La Policía de Investigaciones (PDI), a través de la oficina de Interpol Chile, colaboraba desde hace más de dos meses con la investigación abierta en España, contra los chilenos detenidos hoy por colocación de artefactos explosivos en ese país.
Luego que la Policía Nacional española abriera a principios de año una investigación por el bombazo de febrero en la catedral de Almudenas, los primeros días de septiembre la oficina de Interpol Madrid tomó contacto con su símil en Chile. “Comenzamos a cooperar en el sentido de confirmar la identidad de los ciudadanos chilenos que estaban allá y aportar con información de fuentes abiertas, respecto de la participación de estas personas en hechos de la misma connotación ocurridos acá en Chile”, señaló el subprefecto de la PDI y jefe de Interpol en nuestro país, Pedro Cuevas.
La indagatoria en intensificó tras el nuevo atentado del 2 de octubre en Zaragoza, aunque el expediente abierto por la Audiencia Nacional tiene el carácter de secreto por tratarse de delitos de índole terrorista.
Cuevas confirmó además que en las detenciones efectuadas esta madrugada en Barcelona, junto a Francisco Solar y Mónica Caballero fue arrestada una tercera ciudadana chilena, no obstante “no estaba siendo investigada ni es parte del proceso por colocación de bombas si no que es conviviente del ciudadano argentino que fue detenido”. La quinta detenida es de nacionalidad italiana.
Aunque los detenidos hasta ahora son todos extranjeros, Cuevas recalca que aparecen vinculados “a un grupo anarquista español”.
La Interpol informó que Solar salió de Chile en agosto del año pasado, con destino a Argentina, mientras Caballero abandonó el país en octubre del 2012, directamente hacia España.
Consultado si se han chequeado las salidas del país de los otros implicados en el caso, dijo que por el momento “no hay nada que informar al respecto”.
Los detenidos pasarían a disposición de la Audiencia Nacional el viernes o sábado, y ya se requirió el envío desde Chile de sus huellas dactilares, cuando sean prontuariados, aunque Cuevas afirmó que con las fotografías y otro material recibido su identidad esta “absolutamente comprobada”.