Fuera de toda reglamentación quedaron las “cajitas” para niños que se venden en algunas cadenas de comida rápida.Recién el año 2015 quedará implementada la norma en un 100%.
Foto El Mercurio
El «Súper8» es alto en calorías, grasas y azúcares totales.
Así se estableció en el nuevo Reglamento Sanitario de los Alimentos que este martes fue publicado en el Diario Oficial y presentado por el Presidente de la República, Sebastián Piñera, y el Ministro de Salud, Jaime Mañalich. El tradicional chocolate chileno —todo un ícono de las golosinas en nuestro país— incluso le dio nombre a la ley que tramitó el actual Gobierno y que establece la obligación de informar en el rotulado cuándo un comestible supera los niveles deseables en algunos de sus ingredientes, haciéndolos poco saludables.
Así —y según el cálculo previo que hizo “La Segunda”— un «Súper8» de 29 gramos sólo está por debajo de los índices establecidos por la autoridad en cuanto a su cantidad de sal (sodio). Cada barra debe tener como máximo 130,5 de calorías (Kcal), 1,45 gramos de grasas
saturadas, 4,8 de azúcares totales y 116 milígramos de sal (sodio).
El documento presentado define las porciones y límites de nutrientes críticos (grasa, azúcar y sodio) que deben tener los productos
envasados para evitar tener una etiqueta en su envase con el logotipo
“alto en”.
El ministro de Salud, Jaime Mañalich, hizo un llamado a las madres para que “a través de este mecanismos de información puedan elegir mejor y los niños no traigan este tipo de alimentos a la escuela. Pero no podemos llegar al extremo de privar a las madres de comprar un alimento que resulte etiquetado como ‘alto en’ si es que esa es su decisión. Aquí se trata de
incentivar a una elección”.
El reglamento, explicaron, entrará en vigencia en tres etapas para que la industria pueda adecuar sus ingredientes o envases. A partir de este martes las empresas productotas tienen un plazo de seis meses para adaptar sus alimentos con alto contenido de grasas (junio). En un año más esto será obligatorio para los productos altos en calorías y azúcares, y en 18 meses más aquellos altos en sal.
Si el producto es clasificado como “alto en” deberá llevar un logotipo señalando en qué nutrientes supera los límites establecidos. La señal deberá cubrir el 7,5% del envase, ya sea paquete, sobre, botella,
lata, frasco o pote. Mañalich agregó que será tarea de la Seremi de Salud “materializar la aplicación de esta Ley y visitar a los colegios, por eso dimos presupuesto adicional, para tener inspectores para multar, prohibir, denunciar, y cerrar un kiosco cuando se produzca una violación a la norma”. Según un estudio oficial el nuevo etiquetado se aplicará al 90% de los snacks salados y las bebidas gaseosas con azúcar; al 89% de las
galletas y snacks dulces; al 87% de las barras de cereal; al 79,4% de los
helados; y al 70,5% de los cereales para el desayuno.
En tanto, el Presidente Piñera comentó que el último estudio de la Food and Agriculture Organization (FAO) indicó que en Chile la obesidad está comenzando a muy temprana edad, situándonos entre los tres países con peores índices en América Latina: “Por eso quiero decirle a todos mis compatriotas que podemos hacer un tremendo esfuerzo para mejorar la salud en nuestro país, por construir más hospitales y consultorios, por formar mas médicos y tener mas medicamentos; pero nada de eso va a ser fecundo y fructífero, si no tomamos conciencia de que el principal médico somos nosotros mismos, y que siempre es mejor prevenir que curar".
La nueva Ley de Etiquetado de Alimentos también regula la publicidad y ganchos comerciales de todos los productos que son clasificados como críticos y tengan el nuevo logotipo.
Así, quedaran prohibidos los comerciales dirigidos a menores de 14 años y todos los regalos que vienen junto a los productos, tales como juguetes, las figuritas de la película infantil de moda, tatuajes que se pegan con agua, láminas, tazos y cualquier otro incentivo para favorecer la compra. Eso sí, esto siempre destinado a comida envasada y no la comida rápida(hamburguesas) y aquella que se elabora directamente en la cocina. En este sentido, las “cajitas” para niños de algunas cadenas de comida rápida quedaron fuera de toda reglamentación.
El subsecretario de Salud, Jorge Díaz, explicó que “los alimentos envasados tienen estandarización que permite medir la cantidad de nutrientes que tiene”, en cambio “uno que se prepara en el mesón a pedido del público tiene mediciones que no permiten estandarizar y medir la cantidades más sal, menos sal, más grasas, menos grasas”.
