El sargento Luis Bustos Cabrera denunció en tribunales un supuesto hostigamiento de la institución por arrestar al capitán Emilio Sáez.
Compleja está la situación en la Primera Comisaría de Arauco, y es que tras las informaciones que indicaban que el sargento Luis Bustos Cabrera fue dado de baja después de controlar a un capitán que conducía ebrio, la institución afirmó que sólo está sumariado. A lo que se sumó que la Corte de Apelaciones le rechazó un recurso de protección que solicitaba el efectivo, por hostigamientos.
Según lo que indicó Bustos a la Corte tras el control realizado en febrero al capitán lo han sancionado y mal calificado en el proceso de evaluación interna, lo que lo dejó al borde de ser dado de baja.
Sin embargo, el tribunal de alzada descartó las irregularidades denunciadas por el sargento de manera unánime.
"Que en cuanto a los hostigamientos, amenazas e insultos a que alude el recurrente en su presentación de fojas 12, no existen antecedentes en el proceso que permitan demostrar que los recurridos hayan incurridos en tales actos respecto del Sargento Bustos Cabrera, tratándose de un hecho que aparece controvertido, motivo por el cual la acción en esta parte no puede prosperar ya que no es posible adoptar medidas al respecto", indicó el fallo.
Tras esto, el abogado del sargento Luis Bustos Cabrera indicó que apelará la resolución del fallo ante la Corte Suprema.
Desde Carabineros informaron que "el sargento continúa en la institución y el capitán fue dado de baja. No hay un manto de protección hacia el capitán, porque cuando fue notificado de su baja, él interpuso dos recursos contra la institución y esos fueron favorables para la institución. En cuanto al sargento, él fue sometido a sumario por algunas irregularidades en el procedimiento legal y administrativo y este sumario va en la etapa de notificación de cargos”.
El hecho que involucra al sargento Luis Bustos Cabrera ocurrieron en febrero de 2014, cuando transeúntes llamaron a Carabineros por un hombre que conducía en estado de ebriedad, el que resultó ser el capitán Emilio Sáez.
Según lo que indicó Bustos ninguno de sus superiores se hizo cargo del tema, por lo que él decidió controlarlo tras las insistencias de los testigos en el lugar.
Pero el capitán Sáez lo insultó y se negó a realizarse el alcotest, tras esto, es cuando según el sargento habrían comenzado los hostigamientos hacia él.
