En el PPD y el MAS defendieron al ministro de Educación, quien dijo el jueves que con la reforma educacional "no hay posibilidades de arreglines", en alusión a las críticas del bloque frente a un posible acuerdo con la Alianza, como en la reforma tributaria.
"Ha habido declaraciones desafortunadas de muchos actores. Incluyendo el ministro. Este concepto de 'los arreglines' me parece muy desafortunado". Con estas palabras el presidente del Partido Socialista, Osvaldo Andrade, fustigó al ministro de Educación, Nicolás Eyzaguirre, por haber dicho el jueves pasado en una entrevista en Chilevisión, que en la discusión por la reforma educacional "no hay posibilidades, realmente, de 'arreglines', porque las cosas están muy claras".
Esto, en respuesta a los reclamos de sectores de la Nueva Mayoría tras el protocolo de acuerdo logrado por el gobierno y la Alianza para la reforma tributaria y el temor de que se reedite una "política de consensos".
Al respecto, Andrade se preguntó: "¿Qué quiere decir el ministro con eso? Yo pediría un esfuerzo adicional. Sé que es difícil lo que estoy pidiendo, sobre todo para aquellos que de la locuacidad hacemos profesión, les pediría un período de silencio y de evitar declaraciones que con el afán de resolver problemas coyunturales generen una controversia en adelante".
Sus dichos se suman a una molestia anterior contra del secretario de Estado por su metáfora entre la educación privada y pública, comparándolas con un competidor con patines de alta velocidad y otro descalzo.
En algunos sectores del oficialismo se ha manifestado la necesidad de mejorar la performance comunicacional del jefe de cartera, quien el mes pasado sumó en la cartera a los asesores Harold Correa (PPD) -cercano al titular de Interior Rodrigo Peñailillo y hoy jefe de gabinete de Eyzaguirre- y Andrés Palma -secretario ejecutivo de la reforma educacional-.
Al interior de la Nueva Mayoría, los dichos de Osvaldo Andrade generaron un nuevo foco de conflicto, incluso antes de que se diera por superada la tensión por el acuerdo de la reforma tributaria en la que en especial los sectores del ala izquierda (PPD, PC, IC y MAS), cuestionaron no haber sido informados de los alcances del consenso.
Desde el PPD (partido de Eyzaguirre) las palabras del diputado molestaron, ya que interpretan que detrás de ellas hay una defensa al rol del ministro de Hacienda, Alberto Arenas (PS) en el protocolo por los cambios impositivos.
El senador y presidente de la tienda, Jaime Quintana, dijo que "la moda es pegarle a Nicolás Eyzaguirre, pero es una moda peligrosa. Los golpes llegan directo a La Moneda. El comentario de Osvaldo era innecesario, está de más", reclamó el parlamentario.
En la misma línea, la diputada y miembro de la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados, Cristina Girardi respondió que "si Andrade lo entiende como una crítica, problema de él. Efectivamente, a ojos y vista de todo el mundo, el hecho de generar un acuerdo a puertas cerradas se entiende como 'arreglín'. Como no lo haces frente a todos el mundo, nadie tiene por qué saber que no son 'arreglines'. Nosotros planteamos en la Comisión de Educación que las modificaciones a la reforma educacional deben darse en el proceso legislativo. Donde diputados y senadores deben hacerlo abiertamente de cara el país".
En tanto, Jorge Insunza dijo que "al que le venga el sayo, que se lo ponga. No veo por qué reaccionar ofendido por un criterio general que el ministro Eyzaguirre expresa, esto es, que en el Chile de hoy existe espacio para el diálogo, pero no para arreglines, vale decir, para acuerdos menores".
Por su parte, el senador y presidente del MAS, Alejandro Navarro, aunque reconoció que los conceptos del jefe de cartera "no fueron los más adecuados", afirmó que "a mí me simpatizan sus dichos, porque hay una manifestación muy clara de rechazo para evitar el living de (Juan Andrés) Fontaine y la cocina de (Andrés) Zaldívar(ambos gestores del acuerdo tributario). Sus declaraciones refuerzan que esto no se va a repetir".
De igual forma, desde la DC el diputado y presidente de la Comisión de Educación, Mario Venegas, afirmó que "con lo de los 'arreglines' el ministro interpreta el sentir del bloque, que sentimos que la manera en que se llegó un acuerdo en la reforma tributaria fue bastante antiestética. Pero hay que ser un poquito más prudente".