Por estos días está preocupado de la siembra de maíz en Pencahue (Talca, Séptima Región), disfrutando a sus 90 años de una de las pasiones de su vida: el campo. La otra fue la política, pero asegura que ya no la sigue tan de cerca.

Se esperaba que Sergio Onofre Jarpa volviera a la contingencia el sábado, con motivo del Consejo General de Renovación Nacional, donde se le iba a rendir un homenaje. Sin embargo, él declinó ir: "No voy a asistir, no estoy en el partido. Creo que con el accidente aéreo el clima no está para reuniones ni celebraciones. Es muy penoso lo que ha ocurrido", dice.

El ex ministro está completamente al día de la situación nacional. Con preocupación, dice que "es mi deseo que se vayan solucionando los problemas" del Gobierno, lamenta profundamente la muerte de quien fuera uno de sus adversarios políticos -Gabriel Valdés- y lanza la idea de un cambio del binominal, tema en plena discusión en la Alianza.

-¿Cómo ve el gobierno de Piñera, tras 20 años de Concertación?

-Como chileno espero que al gobierno le vaya bien. Es difícil que al país le vaya bien si al gobierno le va mal. Si el gobierno es encabezado por un DC o una persona de otra tendencia, no es tan importante. Es mi deseo que se vayan solucionando los problemas, que son muchos. Faltan muchas cosas por hacer y que se pueden hacer.

-Ha habido muchas críticas al estilo de gobernar del Presidente Piñera y también están las protestas estudiantiles.

-Yo veo muchas buenas intenciones en las autoridades. Pero es una lástima que haya situaciones de violencia en lugar de intentar conversar para solucionar las cosas y, por último, hacer un plebiscito cuando haya situaciones de fondo que resolver. Eso, en vez de tantas protestas y de destruir las posibilidades de desarrollo y de mejoramiento social. Esta violencia callejera es la ruina; la anarquía no sirve, no resuelve nada.

-¿Está planteando hacer un plebiscito en el Chile de hoy?

-Cuando se va al fondo, como cuando hubo que resolver el tema del gobierno militar, fuimos a un plebiscito y resultó. Así, como país empezamos otra etapa de desarrollo.

-¿Hay que hacer un plebiscito ahora para solucionar el problema de la educación?

-Yo digo que los plebiscitos son para los problemas fundamentales. Siempre se puede hablar en serio y proponer algún cambio importante con consecuencias en algunos de los aspectos de las instituciones del Estado. Eso se podría llevar a una consulta, poniendo claramente las alternativas.

-Derechamente, usted que conoce a Piñera, ¿qué opina de su gestión en La Moneda?

-Los presidentes siempre buscan las mejores fórmulas para superar los problemas que haya en el país. De eso no dudo y siempre lo he creído así, incluidos por supuesto los presidentes de los gobiernos anteriores. No creo que en Chile haya quien esté en la idea de no resolver bien las cosas. Pero, eso sí, hay que ponerse de acuerdo. Yo converso mucho con los trabajadores y ellos no entienden que frente a las dificultades haya quienes traten de destruirlo todo.

-¿Concuerda con quienes dicen que la personalidad del Presidente ha perjudicado su gestión?

-No me quiero referir a las personas por su estilo, porque eso no corresponde. Yo estoy fuera de la política y no creo que haya un presidente o ministro que quiera agravar los problemas.

-Usted habla del riesgo de la violencia de las protestas ¿lo compara con lo sucedido en la UP?

-No, es muy distinto porque en el tiempo de la Unidad Popular se llegó a una situación muy ajena a la realidad chilena. No hay que olvidar el acuerdo del Partido Socialista que impulsó y validó la lucha armada para la toma del poder, luego de su congreso de 1968. Cuando se empieza a usar la violencia no se puede saber hasta dónde va a llegar, salvo que los que promueven el enfrentamiento se convenzan de que ese no es el camino.

-¿Ve un clima similar?

-No, pero no sigamos atizando el fuego, porque se produce el incendio en cualquier momento.

Reforma tributaria: "Menos gente interesada en invertir"

-¿Después de tantos años de vigencia, piensa que llegó el momento de cambiar el sistema binominal?

-Depende. Cuando a uno le preguntan si quiere cambiar el auto, primero debe preguntar ¿por qué? En este caso uno tiene que preguntar si hay mejores sistemas y ver cuáles estamos analizando. El binominal creo que puede ser mejorado o cambiado. La gente de provincia se siente poco representada por las decisiones que se toman en la capital y siempre lo dice. Habría que dar una representación más real a la gente de trabajo de las provincias, porque en muchos aspectos quedan marginados de los adelantos más modernos.

-Hoy también se debate si se realiza una reforma tributaria para financiar cambios en la educación.

-Habría que ver qué dice la reforma, porque cambiar por cambiar puede ser bueno o malo también. Depende de lo que queremos hacer. Hay una serie de cosas que si no se estudian bien, el resultado es negativo. Si usted empieza a anunciar reformas, habrá menos gente interesada en invertir. Si usted quiere tener inversiones importantes debe garantizar estabilidad económica. O si no los que pueden invertir lo van a hacer en Perú, por ejemplo.

 Sus recuerdos de Valdés: "Lo estimé y respeté"

-¿Qué recuerdos tiene de Gabriel Valdés?

-Siento mucho que haya fallecido. Era un hombre con el cual tuvimos posiciones distintas cuando fui ministro de Interior, pero lo estimé y lo respeté, porque pudimos trabajar juntos. Posteriormente, a principios de los años 90 también nos entendimos. En ese tiempo en el Congreso existía respeto mutuo, aunque algunos a veces se salían de eso, pero era mal visto. No se usaba eso de faltarle el respeto al adversario político.