Ser católico no está de moda. En eso estoy de acuerdo con Sofía. Así como ustedes la ven, de sonrisa encantadora, ojito ingenuos y cabellos morados, Sofía Wulf Le May (32) es madre de tres hijos -se casó hace 10 años- y trabaja como directora ejecutiva de «Voces Católicas» (VocesCatolicas.cl), la fundación que nació el 2011 para invitar a los laicos a asumir un papel más protagónico dentro de la Iglesia.

Con Sofía me junté el miércoles en el café "Wonderful", del barrio Lastarria, para conversar sobre las implicancias prácticas de ser católico. Junto al cheesecake de Nutella que me devoré, durante nuestros 60 minutos de conversación (sin respiros) pude también sentir ese "nuevo sabor" que la fundación busca darle a la religión. Sofía habla de un "nuevo enfoque", más positivo. Muy en la línea del Papa Francisco, quien esta semana publicó su exhortación apostólica Evangelii Gaudium ... donde la palabra "alegría" aparece 74 veces y cuya lectura recomiendo a moros y cristianos.

Nuestro encuentro, además, se produjo pocos días después de que la candidata presidencial Evelyn Matthei le prometiera al pueblo evangélico que en un eventual gobierno suyo no hará "nada que vaya en contra de la Biblia". ¿Y qué le respondió Michelle Bachelet? Que desde 1925 que somos un Estado laico.

La siguiente es la crónica, en primera persona, de una conversación franca y sin dobleces entre dos católicos practicantes. Yo hice las preguntas. Sofía puso las respuestas.

-¿Por qué te dedicas a esto?, ¿qué te motiva?

-Soy una enamorada de Cristo. Me enamoré. Como decía el Papa, en este "banquete" tiene que participar mucha gente. Es como el mejor carrete. Es un camino positivo, de alegría... lo que no quiere decir que no haya problemas.

-Hablas de mostrar las cosas "en positivo", pero el catolicismo también tiene prohibiciones. Los 10 mandamientos son casi puros "no".

-Eso es parte de la cultura que ha ido primando. Pero yo creo que la Católica es una Iglesia de la afirmación, no de la negación. Es un camino de amor. En "Voces Católicas" hablamos de amor. El Papa en su exhortación habla de que no podemos reducir todo a un catálogo de pecados. Quizás hemos escuchado poco el mandamiento nuevo, que trajo Jesús, y nos quedamos en el Antiguo Testamento. La suya es una orden de amar: "Amarás a tu prójimo como a ti mismo, y como yo los he amado". No es un no.

-¿En qué puede notarse que eres católica?

-Me gustaría que se notara por cómo soy. Por mi acercamiento a los demás. En el cariño, en la alegría. Uno trata de parecerse lo que más pueda a Jesús. El era como un imán. Ese debe ser el ADN del católico, ser atractivo. Y eso pasa por tocar emociones.

-¿Es una técnica?, ¿como la de los políticos?

-No. Hay gente que puede usar técnicas, pero al final, sin un contenido, esas técnicas se caen solitas. Y se nota. Yo me refiero a un trabajo espiritual, de crecer en amor.

-Y en tu vida diaria, internamente, ¿en qué notas que eres católica?

-En que tengo sed de Dios. Lo busco, y de diferentes maneras. En los sacramentos...

Entonces Sofía se emociona y deja de hablar. Se tupe. Se sonroja. Dos lagrimones se alcanzan a asomar. Me pide disculpas. Toma un trago de coca-cola light... y con un hilo de voz, sobreponiéndose al momento, continúa:

-... a mí Dios me emociona. Es buena tu pregunta, nunca lo había pensado. Y es bueno pensarlo. Busco a Dios, y pongo todos los medios que El puso. Si me dicen que Jesús dijo que hay que subir el Everest para encontrarlo, yo lo subo.

-¿Dónde es donde más lo encuentras?

-En el Evangelio, Jesús dice 'que vengan los cansados, los agobiados'... ahí lo encuentro. En algunos momentos del día me detengo, hago un minuto de silencio y le digo "estoy cansada, agotada. Porfa ayúdame".

-¿Tuteas a Dios?

-¡Obvio!

-¿Y hablas con Dios Padre, Hijo o Espíritu Santo?

-Con Jesús. Es mi partner , mi amigo íntimo. Por eso lo tuteo. Y a la Virgen la trato de "mamá".

-¿De quién te sientes más cerca: de Jesús o de los sacerdotes?

-De Jesús. El cura es un servidor.

-¿Y qué curas buenos conoces?

-Los curas más choros son los servidores 24/7. Esos a los que no les importa que le toques la puerta a cualquier hora porque necesitas algo, por una urgencia espiritual. Los curas que se arremangan. ¡Y que preparan las prédicas!

-Buen punto. Hay curitas muy lateros...

-El Papa es tan práctico que en una parte de su exhortación dice cómo tiene que ser una homilía. El ha contado lo que aprendió de joven, que las buenas prédicas tienen tres elementos: un mensaje, una imagen y una emoción.

-Y que duren un minuto, se podría agregar.

-¡Sí! Tienen que ser cortas, porque la atención de la gente se va. Y hay tantos con déficit atencional.

-¿Cuándo fue la última vez que te confesaste?

-Hoy día.

-¿Y de qué te confiesas?

