Soledad Rodríguez Cano fue la editora del libro 'Santiago desde el Aire' cuenta qué fue lo que más la cautivó de una ciudad que se mira desde el cielo.
Para Soledad Rodríguez Cano, periodista y licenciada en Historia, es justamente lo contrario: una oportunidad de recorrer la ciudad en detalle.
Eso fue lo que intentó hacer como editora general del libro de fotografías aéreas 'Santiago desde el Aire', de ARC Editores y financiado por la Corporación de Patrimonio Cultural de Chile, Entel y la Ley de Donaciones Culturales.
Agrega que la idea del libro era mostrar paisaje y territorio, el urbanismo y cómo ha evolucionado la trama urbana.
Las 179 páginas del libro cuentan con las fotos de Marcos Mendizábal y Guy Wenborne, además de textos del arquitecto Marcial Echenique; del académico Francisco Brugnoli; el urbanista Pablo Allard y del escritor Roberto Merino.
Una de las realidades que no se pueden esconder y que las imágenes sólo corroboran es la desigualdad urbana.
"Eso es brutal y se ve perfectamente. Es bien impresionante: si tú miras las comunas del oriente, Providencia y Santiago, te das cuenta que hay una concentración de áreas verdes ahí. Desde el Parque O'Higgins hacia el sur ya no hay nada, ni parques ni grandes áreas verdes", señala.
Lo otro, apunta, es la lenta erosión de los barrios tradicionales. "Llama la atención el poco orden urbano: de repente tienes un barrio precioso, bajo, con su propio estilo y carácter, pero con dos torres de edificios al lado. Ahí te preguntas cómo alguien permitió eso".
Acá una selección de fotos del libro y las palabras de Soledad Rodríguez.
"En el barrio El Golf o Sanhattan hay cierta proporcionalidad entre las autopistas urbanas (como por ejemplo la Costanera Norte), con los edificios que están a los costados. Pero en los barrios más periféricos de Santiago eso no es así. Ahí se ven unas autopistas enormes que rompen toda armonía, ubicadas en barrios donde los vecinos, además, nos las usan. Eso se ve un poco agresivo".
"La idea del libro era mostrar paisaje y el territorio, mostrar el urbanismo y la ciudad, como ha evolucionado la trama urbana, la arquitectura y la llamada quinta fachada (los techos). Es muy lindo como se ven los edificios contemporáneos, como por ejemplo el de la Universidad Adolfo Ibáñez (del arquitecto José Cruz Ovalle y ubicado en Peñalolén), que tú vez cómo esa quinta fachada está hecha para ser vista desde arriba".
"Vivimos una ciudad totalmente segregada. Yo estuve en un concierto de Carmina Burana en la Plazade Armas, con gente de todos lados y si escuchabas un poco las conversaciones eran así como 'mira que lindo el edificio ¿qué será?', y tu quedabas con cara de no creerlo. Ahí está la Catedral, la Municipalidad de Santiago, entonces ahí tú dices que falta mucho para que conozcamos nuestra ciudad.
Creo que hubo una época muy larga de poca valoración del centro de Santiago, por ejemplo. Entonces la gente de Puente Alto va y viene de la casa a su trabajo y no sale de ahí, se han generado muchos barrios que funcionan autónomamente y se mezclan muy poco. Falta darse tiempo para hacer turismo en Santiago, de ir a visitar la Quinta Normal o al Parque O'Higgins".
"Me preocupé expresamente de pedirle al fotógrafo imágenes de lugares que rompieran con el plano damero, como el barrio Concha y Toro, Virginia Opazo o la zona de París- Londres. Tú pones estos tres lugares y te das cuenta de que no hay ningún cuidado, sobre todo en el Barrio Concha y Toro (en la foto) que es un barrio realmente lindo, pero ves su entorno y no hay nada. Incluso el Liceo de Aplicación te produce una sensación de abandono porque entremedio hay un edificio enorme."
"Fue bien difícil armar el guión completo del libro, porque en el fondo tenemos que retratar todas estas cosas que uno tiene en la mente como icónicas de la ciudad, como el cerro San Cristóbal por ejemplo. Pero a mitad de camino te das cuenta de que todo lo que estás eligiendo para fotografiar es lo que está en el eje del Río Mapocho, es decir, se te escapa todo el resto de la ciudad. Entonces hay que empezar a buscar, a reconocer, y a validar esos otros espacios, a mirarlos en su belleza. Mirar todo el Valle de Santiago".
