El estudio lo elaboró el profesor de la Universidad de Valparaíso, Uriel Padilla. Gran parte de las zonas afectadas por el siniestro del fin de semana estaban en las zonas de riesgo "muy alto". Los cerros Esperanza, Concepción y Alegre figuran entre los más seguros.
Un 40% de la zona que estaba marcada como de "muy alto" riesgo se quemó.
Certero resultó el mapa que hace dos años elaboró el profesor de la Universidad de Valparaíso (UV), Uriel Padilla , respecto de las cuencas y cerros de Valparaíso y la amenaza del fuego en esas zonas.
Para determinar qué puntos tienen mayor riesgo, el profesor tomó en cuenta los incendios registrados entre 2005 y 2009 en la ciudad puerto, así como los grandes terremotos y derrumbes ocurridos en las décadas previas. Además incorporó variables de población -extraídas del Censo del 2002- y elementos socioculturales.
Fue así como llegó a la conclusión de que la cuenca que componen, entre otros, los cerros Santa Elena, Rocuant, San Roque, O'Higgins, Delicias, Molina, Polanco, Rodríguez, Larraín y Lecheros es de "muy alto" riesgo. "El incendio no siguió avanzando, porque no saltó la Ruta 68, que es uno de los peligros que estaban contemplados", aseguró hoy el experto, quien recordó que en el período de 2005 a 2009 se contaron 100 incendios en esa zona.
A continuación, según el estudio, se encuentran tres cuencas que tienen un riesgo "alto" de que ocurra un siniestro como el que cobró la vida de 15 personas la noche del sábado. Entre otros, en esa situación se encuentran cerros como el Artillería, el Arrayán, el Mesilla, el Toro, el Santo Domingo y el Perdices, que están ubicados más cerca del puerto.
En esta misma categoría el profesor Padilla incluyó al cerro Playa Ancha que, si bien tiene un menor riesgo de derrumbes porque sus quebradas caen directamente al mar, sí posee una importante densidad de población. En la misma clasificación se encuentran otros cerros ubicados más hacia el centro de la bahía, como el Yungay, el Jiménez, el Cárcel o el San Juan de Dios. También se incluyeron en la zona naranja los cerros ubicados casi en el límite con Viña del Mar, como el Barón y el Placeres.
"Distribuimos a los habitantes según su edad: menores de 3 años, entre 3 y 69 años, y de ahí hacia arriba (...) Esto porque las personas menores de 3 y mayores de 69 tienen mayores dificultades para desplazarse en momentos de emergencia. Eso es un elemento que aumenta el riesgo en el caso de un incendio", indicó Padilla.
"Por su edad son más vulnerables", añadió.
Dos elementos que también tuvo en consideración fueron el grado de organización social de los cerros y el grado de formalidad de las propiedades. En el primer caso -explicó- un mayor grado de articulación en clubes deportivos o juntas de vecinos permitiría actuar de manera más coordinada a la hora de prevenir incendios y efectuar labores de limpieza. En el caso de la formalidad de las propiedades, el experto indicó que los asentamientos informales son indicios de que podrían existir caminos de tierra o falta de servicios básicos, como electricidad o agua, que en el caso de un incendio dificultarían el combate de las llamas o la circulación de vehículos de emergencia.
Padilla, en total, consideró 48 factores al momento de "pintar" los cerros según su nivel de riesgo.
En cuanto a la zona amarilla -con un riesgo "medio" de incendios-, ahí ubicó a los cerros Cordillera, San Francisco y otros que fueron destruidos por las llamas durante el fin de semana, como La Cruz y el Monjas.
En la lista de las zonas "verdes", en tanto, está el cerro Esperanza, con un riesgo "bajo". De hecho, en el período 2005 a 2009 esta zona no ha registrado incendios.
Además, apuntó el experto de la Universidad de Valparaíso, los sectores en verde también tienen un mayor grado de instrucción entre sus habitantes: "La educación es un índice de que existe un mayor grado de sensibilización ante los riesgos y la búsqueda de algún mecanismo para prevenirlos".
Finalmente, la densidad de habitantes por metro cuadrado en el cerro Esperanza es diferente. "En las zonas de mayor riesgo hay hasta tres casas en un mismo sitio. Eso hace que el fuego se expanda a mayor velocidad", remató Padilla.
