El ídolo deportivo aparece como “aval, fiador y codeudor solidario” de su cuñado Wilson Flores. Acción del banco Santander se suma a recursos interpuestos por Itaú y BCI.
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Una nueva demanda en contra de Iván Zamorano presentó el Banco Santander Chile, que se suma a las acciones presentadas por Itau y BCI.
Se trata de una demanda ejecutiva presentada ayer en el primer juzgado Civil de Santiago en contra de la sociedad “Del Inca de Inversiones Limitada” representada por Wilson Flores, cuñado del futbolista, y de Zamorano en su calidad de “aval, fiador y codeudor solidario”. Esta empresa también aparece en la presentación del BCI.
La demanda es por un préstamo de $ 103 millones 500 mil que recibió la firma de Flores y que debía ser pagado en 23 cuotas iguales y sucesivas. Dinero que, según señala el escrito, estaba destinado a pagar obligaciones asumidas previamente con la misma entidad bancaria.
El problema es que Flores dejó de pagar en junio de este año, “adeudando a mi mandante sólo por concepto de capital, la cantidad $39.603.428, suma a la que hay que calcular y agregar los reajustes e intereses convenidos (compensatorios y moratorios)”, dice el abogado del Santander en el escrito.
Ante el no pago, el banco solicita un embargo por ese monto de todos “los bienes muebles e inmuebles, presentes o futuros del deudor”.
Las otras dos demandas civiles que enfrenta el ex crack de la selección son del BCI, que presentó una acción por un pagaré impago por $ 1.669.029.798. La segunda demanda es del Banco Itaú, por cuotas impagas de tres créditos de $ 98.069.936.
Debido a la demanda del BCI, el Tercer Juzgado Civil de Santiago resolvió el embargo de los bienes de la ex figura del Real Madrid y el Inter de Milán. Entre ellos están el domicilio particular en San Damián, avaluado en $ 466 millones, un departamento por $ 50 millones, una bodega por $ 1 millón, y un Kia Mohave por $ 16 millones.
