"Tuvimos que cambiar las reglas del juego, porque la situación del país cambió", señaló el director general de Aeronáutica Civil, general FACh Rolando Mercado.
El general Mercado explicó que el resguardo será en el perímetro de las losas.
Foto HAROLD CASTILLO
Funcionarios armados de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), resguardando los 16 aeropuertos y aeródromos más importantes del país.
Ese es el cambio más relevante que se decretó oficialmente en la llamada "red aeroportuaria primaria" tras el asalto del pasado 12 de agosto, cuando una banda armada logró un histórico botín de $ 6 mil millones desde la losa del Aeropuerto Arturo Merino Benítez, en Santiago.
Así lo confirmó esta mañana el director general de Aeronáutica Civil, general FACh Rolando Mercado. "Se tomó la decisión: Vamos a armar al personal que resguarda el perímetro. Vamos a tener un grupo especial de personas que puedan reaccionar frente a una acción tan deliberada como la que sufrimos el 12 de agosto en la madrugada, con armamento, para que reaccionen ante situaciones puntuales", indicó. "No es que estén visibles (los funcionarios armados), van a estar entrenados para".
Hasta antes del robo la DGAC seguía recomendaciones internacionales que, como medida de precaución, restringían el uso de armas incluso a personal policial, en la losa de los terminales aéreos.
Mercado señaló que la nueva política será "permanente", no sólo para hechos puntuales como el traslado de valores.
"Tuvimos que cambiar las reglas del juego, porque la situación del país cambió. No estábamos preparados para ese tipo de amenazas respecto de los aeropuertos, a diferencia de La Araucanía, donde tuvimos que resguardar con contingente policial porque tuvimos información que se podía interferir la pista. En este caso, el sistema no tuvo información", señaló.
Asimismo, recalcó que se aplicará "para toda la red primaria, no puede ser sólo para Arturo Merino Benítez".
"Estamos viviendo la fase de capacitaciones; no podemos armar a nuestros AVSEC (funcionarios de Seguridad Aeroportuaria) de un día para otro, sin capacitarlos. Y esa capacitación la está haciendo la FACH y tiene un período de tiempo de unos meses. Mientras esa capacitación no se termine, la FACH está resguardando el traslado de valores con fuerzas especiales, a petición de este director de Aeronáutica", indicó el general Romero.
Este personal pasará por "un proceso largo, examen médico, psiquiátrico, entrenamiento de uso de armamento en lugares especiales, por gente especializada, adoctrinarlos. No es tan sencillo".
No obstante, descartó que se terminen las licitaciones de servicios de seguridad con empresas privadas. "No se cierran ese tipo de contratos porque dentro de toda la red primaria lo más probable es que necesitemos, mientras incorporamos mas personal AVSEC desde la Escuela Técnica Aeronáutica, apoyo en algunas áreas puntuales. No en el control perimetral, sino en algún otro tipo de controles".
Romero realizó estas declaraciones en la inauguración del seminario "Seguridad de la carga aérea", que hasta el viernes tendrá gran presencia internacional.
Uno de los expositores fue Marco Ospina, secretario general de la Comisión Latinoamericana de Aviación Civil (CLAC), quien pidió que el tema del robo fuera tratado en el encuentro para compartir experiencias y aprendizajes, "porque no es el único que ha sucedido en nuestra región".
"Los transportes de valores deben estar escoltados, pero eso lo debe decidir la DGAC", señaló, indicando que los países pueden "en función del nivel de amenaza, implementar normas diferentes". Como ejemplo, mencionó a los "air marshall" de EE.UU., funcionarios autorizados incluso para abordar vuelos armados.
Anna María Colom, agregada de la Administración de Seguridad en el Transporte (TSA-USA) -creada tras los ataques a las Torres Gemelas-, afirmó que el robo no cambió la opinión de ese país sobre la seguridad aeroportuaria en Chile, "porque fue una interferencia ilícita".
Antes del robo del siglo realizaron las habituales visitas técnicas inspectivas a aeropuertos que sirven como punto de embarque a EE.UU. "y estaban cumpliendo con los requisitos. No es que la normativa fuese deficiente, es simplemente que se enfrenta una amenaza nueva", destacó.
El general Mercado se refirió además al sumario abierto por la DGAC para establecer las responsabilidades administrativas tras el robo, que tiene a cinco altos funcionarios suspendidos de sus cargos. Entre ellos, el Director de Aeródromos y servicios aeronáuticos, Héctor Barrientos; el jefe del aeropuerto Arturo Merino Benítez, Eduardo del Canto; y el jefe de seguridad nacional aeroportuaria, José Ili.
El oficial indicó que tras el informe preliminar que dio a conocer el ministerio de Defensa a fines de agosto, se está en la etapa de descargos y "dentro de los próximos 20 días deberíamos saber cuáles son las sanciones administrativas".
Mercado dijo que el fiscal instructor formuló cargos contra todos los suspendidos.
Ya que la Contraloría debe tomar razón del resultado del sumario, las sanciones podrían no conocerse dentro del plazo de 20 días, debido a que ese organismo podría, por ejemplo, disponer nuevas acciones o incluso la reapertura de la indagatoria.
También hay una investigación penal que está llevando el Ministerio Público, recordó el director de la DGAC.
