan Fernández, considerada lejos la peor noticia del año por los encuestados).

No obstante, todos los fenómenos mediáticos no tienen el mismo impacto, y ello se debe a que los desenlaces importan. En efecto, un caso como el de los mineros no sólo era impactante por lo dramático de la situación y la tensión producida, sino que también por los éxitos y fracasos que se sucedían momento a momento en el transcurso de la operación de rescate. Además, hubo un ingrediente adicional: los mineros fueron encontrados y afortunadamente salvados. Ello explica por qué en la retina de la gente aún permanecen algunos de los protagonistas de la operación, en particular el ministro Golborne, quien supo administrar con recato y pudor el tema. Una actitud que por cierto se volvió a repetir en el caso del ministro Allamand durante el desastre de Juan Fernández.

Ciertamente, los fenómenos mediáticos no son el único vehículo de posicionamiento. También cuentan las características de quienes pueden encarnar una candidatura y cómo sean capaces de conectar con los sentimientos de la población.

Oro tema que revela la encuesta La Segunda-UDD se vincula con las posibilidades de que los distintos bloques realicen primarias. A la luz de los números, en la Alianza dichas posibilidades parecen mayores, pues los datos muestran que existen los incentivos para ello (hay menor distancia entre los posibles candidatos). El problema es que el sector no tiene experiencia en este tipo de herramienta, y los intentos de aplicarla han sido traumáticos. En tal sentido, de existir una real intención de hacer una, requerirá definiciones importantes lo antes posible.

En el caso de la Concertación, las posibilidades serían en apariencia más remotas, por la enorme distancia entre Bachelet y cualquiera de los otros competidores al interior del bloque... situación que revela un déficit profundo de liderazgos o al menos de coordinación para incorporar otros candidatos.

Sin embargo, pese a todo ello, sería paradójico que, después de lo ocurrido en 2009 entre Frei y Gómez, el sector dejara sin efecto cualquier mecanismo, del mismo modo como lo hizo en 2005. La razón es muy simple: a pesar de que nadie duda de que Bachelet es la candidata indiscutida, la democracia interna nunca está de más y el sector necesita de un proceso que lo revitalice. El problema es quién. La respuesta no es fácil, pero está a la vista: Marco Enríquez-Ominami. Entre muchas razones porque es el único candidato que posee la independencia y trayectoria que eventualmente podría otorgar garantías de un conteste competitivo.

La encuesta UDD-La Segunda fue realizada los días 13 y 14 de diciembre, entre las 16:15 y las 22:15 horas, a través de entrevistas telefónicas efectuadas por operadoras en vivo. El tamaño de la muestra es de 1.039 casos, en 66 comunas a nivel nacional, representando al 68% de la población del país mayor de 18 años. El muestreo fue probabilístico, con selección aleatoria de hogares y entrevistados. El margen de error es de +/-3% para un nivel de confianza del 95%.