Así lo informó el superintendente Manuel Casanueva, quien detalló que durante enero y febrero esa repartición ha recibido en total 1.315 denuncias, de las cuales el 48 corresponden a procesos de admisión e involucran establecimientos municipales, subvencionados y particulares pagados.
Así lo informó el superintendente Manuel Casanueva, quien detalló que durante enero y febrero esa repartición ha recibido en total 1.315 denuncias, de las cuales el 48 corresponden a procesos de admisión e involucran establecimientos municipales, subvencionados y particulares pagados.
El año pasado el número total de denuncias llegó a 12.435, de las cuales 247 fueron por problemas en el ingreso de nuevos alumnos.
Gran parte de los colegios ya iniciaron sus procesos de postulación para el año entrante y "La Segunda" comprobó -en reportaje publicado el viernes- el fuerte aumento de las exigencias de muchos colegios pagados para la admisión de alumnos.
Por ejemplo, se exige a los apoderados presentar las últimas liquidaciones de sueldo de los padres, informes sicológicos del alumno o de personalidad, detallar si el alumno presentó alguna dificultad en su niñez (para aprender a caminar, hablar, comer o controlar esfínter) e incluso se solicitan fotografías familiares actualizadas con los nombres de cada uno de sus integrantes.
"Hacemos un llamado a todos los colegios, a que realicen sus procesos de admisión de manera objetiva y transparente, asegurando el respeto y la dignidad de los alumnos y sus familias", dijo Casanueva.
Y agregó que "cuando se comprueba una denuncia, los establecimientos se pueden ver afectos a un proceso administrativo que va desde una amonestación hasta la multa de mil UTM (cerca de $40 millones) cuando hay faltas graves y reiteradas".
Recordó que la ley es muy clara en establecer criterios para el proceso de admisión: "Deben ser objetivos y transparentes, de conformidad con las garantías establecidas en la Constitución y tratados suscritos y ratificados por Chile".