-De cosas prácticas. "Me enojé con Fulano"... de cosas que yo sé que me alejan de Jesús. Como aquellos detalles que generan una distancia con un amigo. Yo no quiero tener distancias con Jesús. Además, la confesión me ayuda mucho a conocerme. Cuando verbalizas, cuando dices las cosas en que te equivocas, cuáles son tus rabietas, por qué mentiste... te vas dando cuenta dónde está la raíz de tus problemas.

-¿Es idea mía o en la Iglesia se hace demasiado énfasis en que el sexo puede ser pecaminoso?

-Es el sexto mandamiento, no es el primero. Es más importante honrar padre y madre, por ejemplo.

Complicarse la vida

-En su exhortación, Francisco dice que la comunión "no es un premio para los perfectos, sino remedio para los débiles". ¿Ahora se va a poder comulgar sin haberse confesado?

Sofía se ríe a carcajadas: "No creo que se refiera a eso. Lo que pasa es que ¿quién se considera el perfecto que merece la comunión? El que no tenga pecados que tire la primera piedra. Al final del día, lo que tenemos que lograr es ser la mejor versión de nosotros mismos, y esa 'mejor versión' debe ser física y espiritual.

-Hay quienes han interpretado los dichos del Papa como una puerta para que los separados y vueltos a casar puedan comulgar...

-Podría ser, pero no lo dice así tal cual. Lo que sí sabemos es que se viene un nuevo sínodo, que precisamente va a tratar la pastoral matrimonial y el tema de los divorciados. Pero lo que el Papa trata de decirnos es que no podemos ser fariseos.

Fue a estas alturas de la conversación que me atreví a preguntarle a Sofía por una inquietud que me surge de vez en cuando.

-¿A veces no te dan ganas de no ser católica y así sentirte más libre, sin tener que rendir cuentas a nadie?

-Yo me siento super libre. Soy muy libre. No necesito ser una reventada o dejar botado todo lo que he construido. Mi vida, gracias a Dios, han sido elecciones de felicidad. Es mi receta del éxito. No me imagino de otra forma, no sabría qué hacer (...) En algún momento, más chica, tuve esa inquietud, fui rebelde, porque yo no nací en un monasterio. Probé distintas cosas. Tuve dudas de fe... pero en esa etapa, en el fondo, no fui feliz.

-¿Hoy sientes que eres la "mejor versión" de ti misma?

-No.

-¿Qué te falta?

-Llegar al Cielo. Me falta que mucha más gente a mi alrededor conozca a Dios. Urgirme por eso. Los católicos tenemos que despertar. Me da mucho susto que de a poco vamos creyendo que la fe se vive sólo en un ámbito privado, que pensemos que por ser católicos no podemos opinar de todos los temas.

-¿Qué influencia crees que le corresponde a la Iglesia en un Estado laico como el nuestro?

-Chile es un país de raíces cristianas y la Iglesia es una experta en Humanidad. Su misión es que los hombres logren la felicidad. Entonces, si tienes una consultora experta en temas de desarrollo humano, con 2 mil años de experiencia, ¿por qué no le vas a dar un espacio a su opinión?

-Pero ha perdido influencia... sobre todo después de los escándalos sexuales de algunos sacerdotes.

-Mira. Ser católico no está de moda. Sabemos que hay escándalos, y quizás hasta vengan más. No hay que defender lo indefendible. Pero eso no quiere decir que Cristo se haya equivocado y que fundó una Iglesia que no debería existir.

¿Católico practicante?

-¿Por quién vas a votar?

-Eso es privado

-¿No hay una candidata que les dé más garantías a los católicos?

-Yo creo que hay que estudiar los programas a fondo y ver que haya una jerarquía de valores. El derecho a la vida es un derecho que sin él no existe ningún otro. A los católicos nos importan muchos más valores que simplemente el valor del PIB per cápita. Yo llamo a votar en conciencia, no en inconsciencia.

-El Papa ha insistido mucho en la idea de ayudar al prójimo, al más necesitado. No basta, entonces, con ir a misa el domingo para definirse como un "católico practicante".

-¡Claro que no!

-En el barrio alto hay algunas iglesias en las que las misas son un evento social, donde la fila de la comunión parece una pasarela.

-Por eso Francisco nos está llamando a una conversión. Dice que necesita "evangelizadores convertidos, conocedores de la misión". Cristo siempre tuvo predilección por el pobre y el más débil. El Papa dice "quiero que toques las heridas, que estés en la miseria". Y no se trata de irse a la India: alrededor tuyo siempre hay gente con necesidades, materiales o espirituales.

-Su exhortación, entonces, viene a complicarles la vida a muchos católicos.

-Pero si de eso se trata. Cristo no vino a invitarnos a un spa. Vino a remecernos. "¡Ponte las pilas!", nos dice. No hay que consumir la vida, hay que vivirla. Lo otro es ser un aprovechador. La vida vale la pena cuando uno, al final del día, llega agotado a la casa, habiendo dado todo por los demás.

-¿Y para qué sirve rezar?, ¿qué sentido tienen las cadenas de oración?

-Para ejercer presión. Rezar es pedirle a Dios, igual que un niño chico que catetea, al final el papá le da en el gusto. Dios es Padre y te da lo que considera mejor para ti. Las cadenas de oración deben ser una presión muy grande para Dios: es como cuando los sindicatos se van a huelga... ¿qué hace el big boss ? Al final tiene que ceder.